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Yosano iba a paso lento, pero seguro, transladaba su mirada de momento a otro hacia su acompañante. La mujer de rojo. Cada doce segundos, contó Kouyou.

Era una mafiosa, esta era su rutina diaria. Observar, analizar, y estar lista si hay que atacar.

Por eso mismo, recordaba a la pelivioleta de aquella vez en la cafetería de la agencia.

Sin embargo, no está segura si la chica a su lado sabe que sabe eso.

(...)

Kouyou no entendía como es que se encontraba tan encantada, tan alegre, tan viva. Podía asegurar que hace menos de media hora su mente trabajaba a toda máquina siendo precavida en cada uno de sus pasos.

Pero ahora...

— ¿Sabes donde estaba la el desdichado bisturí?¡Junto a los utensilios de cocina! — la doctora recordaba con risas ese evento de meses atrás — Vaya susto que tuve...

Kouyou intentaba contener su risa, de veras. Pero algo de esta chica le intrigaba. ¿Qué era?

— ¿Como llegó ahi?- entre risas cuestionó — ¡Por borracha!

Se lanzó hacia atrás, su otra mano viajando por la cálida arena de la playa de Yokohama.

— ¿Tomaste mucho? — replicó. Ya hace un rato había dejado la formalidad — Como me placería verte así de torpe.

— No soy torpe — dijo con puchero Yosano-solo soy mucho más encantadora que como soy habitualmente.

— Sí, clarodijo sarcástica, a su vez rodaba sus ojos. Como una normal jóven a sus veinte años. No una mafiosa. Era peculiar....

-Pero sí te daré algo, en verdad encantadora.

-Pues claro~ aunque tú también eres encantadora....-La doctora cortó sus palabras y abrió los ojos como platos — Espera..¿Cómo te llamas?

Kouyou le miró, pero se echó a carcajadas(ahora ya le duele el estómago) por la situación,ella tampoco se había percatado que llevaban casi una hora juntas y ni eso saben.

-Kouyou Ozaki-Respondió una vez más calmada.

-Yosano Akiko, un placer conocerte, Kou-kun.

(...)

Ya iban veinte minutos de película cuando Atsushi se fijó en como Akutagawa, quien se situaba a su lado, continuamente regresaba su visión a él cada unos cuantos minutos. Con los ojos semicerrados(por no haber dormido la noche anterior) se acercó un poco más al mafioso.

-¿Qué pasa?-susurró, no queriendo distraer a Chuuya, quien veía encantado la pantalla.

-Si estás tan cansado, sólo duérmete-replicó, el menor abrió sus ojos en sorpresa-No, la película está buena.

Akutagawa frunció el ceño — Otro día la vemos — dijo y tomó fuertemente del cabello blanquecino de Nakajima para posar su cara sobre su hombro — Ahora, duérmete.

Al otro lado del sofá, Dazai intentaba contener sus carcajadas. Esos dos de verdad creían que no se escuchaba su conversación. A la vez, también se daba un chócalas interno, pues su plan ya empezaba a dar resultados.

Ahora tienen una "reunión" prometida, y un poco más de contacto físico. Eso ya saciaba sus ganas de verlos próximamente como el Nuevo Doble Negro.

Y hablando de Doble Negro, por su parte, Chuuya amaba la película como siempre que veía una con niños o animales en ella(por experiencia de Dazai...La vez que vieron Bambi no salió muy bien).

♡𝚅𝚎𝚛 𝚝𝚞 𝚂𝚘𝚗𝚛𝚒𝚜𝚊♡Donde viven las historias. Descúbrelo ahora