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Al siguiente día, fui al baño, me bañé y me puse un buzo verde con unas calzas negras y zapatos. Me puse perfume y mi collar.

Volví a la habitación, los gemelos todavía no se despertaban y ya era la hora del almuerzo. De repente entra Molly con una cuchara y un sartén.

- Buenos días T/n. Tapate los oídos - hice caso y comenzó a golpearlos, causando estruendosos ruidos por toda la habitación.

- ¡Mujer! ¡Compasión! - gritó Fred mientras George se tapaba la cabeza con la almohada.

Cuando paró con el golpeteo, saqué mis manos de mis oídos.

- ¿Dormiste bien T/n? - preguntó ella con la sonrisa que siempre me hace.

- Dormí excelente - respondí.

- ¡Fred, George, bajen a almorzar! T/n, acompáñame abajo.

- Buenos días - escuché la voz ronca de George, me di media vuelta.

- Buenos días - respondí, seguí a Molly y bajamos al comedor. Donde me ofrecí a ayudarla a colocar los cubiertos en la mesa.

Apenas terminamos, aparecieron todos, el Señor Weasley, Ron, Ginny, Fred, George y Percy se sentaron a la mesa. Yo me senté al lado de Ron.

- Papá, ayer T/n nos dejó usar una cámara muggle - comentó Fred.

- ¿Cámara muggle? ¿Quién te la regaló?

- La tengo en mi bolsillo, por si la quiere ver - asintió con la cabeza y se la pasé - Mi papá me la regaló.

- Esto es asombroso - dijo el Señor Weasley y luego me la devolvió - T/n, me comentaron que fuiste a la Mansión Malfoy con otras familias.

- ¿Fuiste a la mansión Malfoy? - preguntó Percy, casi toda la mesa me miraba con los ojos como platos.

- Si fui, para pasar la Navidad.

- Tu familia y tu deben tener cuidado con todos ellos - advirtió el señor - Creo que traman algo muy malo.

- ¿No eres novia de Draco Malfoy? - preguntó Ron, me sentí avergonzada.

- No, nos estamos distanciando...

- Lo siento querida - dijo Molly mirando enojada a Ron.

- Esta bien - dije haciendo como si no importara. Luego conversamos sobre otro tema.

La tarde llegó rápido. Con mi tocadiscos y mi cuaderno de dibujos, George, Fred y yo salimos al campo y nos tiramos en el pasto. El cielo era de un hermoso rojo anaranjado con pequeños toques rosas, sin ninguna nube. Luego de poner música, comencé a dibujarlos aunque cada un minuto les tenía que pedir que se quedaran quietos.

Fred se cansó y comenzó a hacerme cosquillas. Intenté rodar pero la risa no me dejaba moverme. Cuando paró, George me tomó de la cintura ayudándome a levantarme.

- ¿Bailas? - preguntó, miré a Fred y me guiñó el ojo.

- Por supuesto.

(La canción de la portada del capítulo)

Tomé las manos de George y comenzamos a bailar fluidamente pero con cualquier movimiento, nos dejábamos llevar con el ritmo de la música. Era más disfrute que otra cosa, además de soltar alguna risa.

- ¡¡¡Amor y paz!!! - gritó Fred a todos los vientos unos minutos después.

- ¡Silencio! - apenas se escuchó el grito de Molly bien lejos. Y nos empezamos a reír.

Luego nos cansamos y nos acostamos en el pasto, me dispuse a terminar el dibujo.

- Terminé - dije poniendo el lápiz atrás de mi oído y mostrándoles el boceto.

- Wow - dijo Fred, agarrando el cuaderno - Esto es una obra de arte, somos hermosos - miró a George.

- Concuerdo. T/n nunca nos dijiste que sabes dibujar... ¿Nos lo podemos quedar?

- Si - con mucho cuidado, saqué la hoja y atrás le puse un mensaje y mi firma.




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