Un niño ignorante del poder en su interior, que solo ayudó a dos desconocidos, guiado por la bondad de su corazón, alcanzaría un lugar de leyenda, en su planeta natal, y en una galaxia muy muy lejana.
Harry entrenado por Jedi OC y Sith OC.
Harry Har...
HP: Hermione Granger, Daphne Greengrass, Padma Patil y Susan Bones.
SW: Aayla Secura, Ahsoka Tano y Maris Blood.
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¡Las Flotas de la Republica, están sitiadas!
¡Las flotas de la Republica, están siendo atacadas por sorpresa, por parte de las flotas Separatistas, que no dejan sobrevivientes!
¡Hay rumores de una nueva y terrible arma, Separatista!
¡Ante el creciente temor el Consejo Jedi, envía al maestro Plo Koon a Cazar la Amenaza, antes de que vuelva a atacar!
La nave Republicana, seguía una nave Separatista.
—La nave enemiga, ha reducido su velocidad, general —dijo el comandante clon.
—Ya deben saber, que los estamos siguiendo —sentenció el maestro Plo Koon.
El general Grievous, se acercó al puente de mando.
— ¡Detectamos tres cruceros de la Republica! —dijo un droide. ― ¿Qué hacemos?
―Bloqueen sus transmisiones ―ordenó Dooku, mientras que Grievous solo parecía enfadado por eso, pero no parecía ir a tomar ninguna decisión.
―Entendido ―dijo otro droide, mientras tecleaba algo, en un teclado.
―La flota enemiga mantiene su posición, señor ―dijo el comandante clon.
―Creo que lo mejor, es reportar nuestra posición antes de atacar. ―Ordenó el maestro Plo Koon, con gran sabiduría.
―La flota de la general Shaak Ti y la comandante Secura y una flota desconocida, están cerca, en el sistema Reecee ―dijo el comandante.
―Bien. Tal vez puedan darnos apoyo ―dijo Plo Koon, encendiendo el comunicador.
―Koto-Yah, Maestro Koon ―dijo Aayla.
―Koto-Yah, joven Secura ―dijo él.
― ¿Cómo va la búsqueda, del arma misteriosa? ―preguntó Aayla.
―La ubican en el sistema Abregado ―dijo Plo.
―Una señal desconocida, trata de comunicarse, general ―dijo el comandante clon.
Plo lo pensó. ―Abre el canal.
― ¡Harry, Maris! ―dijo Aayla sonriente.
Harry, se había quitado su máscara. ―Gracias, querida. Maestro Plo, ¿podemos ayudarlos en algo?
―Un arma Separatista, ¿podemos confiar, en tu amiga? ―preguntó Plo, mirando a la Zabrak.
―Podemos confiar en ella. ―Aseguró Harry, Maris miró enfadada, como el Jedi no quería confiar en la palabra de su amado. ―Aayla, comunícate con el Consejo, ya sabes cómo funciona.
Aayla parecía casi divertida. ―Mi maestra y yo, nos comunicaremos con el Consejo. Sé que Harry y Maris, pueden auxiliarlo maestro. ―Aayla se desconectó.
―Estaremos allí, en pocos minutos ―aseguró la Zabrak llamada Maris, mientras cerraban la comunicación.
―Se acerca la nave enemiga ―dijo uno de los clones.
― ¡Prepárense para una batalla! ―ordenó Plo.
En la nave Separatista, todo estaba siendo preparado, para el combate.
―General Grievous, este parece ser un buen momento, para probar nuestra nueva arma ―dijo el Conde Dooku. ―Dispare, cuando esté listo.
― ¡Sí, mi lord! ―aseguró Grievous.
―El objeto, está emitiendo una gran energía ―dijo el comandante.
―Abran fuego ―ordenó Plo.
―No estamos en el rango, señor.
― ¡Fuego! ―ordenó el general Grievous. Un anillo de rayos violeta, salió disparado desde la nave Separatista.
― ¡Todos listos para el impacto! ―ordenó Plo.
― ¡Perdemos potencia! ―avisó el comandante. ― ¡El Campo de Energía, nos dejó indefensos!
Las naves de Kraft y Harry, y de Maris, dispararon contra la nave Separatista, causando un gran daño en la nave enemiga.
― "Gracias por eso" ―susurró Plo, cuando vio la nave enemiga incendiarse.
― ¡Disparen contra las naves enemigas! ―ordenó Grievous, pero seguían recibiendo daño.
― ¡Usen los misiles explosivos! ―ordenó Kaft.
― ¡Sí señor! ―dijo uno de los subalternos.
― ¡Estamos recibiendo mucho daño, hay que salir de aquí! ―ordenó el Conde Dooku.
― ¡A las capsulas entonces! ―dijo Grievous, siguiendo a Dooku.
―Gracias por eso ―dijo el maestro Plo.
―De nada, maestro Plo ―dijo Harry. ―Un cañón iónico. ¿Por qué no tienen los Jedi, este tipo de armas?
―Lo sabes bien, joven Obaset ―dijo el maestro Plo, de buen humor.
―Deberíamos de tener armas, al menos similares, por el lado Jedi. ―Dijo Harry.
― ¿Las tienen los Sith? ―preguntó el maestro Plo.
―No somos Sith ―dijo Kaft ―Solo somos... humildes usuarios del Lado Oscuro.
―Maestro Plo: salgan de este lugar y avise al Consejo Jedi. ―Pidió Harry.
―Avisaremos al Fuero Sith ―dijo Kaft.
―Nosotros también deberíamos de irnos, maestra ―pidió una asustada Aayla.
―Volveremos. ―Avisó Shaak Ti. ―Volveremos, para liberar el Sistema Abregado.
