Harry Potter pertenece a JK Rowling.
Star Wars pertenece a George Lucas (y a Disney)
Harén de Harry.
HP: Hermione Granger, Daphne Greengrass, Padma Patil y Susan Bones.
SW: Aayla Secura, Ahsoka Tano y Maris Blood.
Comenzar una nueva vida, en un hogar acostumbrado a la magia oscura, y tan apegado al deseo de la Sangre Pura, no fue fácil para Harry, pero tampoco fue lo más difícil que llegó a hacer.
―Esto se siente un poco como Korriban, pero... en versión casa ―dijo Harry, al acercarse a la casa.
― ¿Korriban? ―preguntó Sirius, mientras abría la puerta.
―El traidor de la sangre, de mi hijo Sirius. ¿Y quién es el mocoso? ―así fueron saludados, por la pintura de la sala, de una mujer.
―Walburga Black, me imagino ―dijo Harry, acercándose.
―Noto... Luz y Oscuridad en ti, muchacho ―dijo la mujer. ―Extraño. Nunca antes, había presenciado algo así. ¿Quién eres?
―Si eres la madre de Sirius... conocerías a mis padres: James Charlus Potter y Lily Janeth Evans ―dijo Harry. ―Soy Harrison Potter-Evans, heredero de la casa Potter, por cierto: Soy un Slytherin, señora Black. ―Levantó su mano derecha, enseñando el anillo de Lord Potter. Aquello sorprendió a madre e hijo, la mujer dejó de hablar.
Sirius le enseñó la que sería su habitación, y la modificó, con algunos hechizos, dejando la habitación, con un empapelado verde y dorado.
Así mismo, Sirius enfureció, cuando escuchó sobre los primeros años de vida, de su ahijado, debido a que Dumbledore le abandonó en la casa de los Dursley, y lo que vivió con ellos. Así mismo, al ver los recuerdos de su ahijado, gracias a un Pensadero, vio sorprendido, los entrenamientos de Harry con los Sith y Jedi, y le enseñó sus tres Sables de Luz, y los poderes de la luz y oscuridad de La Fuerza.
Además, Sirius estuvo entrenando a Harry en lograr la Oclumancia y usar la Legeremancia sin varita, y le entrenó en varios hechizos no-verbales.
Hermione, Susan, Amelia, los Greengrass y los Patil, fueron invitados a la casa Black, pues los adultos querían disculparse con Sirius, por lo ocurrido de haber estado once años en Azkaban, y no haberle podido ayudar.
Harry, Hermione, Susan, Daphne, Astoria, Parvati y Padma, estuvieron pasando las vacaciones, como preadolescentes normales, y las chicas se maravillaron, al saber de la existencia de una Sala de Magia Indetectable, en la casa. Lo que significaba, que podrían practicar magia, tanto como quisieran, sin que les llegara una amonestación del Ministerio de Magia, por el uso de magia en menores de edad.
Y quien más se aprovechó de esa situación, fue Hermione, especialmente los muchos libros de la biblioteca Black, que no encontraría en el colegio.
Y la mayor de los Granger, obligó de forma tiránica, al resto del grupo, a realizar los deberes. Con la excepción de que Zoe no se dejó mandar y estuvo en sus propios asuntos (fueran los que fueran), por el resto de las vacaciones.
Cuando Sirius descubrió, que una parte minúscula de las almas de James y Lily, de alguna forma, estaban en Harry, gracias a un ritual realizado por Lily. Fue algo que casi les hace a ambos, romper en llanto.
El actual Lord Black, procedió a contratar a los mejores maestros en pociones y alquimia, que el dinero podía comprar, para que el grupo al completo de Harry, pudiera sorprender y humillar a Snape, cuando este deseara hacerlo, contra ellos.
Una noche normal, como cualquier otra, un grito de dolor despertó a todos, haciéndolos correr hacía una de las habitaciones. Sirius logró a abrir la puerta, con el hechizo Cistem Amperio, abriendo la puerta violentamente.
Vieron los últimos instantes de Voldemort, (o de lo que parecía ser el rostro de Voldemort, hecho de humo) mientras se desvanecía, para no volver.
Vieron a Harry sentado de espaldas, mientras suspiraba, y tres círculos rúnicos, parpadeaban, antes de encenderse en llamas violetas, doradas y verdes, antes de desvanecerse totalmente.
― ¿Harry? ―preguntó Sirius.
El pelinegro se giró, mientras sonreía y alzaba el Guardapelo de Salazar Slytherin.
―Yo no pude, tu sí. Yo no pude, tu sí ―dijo una voz, era el Elfo Domestico Kreatcher, mirando con los ojos muy abiertos, el Horrocrux. ―El maestro Regulus... él... gracias a Kreatcher dejó esa cosa aquí. Pero le impidió a Kreatcher contar nada, hasta que alguien lo preguntara, o descubriera el alma del Señor Oscuro, en el interior del Relicario. Pero... ―Kreatcher se acercó y tomó el relicario. ― "Kreatcher jamás se hubiera imaginado, a alguien logrando exorcizarlo" ―susurró, mientras acariciaba el collar, los ojos se le llenaron de lágrimas, abrazó a Harry y Desapareció.
―Alquimia ordinaria, y Alquimia Sith ―dijo Harry, a las chicas.
En los días siguientes, llegaron las cartas de Hogwarts.
El Libro Reglamentario de Hechizos (Clase 2) de Miranda Goshawk.
Recreo con la Banshee.
Una Vuelta con los Espíritus Malignos.
Vacaciones con las Brujas.
Recorridos con los Trolls.
Viajes con los Vampiros.
Paseos con los Hombres Lobo.
Un año con el Yeti.
Todos aquellos libros, eran de un tal Gilderow Lockhart.
Y aunque los Granger casi murieron de la vergüenza, Sirius compró los libros de las niñas.
Por desgracia, Harry salió enfadado de allí.
Recuerdo
Lockhart había estado, ese mismo día en la tienda de libros.
― ¡Muévete chica, es para El Profeta! ―chilló el fotógrafo, haciendo retroceder de un golpe a Hermione.
― ¡Hey! ―gruñó Harry, adelantándose, y quitándole de las manos la cámara al sujeto.
Lockhart volvió su mirada.
― ¡Bienvenido, Harry! ―dijo Lockhart, mientras sonreía, reconocía al chico y lo jalaba, él soltó la cámara, que fue agarrada por Sirius y devuelta al camarógrafo. ―Harry Potter, no solo ha venido por los libros de Defensa Contra las Artes Oscuras, pues yo estaré enseñando en Hogwarts este año: además de todo, hoy el señor Potter, puede llevarse una edición firmada de mi autobiografía ―le entregó a Harry el libro, y él se alejó rápidamente, pero acabó por recibir gratis, todos los libros de Hogwarts. ―Enseñar al grandioso Harry Potter, será una oportunidad única. Les aseguro, que, gracias a mí, el señor Potter será el más grandioso Auror, y llegará a superar a Alastor "Ojo Loco" Moody.
Fin del Recuerdo
Al salir del establecimiento, y aun cargando los libros, las chicas vieron como estos se fueron multiplicando, ellas los fueron atrapando, y mientras reían, se fueron de allí.
Harry recibió los libros gratis, y luego los multiplicó para todas ellas.
Vaya que tener un amigo, tan versado en tantas artes mágicas y otras cosas, era muy útil.
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Star Wars: El Destino de la Fuerza Mágica
FanfictionUn niño ignorante del poder en su interior, que solo ayudó a dos desconocidos, guiado por la bondad de su corazón, alcanzaría un lugar de leyenda, en su planeta natal, y en una galaxia muy muy lejana. Harry entrenado por Jedi OC y Sith OC. Harry Har...