- ¿De verdad quieres saberlo? - Su tono era un poco duro.
¿Si quería saber? La información desconocida había estado rondando en mi mente desde que había sido testigo de su vuelco contra Scott en el ring. Mi deseo de descubrir el gatillo a la ira de Justin superando la parte sensata de mí, la que me decía que dejara el tema.
- Sí.
Él me trajo más cerca, sus mechones cosquilleando mi piel en cuanto inclinó la cabeza.
- Te ahorraré los detalles. - Habló con disgusto. Sus mieles ojos fijos en los míos. - Me dijo que te llevaría lejos de mí. - La respiración de Justin se había incrementado.
El miedo se apodero de mi cuerpo, mis dedos se apretáron con sus palabras. Yo sabía que él podía decir que estaba asustada.
- Nunca dejaré que nadie te lleve lejos. Lo mataré si lo intenta... Nadie puede alejarte de mí. - La profundidad de su voz hizo que mi cuerpo temblara.
¿Llevarme lejos? ¿Qué significaba eso? Scott, amenazó con matarme? Justin me aferró a su pecho desnudo, el pánico tembloroso siendo absorbido en su cuerpo. Me sentí segura en sus fuertes brazos. Pero el caos arremolinándose en mi mente aún permanecía. Justin no dejaría que eso sucediera. Él mantendría a salvo. Él me lo había dicho en numerosas ocasiones.
Mis brazos se aferraron a su cintura. No estoy segura de cuánto tiempo estuvimos parados abrazándonos, pero el abrazo de Justin poco a poco calmándome. Su voz ronca silenciosamente me tranquilizaba, me reconfortaba. Besos fueron dejados en mi mejilla, tratando de atraer a una sonrisa.
- ¿Estás bien? - Susurró Justin.
Yo asentí ligeramente mientras me apretaba.
- Bueno... ahora déjame hacerte el amor.
Los eventos anteriores de la noche dejados en el olvido mientras yo tímidamente le sonreia al hermoso muchacho delante de mí. Con que rapidez podía convertir una situación. Di un paso atrás fuera de su control. Sus brillantes ojos mieles nunca me dejaron mientras cruzaba los brazos sobre mi estómago, las yemas de mis dedos encontrando el dobladillo de mi camiseta. Mi labio inferior fue tomado con dureza entre mis dientes mientras levantaba el material hacia arriba. Mi visión oscurecida mientras luchaba por quitarme la ropa en mi estado nervioso. Escuché una risa profunda antes de que sus grandes manos calientes descansaran sobre las mías, ayudándome a deshacerme de la barrera material. Una vez fuera, cayó al suelo.
El rubor en mis mejillas parecía calentar mi totalidad. Me quedé en sostén y jeans. Ambos topless mientras Justin cerraba la distancia. Labios suaves y carnosos instantáneamente sobre los míos, su lengua abriéndose camino en mi boca. No me resistí, mi cuerpo entregándose a él. Justin podía tener todo lo que le podía dar y mucho más. Yo era suya.
Mis manos se apoderaron de la parte posterior de su cuello. Mi corazón golpeando contra mi pecho mientras sentía sus dedos largos moviendo el botón de mis jeans. Di un grito ahogado en su boca mientras él tiró de la cremallera hacia abajo.
- Shh. - Justin consolando. - Está bien, bebé.