ENZO EFSERYAN (FREDDIE MERCURY) ES UN PROMETEDOR ACTOR DE CINE QUE SE ENCUENTRA EN UNA ENCRUCIJADA CON SU NOVIA PAULINE AMOS (MARY AUSTIN). LO QUE PARECE EL FINAL DE TODO, SERA SOLO EL INICIO DE UNA NUEVA VIDA PARA ENZO.
HAY HOMBRES QUE MERECEN UNA...
Ashima estaba en lo cierto. Tarek ya se encontraba mejor aunque siempre con un pronóstico reservado.
Lo primero que tenían que hacer era disolver el coágulo que había montado todo aquel follón. Eso lo harían mediante medicación por vía oral. Pero por otro lado tenían que tratar las hemorragias de las varices esofágicas. Para ello tuvieron que introducirle por la boca un endoscopio hasta llegar al interior del esófago con la finalidad de atar las venas varicosas.
Pese a la gravedad de la complicación, Tarek se fue encontrando cada vez mejor aunque sentía muchas molestias. Al cabo de unos días por fin le pudieron subir a la planta 9 y aunque estaba en estrecha vigilancia, le mandaron empezar a dar paseos cortos. El problema es que la cantidad de analgésicos para el dolor que tomaba le producían mucha somnolencia y pasaba parte del día dormitando.
- Hola, ojazos -le saludó alegre Steve a los pies de su cama.
Tarek le sonrió e inconscientemente fue a incorporarse para saludarle pero Steve le detuvo enseguida.
- No te muevas. Ya me muevo yo -se acercó para darle un beso en la mejilla-. Estás ya muy bien ¿no?
- Si tú lo dices -hizo una mueca de dolor al mover levemente la cintura.
- ¿Te duele?
Exhaló algo muy parecido a un suspiro angustiado antes de contestar:
- Todo el tiempo.
- ¿Es normal?
- Al parecer sí. Me enchufan muchos analgésicos y eso me adormila de continuo.
- Pues tú si te entra el sueño, cierra los ojitos ¿eh? Por mi no te refrenes -le sonrió tocando su nariz con cariño.
- Están intentando conseguir el equilibrio adecuado para que me sienta más cómodo y no duerma tanto.
- ¿Has vuelto a sangrar?
- No, hace ya dos días que no vomito sangre. Me han dicho que no es posible que se repita.
- ¿Ya comes de todo?
- Voy comiendo poco a poco.
- Te veo muy guapo.
- Steve, deja tus bromitas de mal gusto.
Entonces se oyeron unos ligeros y discretos nudillos a la puerta.
- ¿Esperas visita?
Tarek se encogió de hombros. La puerta se abrió y entró una enfermera y detrás con una bata blanca, un gorro de quirófano verde y una mascarilla con filtro, Enzo. Ashmina se despidió de ellos mientras Enzo la lanzaba un beso por el aire. Luego se acercó a la cama mientras Tarek le miraba hipnotizado y Steve se despidió discretamente intercambiándose un guiño con Enzo.
- Mi amor, ¿Cómo estás? -dijo Enzo sentándose en el borde de la cama con delicadeza y frenando sus impulsos de devorarle vivo a besos.
- ¿Qué haces disfrazado de médico?
Le miraba de arriba abajo sin poder creerse que estaba ahí. Claramente aún débil por la complicada operación y sin embargo nada podía tener más fuerza que esa mirada suya brillando sobre él. Nunca dejaba de sorprenderle con sus audacias.
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