♡𝚅𝚎𝚛 𝚝𝚞 𝚂𝚘𝚗𝚛𝚒𝚜𝚊♡

26

Las luces de la ciudad son ténues, mientras caminaba veía de reojo aquellos borrachos camino a casa, si es que la tienen. Varios de ellos cruzarían una avenida sin mirar y alguien los arrollaría.

Esto ya es normal en las frías y solitarias noches de Richmond, Virginia.

Contó seis días sin comer. Talvez un mes o más desde haber huído. Estaba mugriento, tanto así que hace unos días un mapache intentó comer su camisa y desde entonces le acompañaba.

Karl, así lo había nombrado.

Sin embargo, a pesar de ya no estar solo completamente, había algo dentro de su pecho que titilaba al són de su corazón.

El poco sueño que conciliaba lo atormentaba con odio y desprecio, cada respiro inhalado y exhalado se siente como si fuese a ser el último. Y cada vez que pestañeaba un terremoto zarpaba contra sus ojos.

Edgar subió la mirada, una escasa luz titilaba en el cielo oscuro y muerto, ausente de vida, en ella sí había hoy. Era lo que había oído ser un avión, un auto que volaba y te podría llevar a donde quieras.

Jamás había estado en uno de esos, mucho menos se imaginaba en un futuro estándolo, apenas le alcanzaba para una jarra de agua, ya tendría para un ave tecnológica.

Sin embargo, una parte suya se imagina muy en el fondo, un viaje a los altos y soberanos cielos. Desde donde todo se ve nulo, lugar que da a ver aquello que nuestra mente nos ha querido ocultar. Desde allí, no somos nada realmente. Un grano insignificante y sin legado en una basta arena infinita.

"¿Cuál es mi legado?"

Nada

Nada, es lo que somos. Ni estando mil metros sobre la tierra seremos más. Pero su valor está donde esa altitud te lleve.

¿Te dirigirá a los mejores días de tu vida?¿O será otra de las innumerables pesadillas que conlleva esta vida?

Poe se preguntaba a donde irán esas personas en ese avión.¿Llegarán? ¿Allá serán felices?

No lo sabe.

Pero podía jurar que sentía ese zumbido en su pecho ahora, eran las turbinas de esa nave. Tan fuertes y ensordedoras.

Un sueño dentro de la pesadilla que es la vida,

Un sueño dentro de un sueño...

★

Podía oír como el motor de esa nave fallaba, y ya tenía el sentimiento de caída corriendo por su piel, estático por el hecho de rápidamente incrementar su respiración a hiperventilación.

Ranpo no logró darse cuenta al principio, no hasta que se acercó a sostener la mano que temblaba de Poe,  indulgido en temor.

—R-Ranpo-kun, no me dejes, por favor...— Rogó con voz temblorosa y sosteniendo con fuerza la mano del menor, quien se preocupó al instante. Si tan solo fuese más fuerte—

—¡P-Prometo ser mejor! Lo que sea necesario para que sea digno de tu trato y el de nuestro hijo, juro que si me permites permanecer aquí j-jamás me iré, estaré para ustedes noche y día, cuando sea que me necesites, estaré para darte todo lo posible en este mundo. Y sé que soy patético— quebró en llanto, ya imaginándose lo ridículo que ha de verse— p-pero te lo suplico, querido ¡No me dejes!