Especial

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Narrador X
El beso termino y Michelle se recostó sobre Vanesa quien abrió sus piernas y dejo que se acomodara entre ellas.

-Son los nombres de los niños.

Michelle hablo delineado los tatuajes y Vanesa asintió.

-Me los hice hace algunos meses.
-Por qué? - La empresaria frunció el ceño y entrelazo su mano con la de Michelle.
-Bueno...- Empezó a hablar y puso sus manos entrelazadas sobre su cicatriz.-Esto marcó una parte de mi vida, desafortunadamente fue una parte oscura y horrible, pero esto.- Movió las manos y las dejo encima de los tatuajes.-Esto marco una parte especial y maravillosa, quiero llevar el nombre de mis hijos para siempre, para recordar lo afortunada que fui de encontrarlos.

La empresaria miro los ojos de Michelle y esta sintió su cuerpo temblar ante la intensa y penetrante mirada de Vanesa.

-Te amo Michelle y nada me haría más feliz que te quedaras conmigo para siempre.
-Pero...
-Shh. No quiero una respuesta inmediata, quiero que estés segura de tu decisión y que vuelvas a confiar en mí.

-Confió en ti.
-Lo sé, pero quiero que esa confianza crezca, al punto de que entiendas que todo lo mío es tuyo, que me apoyes y comprendas que mi vida de empresaria no solo me rodea a mí, sino que de ahora en adelante, los rodeará a ustedes, serán parte del vínculo empresarial y el cargo que esto conlleva.

-Entiendo, pero...

Se detuvo cuando la empresaria se levantó y busco su saco en el suelo, se puso sus bragas y su camisa, buscó algo dentro del saco y se sentó en la cama donde Michelle se tapaba con las sabanas y miraba curiosamente a Vanesa.

-Que haces? - Abrió la boca ligeramente al ver la caja negra de tercio pelo que Vanesa sostenía en su mano. -Oh no, dime que no es lo que estoy pensando Vanesa.

Habló asustada y la empresaria se mordió el labio.

-Antes de que salgas corriendo quiero que me escuches.

Hablo seria y Michelle trago saliva, la empresaria tomo su mano izquierda y dejó un tierno beso en el dorso de esta.

-Te amo. - Hablo tranquila y con la mano libre abrió la caja y revelo el hermoso anillo. Lo saco y miro a Michelle. -Quiero que seas mi esposa, no hoy, no mañana, tal vez en unos años, o cuando tú quieras. Este anillo va a representar que eres mía y lo serás siempre, no nos vamos a casar ahora, pero quiero que todos te conozcan como la futura señora Ferrer, que seas mi prometida y que confíes en que jamás te haré daño de nuevo.

-Vanesa...- Susurro con lágrimas en los ojos.
-Quédate conmigo, esta vez para siempre.

Michelle no respondió, sino que se lanzó y abrazo a la empresaria quien casi deja caer el pequeño objeto, devolvió el abrazo y respiro hondo tratando de eliminar las lágrimas acumuladas en sus ojos.

-Te amo demasiado.

Michelle habló en voz baja y se separaron un poco para verse a los ojos y sonreír sintiendo los miles de sentimientos revelados.

La empresaria tomo la mano de Michelle con cuidado y sin despegar sus miradas fue colocando el anillo en el dedo anular de Michelle quien la veía con amor y adoración.

-Te amo. - Colocó el anillo por completo y dejó un beso en el.

Mostró su encantadora sonrisa y Michelle se mordió el labio mirando el objeto que ahora ocuparía lugar en su mano, miro a Vanesa de nuevo y se lanzó sobre ella riendo.

-Te das cuenta de lo que esto representa? - Preguntó divertida.
-Así es.
-Y sabes también que estarás atada a mí de por vida?
-Lo sé.
-Y también eres consciente que las mujeres que babean por ti se volverán locas cuando se enteren?

La empresaria soltó una carcajada y paso los brazos por la cintura de Michelle.

-Tu eres consciente de que serás la mujer más envidiada del país?

Respondió con otra pregunta y Michelle se quedó pensativa.

-Me perseguirán locas obsesivas enamoradas de ti?

Esta vez fue la empresaria quien se quedó pensativa y Michelle soltó una carcajada.

-Vaya pareja la que me toca.

Michelle bromeó y la empresaria abrió la boca indignada inclinándose para hacerle cosquillas.

-Muy graciosa no? - Preguntó sobre ella mientras capturaba con sus manos las de Michelle y las ponía sobre la cabeza de esta.
-Qué tal si terminamos lo de hace un momento? No sabes cómo estoy.

Hablo excitada y se inclinó para besar el cuello de Michelle quien sonrió y cerró los ojos dejándose consumir por el placer.

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