Quédate

Definitivamente soy...

La música sonaba a todo volumen por toda la casa, los tragos de cerveza, whisky, vodka, y otros licores iban y venían sin parar. Varias parejas se habían adueñado de los sofás y los habían tomado de camas donde parecían querer comerse sus bocas.

Después de haber conversado y molestado con los chicos cada uno se metió en su mundo. Sam había llegado hace poco y se había ido con Lety y Gaby perseguía chicas sin cansarse lo cual me daba risa.

-Hey enana ven acá.

Rasec me llamo y fui a la cocina, abrí la boca ligeramente cuando vi la mesa llena de bolsas de marihuana. Sonreí y me senté mientras me pasaban varios cigarros. Julian y Rasec los encendieron primero y luego me les uní. Reímos como idiotas de cosas sin sentido y pasaron unos minutos hasta que llegó Alessia y se sentó en mi regazo.

-Hey que haces.- Hable sonriendo y ella me correspondió.
-Te estaba buscando.
Puse una mano en su cintura y con la otra lleve el cigarro a mi boca. Inhalé el espeso humo y cuando lo fui a soltar la boca de Alessia tapó la mía y lo inhaló ella.

-Eso es excitante. - Hablo cerca de mis labios y sonreí como idiota. Tal vez porque ella tenía razón o simplemente era el efecto de la marihuana.

Levante mis caderas un poco y ella entendió el mensaje, abrió las piernas y las puso a cada lado presionando el lugar entre mis piernas que pedía atención.

Miré por encima de su hombro y Rasec me hacía señas obscenas con sus manos, le mostré el dedo medio y ellos rieron saliendo de la cocina.

-Deberíamos ir a otro lugar.
Ella hablo en mi odio mientras se movía levemente y hacia presión entre nuestros centros.
-Por qué no nos quedamos aquí?

Mi mano apretó su cintura haciendo más fricción.

Sin pensarlo dos veces, ella se movió sobre mí y cerré los ojos disfrutando.

-Delicioso. - Gemí y dejé el cigarro a un lado para tomar su cintura con ambas manos y hacer más presión. -Más rápido. - Ella me hizo caso y empezó a besar mi cuello. A la mierda el auto control, y a la mierda todo.

Una chica entro a la cocina y nos miró con la boca abierta.

-Ocupado cariño, largo.

Hable fuerte y ella salió de prisa, la risa de Alessia se perdía entre sus jadeos y como pude metí mi mano entre su diminuto short y desapunte los botones.

Ella bajo el ritmo del movimiento lo cual permitió que yo pudiera meter mi mano entre su ropa interior. Cuando lo hice gemí fuerte y la miré.

-Estas empapada.- Acaricie sus pliegues y ella cerro los ojos mordiendo su labio inferior.-Soy yo quien ha causado esto?
Deslice mi lengua a lo largo de su garganta y llegue a sus labios donde utilice mi lengua para separarlos y besarla.-Quieres que me encargue de eso?
-Hazlo.- Empujó sus caderas pero yo saque mi mano llevando mis dedos a su boca para que se probara ella misma.

-No aquí bebé.- Hable nublada de deseo al verla lamer mis dedos.

Mi cerebro se había ido de vacaciones a la India y no sé cuándo volvería, mi corazón había dejado de luchar contra el deseo y se había rendido dejando a cargo la lujuria y el placer.

Nos levantamos y encendí otro cigarrillo mientras ella entrelazaba nuestras manos y me guiaba por la escalera. En mitad del camino nos encontramos con Julian quien me ofreció un vaso transparente con liquido azul. Pregunte que era, pero me ignoro y se fue, me encogí de hombros y lo lleve en mi mano.

La parte racional me decía que estaba mal, que la iba a joder hasta el fondo, pero simplemente no entendía y seguía caminando detrás de Alessia.

Cuando llegamos a la habitación me senté en la cama y terminé mi cigarrillo. Alessia se empezó a desvestir y yo la mire siguiendo cada uno de sus movimientos. Le di un sorbo al extraño liquido e hice una mueca la cual desapareció apenas me fije en la figura desnuda de Alessia frente a mí, trague saliva y tome lo que restaba del líquido de un solo golpe.

Adiós auto control.