Quédate

La luz de mis ojos

Al día siguiente por fin era sábado, lo cual significaba....

- ¡Mami! ¿Vamos al parque? Por fa por fa.

Tapé mi cabeza con las cobijas y apreté los ojos.

-Sofí quiero dormir princesa.
-Yo quiero ir al parque.

Me quitó las cobijas y saltó encima de mí, se sentó a horcajadas y me miro cruzada de brazos.

-No quieres dormir con mami un rato?
-No, quiero ir al parque.

Rodé los ojos y la tumbé a mi lado escuchando su risa.

-Duerme conmigo bebé.
-No mami, Quiero ir al parque para jugar con Esben.

Estaba agotada, solo quería dormir todo el día, pero mi hija me pedía que la llevara al parque así que...

-Tomaré una ducha rápida vale?
-Sii, te amo.

Me gustaba la parte del "Te amo" eso hacía que mi corazón saltara de alegría, ese era mi premio y no había nada mejor que aquello.

-Yo te amo más princesa.

Dejó un beso rápido en mi mejilla y saltó de la cama.

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-Buenos días.
-Buen día cariño.

Damian ni me miró y despeine su cabello.

-Dormí contigo acaso?
-Buen día ma.
-Buen día hijo como estas?
-Bien, y tú?

Deje un beso en su cabeza y repose mis labios allí.

-Bien.

Las cosas no iban mejor, pero no iba a forzar nada, él quería su espacio y yo lo iba a respetar.

-Y como amanece mi bebé uh?

Me acerque a Michelle y lleve mis manos a su barriga.

-No ha dejado de patear desde anoche, has algo por favor.

Sonreí y dejé un beso rápido en su ombligo.

-Mi ángel, tienes que dejar de golpear a mamá, ella necesita dormir también.

No sentí nada más y Michelle suspiro.

-Por fin.

Reímos y nos sentamos a desayunar.
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-Mira mami, es igual a Esben?

Me detuve y me fije en lo que señalaba Sofí. Un perro Golden color blanco corría detrás de una pelota roja que su dueño había lanzado y Esben ladró.

-No te alejes mucho vale?
-No lo haré, vamos perrito.

El parque era seguro y no tan grande así que la deje ir y con Damian nos sentamos en el pasto.

-El tío Kevin volvió a Colombia?
-Nop, están ocupados haciendo algunas cosas para poder estar más tiempo aquí.
-Se quedaran para siempre?
-Mm tal vez.
-Me gusta, es divertido jugar con él, además también dibuja.
-Y dibuja bien?
-Oh sí, es muy bueno.

Sonreí y jugué con la yerba del suelo.

-Que te gustaría hacer después de que salgas del cole?
-Tengo que ocuparme de tu empresa no?
-Solo si quieres hacerlo, si no te gusta no hay problema.
-Me gustaría estudiar dibujo.
-Diseño gráfico.
-Si.
-Bueno, estudia lo que quieras siempre y cuando eso te haga feliz.

Hizo una mueca y se apoyó en los brazos hacia atrás.

-Me gusta la empresa, quiero ser como tú, ser importante y tener mucho dinero.
-No necesitas ser como yo para ser importante, si estudias dibujo serás el mejor y así mismo serás importante.
-No ganaría tanto dinero.

Habló pensativo y sonreí.

-El dinero no lo es todo hijo.
-Es verdad, pero no me importa, quiero tener mucho dinero.

Nos miramos y sonreímos.

-Que acaso no sabes que eres uno de los niños más ricos del país?
-Lo soy?

Habló confundido y asentí.

-Mi dinero es tu dinero, y voy a heredarte mucho cuando seas mayor.
-Entonces no necesito estudiar.
-Oh, pero claro que estudiaras, ni creas que te vas a quedar de vago toda la vida.
-Ass.

Se quejó y reímos.

-Se siente raro sabes?

Le di una mirada rápida a Sofí quien jugaba con Esben y mire a Damian.

-El que?
-Todo, no lo sientes?
-Sentir que?
-Nuestra relación ha cambiado, ya no jugamos como antes, ya no soy el niño de tus ojos, ya no soy tu preferido.

No parecía herido ni enojado, solo.... Confundido.

-Los chicos crecen hijo, y sus intereses cambian, entendí que tú ya no quieres jugar a las escondidas, y está bien, tienes doce años, es obvio que no quieras hacerlo, te entiendo, yo también pase por eso, pero sabes que nunca cambia?
-Que.
-El amor de madre hacia su hijo, eso jamás va a cambiar, estoy asimilando la idea de que ya no eres mi bebé, seguirás creciendo y veras que con el tiempo nos alejaremos más y más, tu tendrás tu espacio y no me queda más que respetarlo, y está bien, son etapas de la vida hijo.
-Pero yo era tu preferido, yo era tu todo.

Ahora si parecía herido.

-Lo sigues siendo, pero tu mami y Sofí también tienen ese título, ustedes son mi todo, son la luz de mis ojos Damian, entiende que no puedo quererte más que a Sofí.
-Pero ahora quieres más al bebé que a nosotros.

Suspire y pase mi brazo por sus hombros.

-Tu hermanito ahora es mi todo, y veras que cuando seas padre lo vas a entender también.
Los amo a los tres, a todos por igual, y no quiero que pienses lo contrario de acuerdo?

Asintió y se recostó sobre mí.

-Cuando ángel nazca algunas cosas van a cambiar, él va a necesitar nuestra atención absoluta y no quiero que pienses que los estamos dejando de lado a ustedes, pero con tu mami debemos cuidar muy bien de él, entiendes?
-Sí, no te preocupes.
-Sin embargo, si algo no te gusta, no dudes en decírmelo, para mi es importante saber lo que piensas y cómo te sientes.
-Prometo que lo haré.
-Eso es, ves que hablando todo es más sencillo? Te amo monito.
-Yo más mami, mucho más.

Sí, definitivamente era el mejor premio que podía recibir. Dejé un beso en su cabeza y cerré los ojos.