ENZO EFSERYAN (FREDDIE MERCURY) ES UN PROMETEDOR ACTOR DE CINE QUE SE ENCUENTRA EN UNA ENCRUCIJADA CON SU NOVIA PAULINE AMOS (MARY AUSTIN). LO QUE PARECE EL FINAL DE TODO, SERA SOLO EL INICIO DE UNA NUEVA VIDA PARA ENZO.
HAY HOMBRES QUE MERECEN UNA...
La semana que pasaron en Tasmania fue una experiencia inolvidable. El festival de las flores salvajes fue otro hito maravilloso para el matrimonio. Cuando partieron de Reino Unido había entrado el otoño y aquí se estrenaba la primavera y todo estallaba de color. Era el momento idóneo para que ellos, enamorados de las flores, visitaran la isla. Había infinidad de festivales florales como el del tulipán en los jardines botánicos reales. Durante todo un fin de semana había espectáculos de danza, música y gastronomía. Tarek acudió a una clase de jardinería que se impartía allí y Taron de cocina autóctona. Ambos pillaron muchas ideas. Dedicaron varios días a aquel espectáculo magnífico que se desarrollaba prácticamente en cada parte de la isla.
En el parque natural de Cataract Gorge, los jardines ofrecían senderos cubiertos de narcisos, otra flor que Enzo adoraba y organizaron allí un picnic, había conciertos al aire libre, pasearon por los acantilados entre los exóticos arboles gigantes. Visitaron una plantación gigantesca de lavanda que se decía era la más grande y antigua del mundo y acabaron recorriendo jardines de rododendros, disfrutando de fuegos artificiales por la noche y asistiendo al cóctel de los tulipanes. Fue un precioso sucedáneo de las orgías de compras de Enzo que en aquella isla no podía hacer. Tarek, Phil y Taron se fueron a hacer una ruta en bicicleta hasta las cataratas de Wellington para apurar el último día de estancia en aquel paraíso. Mientras Enzo se dedicaba a relajarse en la piscina, a leerse los guiones que le había mandado Pauline y a mantener conversaciones por Skype con Duncan y sus gatos.
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- Oscar, mi niño grande. ¿Cómo está mi belleza?
Hablaba con ellos cada día. Como acostumbraba a hacer siempre que pasaba largas temporadas fuera de casa. Oscar con su enorme cabeza y ojos críticos, miraba la pantalla del ordenador impasible y magnánimo.
- Nala, dame un besito de los tuyos.
- ¿Ves como se frota contra la pantalla?
- Oh, la adoro. ¿Dónde están los demás?
- Hace un día espléndido hoy, están por el jardín explorando. Están todos bien, no te preocupes.
- ¿Obedecen?
- Enzo, tienes unas criaturas muy malcriadas. Están felices mientras se salgan con la suya, como todos los gatos.
- ¿Nos echan de menos?
- Nala las primeras noches dormía en vuestra cama, ahora se viene a la mía. Lolo y Greta buscan a Tarek por cada rincón del jardín. Se puede decir que sí.
- ¿Qué tal comen?
- Lizzie últimamente come muy poco.
- ¿Tienes cuidado con sus bolas de pelo?
- Que si.
- Llévala al veterinario, Duncan. Si algo va mal, llévala. Roggie la conoce muy bien.