Star Wars: El Destino de la Fuerza Mágica

Capítulo 195: Creencias infantiles y búsqueda de conocimiento

Harry Potter pertenece a JK Rowling.

Star Wars pertenece a George Lucas (y a Disney)

Harén de Harry.

HP: Hermione Granger, Daphne Greengrass, Padma Patil y Susan Bones.

SW: Aayla Secura, Ahsoka Tano y Maris Blood.

Ahora, con el rango de maestro del Consejo Jedi; pero aun como un "aprendiz en los deberes de maestro", gracias a su propia petición hacía el Consejo y con Yoda guiándolo, con su infinita sabiduría y experiencia, Anakin pidió al maestro Yoda, su auxilio, por si caía al Lado Oscuro, siendo acompañado por el alienígena verde, hacía la Biblioteca de la Orden Jedi.

—Entonces, ¿Darth Plagueis? —murmuró el maestro Yoda, cuando Anakin terminó de contarle, las palabras de Palpatine y la historia del lord Sith. Ver al maestro Yoda, pensativo y rebuscando en su memoria, era algo insólito para Anakin (y para cualquier otro Jedi, que se viera en esta situación).

Todos, eran tan estúpidos e infantiles, que creían que únicamente, por su edad, entonces automáticamente, el maestro Yoda, tendría acceso a una especie de sabiduría omnipresente, que era omnipotente y conocía secretos de la Fuerza, de eras ya tan antiguas, como la Gran Guerra Hiperespacial pues (según solían pensar los Jedi, de forma muy infantil) lógicamente, Yoda habría vivido todo esto.

—Maestro Yoda —llamó Anakin, con algo de nerviosismo en su ser. Nerviosismo estúpido. Era obvio, que el maestro Yoda no era una especie de dios de la sabiduría o de la Fuerza, pero todos lo olvidaban. — ¿Me dirá, quien es Plagueis?, solo intento entender, a Sidious.

—A ese Lord Sith, yo lo desconozco —dijo Yoda. —Por estos dos asuntos, a la Cámara de los Holocrones, acudimos.

— ¡¿LO DESCONOCE?! —chilló Anakin desconcertado, quedándose quieto por un instante. Yoda lo miró —Eso es imposible. —Dio dos pasos, para alcanzarlo. — ¡Si alguien conoce cada secreto en la Galaxia, cada hazaña y cada nombre Jedi o Sith, tendría que ser usted! —El maestro Yoda, solo le dio una mirada paternal a Anakin y ambos siguieron su camino, hasta la biblioteca, donde Anakin vio al maestro Yoda, hablar con la maestra Jocasta Nu, quien, frunciendo el ceño, les llevó hasta la Cámara de los Holocrones. Se escuchó el estridente sonido, de una silla siendo corrida hacía atrás y la mirada que la maestra Nu, le dio al maestro Fisto, hizo que el hombre, temiera por su vida.

—Por aquí, por favor —dijo la maestra Nu, llevándolos hasta la puerta de la Bóveda de los Holocrones. — "Recuerda esta contraseña muy bien, Skywalker" —susurró, mientras se acercaban al tablero, que estaba junto a la puerta. — "8556, es tu contraseña personal, para ingresar a la Bóveda de los Holocrones, Skywalker y solo reaccionará, ante tu huella dactilar" —Anakin escribió la contraseña en el tablero y con el maestro Yoda, comenzaron a trabajar juntos, en encontrar a Darth Plagueis, en el archivo Holocrónico de los lores Sith, que tenía el Consejo.

—Skywalker —dijo el maestro Yoda, mientras buscaban en los Holocrones, cualquier posible dato, sobre Darth Plagueis. —Si los secretos de la salud buscas, podrías ayuda pedir, a la maestra

—Gracias por el consejo, maestro —dijo Anakin. —Pero en estos momentos, estoy buscando tanta información como pueda, sobre Plagueis. No tanto, por aquello de que podía influir en los Midiclorianos y supuestamente, evitar las muertes de otros; sino para intentar saber más, sobre Sidious.

— ¿Y si Plagueis, el maestro en el Lado Oscuro de Sidious fuera? —teorizó el maestro Yoda. —Razones, para no encontrar información suya en los Holocrones tendríamos, si es que no fuera, un lord del pasado.

Anakin tardó algunos minutos, en poder aceptar eso. Pero tenía sentido. Sonrió, sintiéndose como un idiota. —Podría ser, y solo tuvo que decir "La Leyenda de Darth Plagueis", para que yo me lo creyera. —Como si alguien dijera "La Leyenda de Qui-Gon Jinn", pero el maestro es contemporáneo. —Yoda asintió y ambos abandonaron la habitación, mientras que Anakin, iba a buscar a la maestra Allie, con la esperanza de que ella, accediera a enseñarle sobre la curación a través de la Fuerza.

— "Si libros sobre el estado de curación de la Fuerza buscarás, la sección D-765 y X-78912, te recomendaría" —susurró el maestro Yoda sonriente, Anakin le devolvió la sonrisa. Decidió primero, ir a buscar aquellos libros, de los que hablaba el maestro Yoda y luego, ya contactaría a la maestra Stass Allie.

Investigó un poco, pero en su gran mayoría, Anakin tendría que pasar muchas horas, adquiriendo conocimiento teórico, sobre cómo funcionaba el cuerpo humano. Antes de poderse sumergir, en el conocimiento práctico, con la maestra Allie.

Anakin siempre preferiría, el conocimiento práctico.

Así que todo esto, solo sería un largo martirio.

Un martirio, que le llevaría a ser un grandioso Jedi, algún día.

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La Confederación Separatista, nombró a Grievous, como un criminal de guerra y pasó a darle caza. Informaron a la Orden Jedi, que Grievous parecía estar listo, para aliarse con los Sith de Korriban o algo así.

Entonces, el Consejo Jedi, tendría vía libre, para cazar al aprendiz oscuro de Dooku.

Serían Obi-Wan Kenobi y Lin Win-Kat, quienes irían en busca de Grievous, hasta el Borde Exterior.

Tendrían que apresurarse, pues desconocían, que acaso Grievous intentaría aliarse con Sidious. Y si ese fuera el caso, debían de detenerlo.