Guardaremos El Secreto

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Cooper me miró sentado en el suelo, su rostro parecía sorprendido, quizás porque no se imaginaba que fuera a hacer eso. Mientras Cooper estaba hundido en sus pensamientos Stevens miraba el libro en mi mano pero sin atreverse a decir nada.

—Creí que habías dicho que escribías sobre tus aventuras.

Dije comenzando a ojear el libro. Tenía algunos escritos aburridos al principio, pero lo más reciente eran dibujos. Uno del refugio, uno de todos frente a la chimenea en la noche nevada y los demás eran de Cuppa. 

—Deja eso, es mío.

Dijo sin dejar de mirar su libro, seguro estaba pensando la manera de quitármelo de las manos, pero tampoco es como si lo fuera a alcanzar tan fácil.

—Pero es mi hermana.

Dijo Cooper regañándolo con la mirada. Aquello fue graciosos y tierno viniendo de él, Stevens tenía las mejillas rojas sin saber que responder.

—Entonces Cindy tenía razón sobre tus sentimientos hacia Cuppa.

Dije pasando las hojas, él se ponía cada vez más nervioso.

—No, no es cierto.

Fue lo único que pudo responder. Cooper lo miró con un poco de pena.

—Ella está con Ender.

Dijo, Stevens lo miró asintiendo con la cabeza.

—Ya lo sé, ya dije que no es verdad lo que dice Cindy. Ella es una amiga, sólo eso.

Dijo, lo último apenas en un murmuro. Cooper se levantó y me miró. Le entregué el libro.

—No puedo creer eso, pero por tu bien espero que Ender no se entere, no lo conozco mucho, pero sí a su padre y... no es alguien agradable, mucho menos molesto.

Dije, él puso una expresión asustada pero no respondió nada. Cooper miraba algunos de los dibujos en el libro. 

—Es una amiga.

Volvió a decir, Skeleton soltó una carcajada desde las escaleras. 

—Síguelo repitiendo hasta que te lo creas.

Dijo guiñando un ojo en manera burlona, Stevens le dirigió una mirada molesta.

—Mi hermana no debería saber de esto, deberías tener más cuidado. O olvidarla.

Dijo Cooper entregando el libro. Stevens lo tomó suspirando un poco más relajado. Cooper comenzó a subir las escaleras sin decir nada más, parecía confundido por algo.

—Me pregunto qué tan agresivo puede llegar a ser Ender, parece un tipo celoso. 

Comenzó a asustarlo Skeleton, Stevens puso una cara asustada.

—Seguro que te parte en dos con sólo sus manos, sin esfuerzo alguno.

Siguió, negué con la cabeza notando lo asustado que estaba Stevens. Caminé hacia Skeleton.

—Tú serás partido en dos si  dices algo. ¿No ibas a agujerear la pared?

Dije empujándolo hacia el segundo piso, él me miró molesto pero no se calló.

—Nos vemos después...quizás.

Dijo riendo, negué con la cabeza.

—¿Acaso te pagan por ser molesto y decir tonterías?

Lo regañé cuando estuvimos en el segundo piso, lejos de Stevens. Él se encogió de hombros.

—Vamos, sólo me divertía un poco. No le diré a nadie. Es cosa de nosotros cuatro.

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