La Obsesión del Dios del Engaño - Parte I, II y III

Capítulo 63: Corazones rotos

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La Encantadora yace sentada en uno de los pisos que están frente a la encimera de granito, luce como siempre, con esa belleza majestuosa, su cabello dorado y largo cubre por completo su espalda como un manto, trae unos pantalones de cuero que acentúan muy bien su perfecta figura, y una blusa con un profundo escote. Pero siendo tan bella, su aura de maldad puedo percibirla, aunque no tenga poderes mágicos y tan solo yo sea una simple humana.

— Te hice una pregunta, ¿cómo es el sexo con Loki? Bueno no tienes que responderme para saber que debe ser magnifico.

— ¿Qué haces aquí?

— Vine a darte mi regalo de bodas... que sé vas a agradecerme, aunque dudo que quieras casarte después de que lo recibas.

— No entiendo de qué estás hablando.

— Estoy aquí para abrirte los ojos Lucía...— Sonríe con maldad levantando una ceja. — Loki te ha estado mintiendo, igual como les miente a todos, está en su naturaleza.

— Escuche un ruido ¿qué pasa? — Dice Loki entrando a la cocina interrumpiendo a la Encantadora. — ¿Qué mierda haces aquí?

— Hola Loki... ¿de verdad creíste que con ese hechizo de protección a tu casa no podría entrar? Si, me tardé, pero como ves pude deshacerme de él.

— ¡No tienes nada que hacer aquí! ¡Ya lárgate!

— Te equivocas... estoy aquí para decirle la verdad sobre sus padres no el cuento que tú le inventaste.

— ¿La verdad sobre mis padres? — Se me aprieta el corazón.

— ¡Cállate Amora! ¡Sal de aquí! — Loki la sujeta del brazo echándola de la cocina, pero ella no se mueve de la casa, al final solo nos trasladamos a la sala principal. Loki por alguna razón estaba muy tenso.

— Lo ves Lucía él no quiere que lo sepas...

— Loki cálmate déjala que hable... — Digo intentando que se calme. — Habla Amora, y cuando termines te puedes ir.

— ¡Amora no! — Pero Loki no me escucha, vuelve a exigirle a la Encantadora que se calle.

— Sabes lo que sucede Lucy, es que tus padres no murieron por un accidente...

— ¡Amora por favor cállate! — Vuelve a exigir el Dios.

— Fue intencional, fue Loki quien los asesinó...

Fue como si el corazón me hubiese dejado de latir, no podía reaccionar, mi cuerpo no respondía, se me nubló por completo la mente...

— No... eso no cierto, Loki no sería capaz de hacer eso... — Lo veo a los ojos, pero el baja la mirada, permanece callado y serio, dándome a entender lo peor...— Eso no es verdad, Loki dile... — No emite ninguna palabra. — Loki... — Mis ojos solo pueden reflejar el horror que presiento venir, su silencio solo es una agonía que atormenta mi intranquila alma.

— Lucía perdóname...

— ¿Qué?

Escuchar esa frase fue como un balde de agua congelada sobre mi...

¿Qué está pasando?

¿La muerte de mis padres no fue un accidente?

— ¡No! ¡Mis padres murieron en un accidente automovilístico yo iba en ese auto! ¡me salvé de milagro! ¡hasta tengo una cicatriz!

— Si, pero fue Loki quien provocó ese accidente donde perecieron tus padres... — Insiste la Encantadora.

— ¡Loki por favor dime que eso no es cierto! — Lo sujeto de la camisa aferrándome a mi única esperanza de que el desmienta esa mentira horrorosa que siento que me está devorando las entrañas.