♡𝚅𝚎𝚛 𝚝𝚞 𝚂𝚘𝚗𝚛𝚒𝚜𝚊♡

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El auto había sido rodado de un extremo de la vía hasta la vitrina de una tienda en la esquina. El fuerte golpe a la parte trasera del auto habría hecho que se perdiera el control.

(...)

La mirada le intimida leguas, como va de su compañero a ella podría significar muchas cosas. No obstante, es del presidente de quien hablamos.

Bien sabe que es en són de preocupación. Ranpo aún no despierta, no sufrió ninguna concusión, pero los médicos creen que se desmayó por el shock.

A Yosano se le había enyesado el tobillo, ella estaba del lado contrario al impacto del auto, pero si del lado que chocó contra las vitrinas. Por sus brazos tiene múltiples cortes, pero nada grave.

Le preocupa Ranpo, sus párpados se ven pequeños, más que más temprano. Afortunadamente, solo se fracturó la muñeca, los exámenes para determinar si afectó de alguna forma al bebé dentro suyo aún están ejecución.

— Presidente ¿Qué fue del auto? — Pregunta la chica, el hombre ahora se gira en su puesto para darle la cara.

— Se lo llevó el seguro, por cierto, muy bueno, dentro de unos días lo devolverán con los daños enmendados. Los costos médicos se le cobran al otro conductor. Ya están construyendo un caso en su contra por delito de lesiones personales culposas. Pero si a Kichirō le pasa algo, no le irá bien...

La doctora mira a Ranpo preocupada y luego fue a Fukuzawa —¿Poe-san ya sabe de lo ocurrido?

— Lo llamé incluso antes que a la aseguradora.

Ambos comparten el sentimiento de angustia y empatía. Saben muy bien cuánto Poe ama a Ranpo y a su hijo, si esto llegase a escalar a algo peor, temen por lo que sucedería.

Fukuzawa suspira con el dolor de su alma, le preocupa su niño y no hay nada que pueda hacer desde su posición.

—¿Cree usted que "No debes morir" sería efectivo en caso que..?

El hombre levanta una mano y abre su palma, simulando un "detente", Yosano se echa hacia atrás.

— Si funcione, no sé, sin embargo no hagas absolutamente nada sin el consentimiento de sus padres
¿De acuerdo?

Intimidada, Yosano asiente y se recuesta. Ella nota el fruncido del presidente, no es rabia ni odio, es tristeza y preocupación.

Él levanta su muñeca y mira la hora, la comisura de sus labios se encoge y exhala — Bueno, ya pronto serán las ocho, el tiempo de visita va a terminar. Así que partiré, intenta descansar por favor.

Yosano le sigue con la mirada hasta que este cierra la puerta detrás suyo.

— Ranpo-san, si estás fingiendo dormir por favor ya basta, me empiezas a preocupar.

De la otra cama vino un crujido seguido de un gruñido — ¿Tenías que arruinar mi plan? Quería escucharlo decir que me quería..

Yosano se le quedó viendo con incredulidad. Si no fuera porque Ranpo está altamente drogado le hubiese gritado.

En otra área de la clínica, Fukuzawa espera en el ascensor a que este baje a la primera planta. Piensa en mucho, en Ranpo, en Kichirou y sobre todo en Poe.
Sabe lo que es Ranpo para él y se pregunta si este evento sería una cicatriz en su relación.

El elevador timbra marcando que arribó a su destino, sin embargo, cierta conmoción fuera de este le llama la atención.

— ¡Tengo que verlo! ¡Por favor déjeme entrar, no tardaré!

La voz proviene del fondo del pasillo, que también es la entrada del edificio de habitaciones. No le hubiese interesado si no hubiera reconocido la voz.