♡𝚅𝚎𝚛 𝚝𝚞 𝚂𝚘𝚗𝚛𝚒𝚜𝚊♡

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Con la mención de sangre, Yosano se tensa y examina desde su puesto qué sucede. No son cortes o heridas, eso es seguro.

Bien reconoce como el prominente color proviene de la parte baja de su amigo.

- ¡Ranpo-san!

El mencionado se encuentra congelado en su puesto, ni siquiera pestañea cuando su pareja le sacude aterrorizado.

- Ranpo, estás sangrando, eso no debe ser bueno...Oh por dios... ¡Hey, responde!

No tarda mucho para que Poe se vuelva una bola de nervios. Los pensamientos recurrentes de hace días regresaron después de que ya los hubiera descartado.

Y ahora mismo, ni siquiera sabe qué hacer. Solo tiembla e intenta hacer que Ranpo reaccione, pero este tiene los ojos en blanco como si estuviera desmayado o al borde de ello.

Los demás presentes empezaron a caer en cuenta del disparate que se ha formado en el extremo de la agencia. Inconscientes de la situación, uno que otro aún admiraba el espectáculo que seguiría por largos minutos.

Cuando Yosano finalizaba de chequear el aún presente pulso del mayor, Fukuzawa llega. Su rostro está pálido, sus manos no se ven igual de dóciles como de costumbre y sobretodo, en sus ojos se presencia la determinación por hacer algo.

Poe sostiene a Ranpo sobre sus piernas para así este no quedara recostado en el suelo. Así no tardarían mucho, puesto que la mirada desconsolada de Yosano le rectfica que tienen que sacarlo de allí.

Kunikida se acerca con la mayor discresión que domina y busca hablar con el presidente.

- ¿Dónde está Kenji? Ya llamé a una ambulancia, si él carga a Ranpo-san, podremos llegar más rápido a la salida del parque - Exclama viendo a todas partes - Necesitamos su habilidad ¿Para dónde cogió?

Atsushi estaba a un lado, nervioso, ignorando por completo a Akutagawa, se acerca a Kunikida con las yemas de sus dedos en su boca toda temblorosa.

- Kunikida-san, él se fue con Kyouka-chan a buscar refrigerios...

- ¡Maldición! - Chilla Allan, quien junto a Yosano intentaban levantar el desvanecido cuerpo de Ranpo, pero incluso entre los dos, su peso muerto era mucho.

Ahora sí, los presentes cayeron en cuenta de que algo malo sucedía.

Poe lo pensaba, simplemente no se permitía exterminar el pensamiento...

Alguien morirá.

Alguien morirá.

Alguien morirá.

Alguien morirá...

- ¡Poe-san, ahora no se eche para atrás!

Poe sale de sus pensamiento por aquel llamado de Fukuzawa, quien se acerca a él y deja a un lado todo en su posesión para tomar a Ranpo en brazos.

Cuesta más de un instante recomponerse, ponerse de pie y correr tras de él. Kunikida se queda atrás junto a Atsushi, que persiste en su estado e intentan disimular la partida de los tres.

Lo último de lo que Fukuzawa se fija antes de retirarse, es la mirada de Mori, quien observa a Ranpo un instante y luego sube a cruzar miradas con él.

Con gesto de sus labios, Mori le afirma una sola palabra. Se sentía más como si dejara algo a su elección. Le ilustraba un claro - Ve.

Yosano y Poe van detrás, la primera abrió su teléfono y abrió el calendario. Sin parar sus pasos, ella le muestra la pantalla. Entrecerrando sus ojos, el mayor intenta descifrar qué busca decirle - ¿Qué significa eso?