Capítulo XXXIX: Vieja amistad.

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[...]

Acabábamos de abrir la librería eran las 9:03 de un día viernes soleado, soplaba mi taza de café mientras Susy estaba en el segundo piso acomodando unas cajas de libros. Sin duda los días sin Loki no eran lo mismo, mis ganas de verlo me hacían imaginar que entraba por la puerta principal con su traje oscuro, con esa caminata sexy, viéndome con sus ojos verdosos y con su sonrisa burlona.

Mi imaginación es interrumpida por el sonido de la campanilla de la tienda, veo que la abre de par en par el atractivo actor inglés, pero primero entra su perro meneando la cola con su lengua afuera.

¿Mi pensamiento atrajo a Tom?

— Hola Lucy. —Me dice el actor inglés sosteniendo la correa de su mascota con su hermosa sonrisa. — Pasábamos por aquí y Bobby quiso pasar a saludarte.

— Hola Tom. —Me agacho para acariciar al simpático can. — Hola Bobby gusto en conocerte. — Bobby me lame la cara.

— ¡Vaya le agradas! — Dice Tom asombrado.

— Parece que sí, me gustan mucho los animales, además Bobby es encantador igual que su amo. — Bobby no para de manear la cola.

— Un día podrías acompañarme a pasearlo al parque.

— Podría ser... — No sé porque Tom vuelve a insistir en que salgamos los dos solos ¿querrá que su novia me golpee?

— Espero no haberte molestado ¿estás ocupada?

— No para nada, acabamos de abrir solo me estaba tomando un café.

— Bueno te dejo para que termines tu café, Bobby tiene que terminar su paseo.

— Adiós Bobby. —Vuelvo acariciar al can. —Adiós Tom.

— Adiós Lucy.

Tom se retira de la tienda junto a su mascota, yo vuelvo detrás del mostrador de madera a beber mi café. Susy baja rápidamente por las escaleras haciendo rechinar la madera, sé me queda viendo con una cara de pregunta.

— Lo vi todo desde el segundo piso. —Dice Susy.

— ¿Ya y?

— ¿Cómo qué y? Tom Hiddleston ha venido a verte otra vez... ¡ese hombre te quiere coger!

— Claro que no Susy, sólo vino a mostrarme su perro.

— Amiga he sido una zorra por años antes que tú. —Dice apoyándose en el mostrador. — El perro sólo fue una excusa para verte ¿cómo no te das cuenta?

— Aunque así fuera soy la mujer de Loki... pero no creo que esas sean las intenciones de Tom él tiene novia.

— Tiene novia Lucy pero no está muerto, aprovecha que Loki no está.

— No le quiero ser infiel.

— ¿Te estás escuchando? No le quieres ser infiel pero se te olvida el detalle de que no son novios pero bueno no voy a molestarte más con eso. — Se produce un silencio incomodo entre nosotras, sé que a Susy no le agrada Loki por eso quiere que me fije en Tom o en otro hombre.

— ¿Por qué no te agrada Loki?

— No lo sé... es intuición, siento que esconde cosas.

— No me asustes.

— Tranquila no me hagas caso, ¿qué te parece si esta noche vamos a beber? Noche de chicas.

— Hace tiempo que no nos embriagamos juntas.

— ¡Perfecto hoy cerraremos temprano además es viernes! — Añade Susy entusiasmada.

La Obsesión del Dios del Engaño - Parte I, II y IIIDonde viven las historias. Descúbrelo ahora