Hoy el capítulo va con música.
****
- Amor ¿Y Lola?
- Se ha ido... - Dijo entre sollozos.
- ¿Cómo qué se ha ido?
Luisita seguía sin poder hablar, las lágrimas se le acumulaban en la garganta impidiéndole pronunciar cualquier palabra, su voz se ausentaba y su cuerpo flaqueaba en los brazos de Amelia que intentaba, por todos los medios, calmar a su novia y descubrir qué había pasado.
- Amor, ven... - Sujetó a Luisita y la sentó en una de las sillas, se colocó de cuclillas frente a ella y buscó su mirada. La tenía vacía, como si estuviese en otra parte.
- Luisita ¿me escuchas?
La rubia seguía sollozando con el pecho agitado, le costaba respirar y no era capaz de reaccionar a la voz de Amelia ni a sus caricias.
La morena se sentó a su lado, la atrajo hacia ella y comenzó a mecerla en sus brazos mientras le daba pequeños besos en la sien tratando de apaciguarla. Por su parte, Amelia procuraba mostrarse serena, transmitir a Luisita aquella seguridad que los momentos de fragilidad suele arrebatar.
Poco a poco el llanto de la rubia fue cesando aunque seguía en estado de shock, con la mirada perdida y el cuerpo inerte. Había cambiado las lágrimas por el mutismo.
- Luisita ¿quién se ha ido? ¿Lola? - Preguntó pero siguió sin recibir contestación.
- ¿Nico? - Pronunció con miedo, no quería escuchar la respuesta, sin embargo, Luisita siguió callada, alargando un silencio que cada vez pesaba más.
De pronto, las puertas del pasillo se abrieron dejando paso una camilla, en ella Nico con los ojos cerrados y llenos de tu tubos y cables a los lados, a su lado velando por él; un celador y Asun.
"No puede ser" pensó para ella. "Nico no"
Se levantó asegurándose de que Luisita no se movería y se fue directa a ellos.
- Asun... - Fue lo primero que dijo en cuanto estuvo a escasos metros, observó a la enfermera que mostraba signos de cansancio y percibió en su rostro restos de lágrimas.
- Asun, ¿qué ha pasado? - Miró a Nico, estaba demasiado pálido. Sintió su corazón empequeñecerse y un fuerte pinchazo.
La enfermera se irguió en cuanto vio a Amelia, le sonrió y recuperó su rostro afable.
- Hola Amelia ¿Cómo estás?
- ¿Cómo está Nico? - Volvió a preguntar, empezaba a impacientarse.
Asun miró a Luisita antes de comenzar a hablar.
- Se complicó la operación, Nico tenía más metástasis de lo que aparecía en los TAC, intentaron extirpar todo pero no ha podido aguantar la operación.
- No, no, no, no puede ser, Asun, dime que no. - Sintió su voz romperse.
Nico no.
- Le han sedado pero... hay muy pocas posibilidades de que despierte.
- No. - Negó con la cabeza, una y otra vez, no lo podía creer. - No puede ser, Asun, tiene cinco años.
- Hemos intentado hacer todo lo posible. - Se intentó justificar pero en su voz se apreciaba una inmensa pena.

ESTÁS LEYENDO
Kintsugi
RomanceEl kintsugi es la práctica de reparar fracturas de la cerámica con barniz o resina espolvoreada con oro. Plantea que las roturas y reparaciones forman parte de la historia de un objeto y deben mostrarse en lugar de ocultarse. Amelia y Luisita tendrá...