Quédate

Viejos tiempos

Después de varios segundos en silencio, nos separamos y entramos a la sala de nuevo. Cuando nos sentamos su celular sonó.

-Diga?... Eh, hola Valeria. - Ella me miró, ¿Valeria la hermana de Lewis? ¿Es broma? -Si... Valeria no sé qué tenga que ver yo en esto... No Valeria... Ya te dije que no se, ¿espera que? - Se levantó de golpe y me miro. - Que tiene que ver ella en esto?... ¿Está loco? - A este punto la curiosidad me estaba matando y ella aún seguía hablando con Valeria. - Donde está?... Hablare con ella... Gracias por avisar... Está bien adiós. -La llamada término y se dejó caer en el sofá.

-Qué pasa?
-El idiota de Jacob enloqueció y te está buscando.
-Que?
-Eso, no soporto la idea de perder y te está buscando.
-Pero, para qué?
-Dice que tiene una propuesta para ti.
-Oh no, de nuevo con sus estúpidas propuestas? La última vez casi le rompo la cara por venir con la maravillosa propuesta de comprar las acciones de mi empresa.

Hable sarcástica pero enojada a la vez.

-Es diferente.
-Por qué? Que está pasando?
-Valeria me dijo que venía y había mandado traer su moto.
-Una moto? - Nos miramos y entonces lo comprendí. - Estas pensando lo mismo que yo?

Ella asintió y se llevó las manos a la cara.
-No Vanesa, no lo harás, sabes cómo resulto la última vez.
Hablo seria y recordé.

Flashback
Años atrás

-Señorita Vanesa, la señorita Alexa la está esperando en la sala.

-Dígale que ya bajo.

La señora de servicio asintió y se fue. Sonreí tontamente ya que hoy era mi cumpleaños y Alexa tenía una sorpresa para mí.

Bajé y la vi sentada conversando con Ricardo.

-Bueno niñas a donde irán – Preguntó y rodamos los ojos.

-Ya no somos niñas tío, es más, tu hija aquí presente ya tiene 17, toda una adolescente ¿no?

Ricardo hizo un puchero y se acercó a mí, me tensé de inmediato y di un paso atrás

-A dónde iras?

El se detuvo apenas di un paso atrás.

-Realmente no lo sé, Alexa dice que es una sorpresa.
-Los escoltas irán con ustedes.
-Pero tío!

Lexa se quejo y Ricardo estiro una mano en mi dirección, la tome y el la apretó, sonreímos y miramos a Alexa quien estaba cruzada de brazos y parecía enojada.

-He dicho que los escoltas irán con ustedes y punto final.

Él hablo tranquilo y dio otro suave apretón a mi mano.

-Que aburrido...- La escuche decir y solté una risa.
-Te escuche mocosa. - Ricardo habló y soltamos una carcajada.
- Ya, lo siento, Vanesa ya vámonos.

Asentí y cuando iba a caminar la mano de Ricardo que aun sostenía la mía me detuvo.

-Cuídate.
-Lo haré, no te preocupes.

Se tomó un momento y me soltó finalmente. Aveces era un tanto sobre protector .
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-Estas segura de esto? -Asentí. -Bien, recuerda mantener tus ojos en la carretera, no mires a tu alrededor, solo acelera y gana, esto es tuyo hermana.

Lexa me paso el casco y encendí mi moto.

Luego de burlar la seguridad de mi padre, llegamos a la zona industrial abandonada donde se hacían las carreras ilegales.

Sí, así es, a mis 17 recién cumplidos era una rebelde sin causa. Le había pedido una moto de cumpleaños a Ricardo, pero él se había negado rotundamente, se la había pedido a Marcela y había pasado lo mismo, pero el tío Christopher me la habían regalado a escondidas. Ya sé de dónde venía el carácter y la manera de ser de Alexa.

Me la habían dado cuando cumplí 15, era una niña aún y por eso se habían negado a dármela, pero con ayuda de mi prima adorada logré que sus padres me la dieran con la condición de que no hiciera alguna locura, obvio eso se fue a la mierda cuando empecé a participar en las carreras ilegales.

X: ¡Corredores a sus lugares!

Lexa me dio un golpe en el casco y me dirigí al lugar correspondiente. Al llegar la multitud se reunió a mi alrededor y espere al otro corredor. El ruido de un motor me hizo mirar atrás y seguí con la mirada la moto que llegaba a mi lado.

Aun con mi casco puesto mire a Alexa.

-Que sabes del corredor? -Pregunté y ella sonrió nerviosa.
-No es tan bueno pero....

-¿Pero?

Ella no respondió, simplemente señalo con la cabeza y mire de nuevo al corredor quien se había quitado el casco. A la mierda....

-Ferrer - Mire al tipo y rodé los ojos quitándome el casco.
-Lewis - Sonrió superior y se recostó en el manubrio de su Ducatti Diesel Monster 1100 EVO azul.
-Este no es lugar para niñas - Levante una ceja y sonreí sin gracia.

Quizá era muy niña para estar aquí, pero mi talento decía otra cosa.

-Tal vez, pero si sigues hablando te haré pedazos.
-Quiero ver eso, niñita.- Me miró mal y se puso su casco encendiendo su moto.

-Patéale el trasero hermana.

Habló a mi lado y asentí encendiendo mi Ducatti negra.

-Vamos bebé, esto es nuestro.

Murmuré a mi moto y miré a la chica en sostén y shorts quien agitaba un pañuelo en su mano.