Sacrificio de Amor

Capítulo 134

Desde que subieron al auto con destino al consultorio de Megan, no cruzaron palabras o miradas. La mañana la tuvieron ocupada con la investigación que tenían en curso y el nuevo rumbo que había tomado cuando Kathy había dado a entender que ella tenía algo que ver con que Elliot saliera del juzgado el día anterior.

Antes de salir de la estación, Olivia solo preguntó si era posible que la doctora estuviera en su consultorio y no en casa ya que asumió que debía estar en sus últimas semanas de embarazo, Elliot le respondió con toda seguridad que ella trabajaría hasta el final. La respuesta le dejó un sabor amargo de boca a la morena al pensar en lo bien que él creía conocer a la psicóloga.

—Estamos aquí —anunció Elliot estacionándose.

—Estamos aquí —susurró Liv como respuesta, mirando y acariciando su barriga.

Él bajó del auto y lo rodeó para ayudarla bajar también.

"Es una mala idea estar aquí. No quiero saber si Elliot va a tener un hijo con otra."

Al ver que ella no se movía al abrir la puerta, tocó su brazo para llamar su atención. Le preguntó una vez más si estaba segura de querer acompañarlo y ella solo pudo asentir. No estaba muy convencido de su respuesta afirmativa, sin embargo, no hizo ningún otro comentario ya que él tampoco estaba seguro de lo que hacían y de las repercusiones que traerían a su vida.

Ambos contuvieron el aliento cuando se acercaron a la puerta y él tocó el timbre. En segundos la doctora estuvo en la puerta con su gran barriga, sorprendida de ver a Elliot una vez más ahí.

—¡Wow! Elliot Stabler me visita —Megan lo miró de pies a cabeza.

—Hola Megan.

—Esto parece un deja vu. Apareces aquí siempre que quieres compañía y... otras cosas.

Olivia había estado todo el tiempo detrás de Elliot por lo que no fue visible para Megan que tenía más visitas. La rubia delante de ellos, ex de su prometido y que probablemente estaba embarazada de él se le insinuaba, así que no pudo quedarse un segundo más como espectadora. Dio un paso a su izquierda y la cara de la doctora cambió.

—Capitana... Buen día. Me sorprende mucho más verla a usted aquí.

—Buenos días, doctora Hunt.

A ambas mujeres les fue difícil no enfocar su mirada en la barriga de la otra. Megan los dejó pasar y los guió hacia su oficina.

—Supongo que esto dejó de ser una visita en busca de compañía —le sonrió a Elliot y se sentó—. Pueden tomar asiento.

—Estoy bien de pie. Gracias —respondió Olivia observando las interacciones de Elliot y la rubia. Era estúpido sentir celos cuando sabía que no se habían visto en mucho tiempo pero aun así no podía apartar esos pensamientos de su cabeza.

—Mi secretaria fue a Starbucks por una deliciosa bebida violeta, mi antojo de las últimas semanas. Puedo hacer que les traiga algo.

—Gracias, Meg. Estoy bien —dijo Elliot y giró su cabeza para comprobar a Olivia que se movía inquieta por la habitación—. Liv...

—No... Y esto no es una visita de cortesía.

—Olivia...

—Bien. Creo que la Capitana ha dejado claro que no vino aquí con su Teniente para socializar —cruzó sus manos sobre el escritorio e intercambió miradas con ambos—. ¿En qué caso les puedo ayudar?

—No queremos hablar de trabajo, Megan.

—¿Consulta de pareja?

—No —respondió la morena lanzando llamas con su mirada.