La Obsesión del Dios del Engaño - Parte I, II y III

Capítulo 161: Visita al Helheim

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Me observa con esos ojos que en la oscuridad de la noche se ven más resplandecientes.

— ¿Estuvo bueno el sexo con el demonio?

— Tú eras el que me andaba persiguiendo.

— Estoy en mi Palacio puedo ir donde se me da la gana.

— ¿Eso también te da derecho a verme desnuda mientras me ducho?

— Te recuerdo que te he visto desnuda cientos de veces... una más no marca diferencia.

Me levanto de la cama furiosa hasta la puerta.

— ¡Y yo te recuerdo que tienes esposa y un hijo en camino! ¡No deberías estar aquí!

— ¡Tú y Sigyn planearon todo a mis espaldas para que me casara!

— ¡Yo no te puse una pistola en la cabeza!

Ambos nos quedamos cara a cara viéndonos con odio.

— No tengo ánimos de discutir Loki... solo quiero dormir.

— Yo tampoco quiero discutir contigo, después de todo no viene al caso. He estado haciendo lo que me pediste antes de marcharte, intentar ser feliz y sostener este matrimonio, pero todavía no lo consigo.

— Llevas muy poco tiempo casado todavía es pronto, si te incomoda mi presencia puedo irme.

— No... por favor no te vayas todavía. — Me sostiene de las manos.

— Creí que estarías de acuerdo en que me fuera, por la manera de decirme que él único rey y reina aquí eres tú y tu esposa.

— Sé lo que dije, seguía molesto por tu acuerdo a mis espaldas con Sigyn... tú siempre serás la reina en mi corazón.

— Loki por favor... desiste ya, esto es absurdo. — Me alejé de él, pero me intercepta en el camino, sujetándome de los hombros.

— No hasta que me digas que ya no me amas...

Esos ojos verde azulados y tristes esperan una respuesta de mis labios, quizás una dolorosa pero necesaria para ambos. Tensé mi cuerpo y fingí seriedad, apreté los puños y di un trago amargo.

— Ya no te amo...

Vi como su corazón se quebró a través del reflejo de esos ojos.

— Estas mintiendo.

— No estoy mintiendo... — Me quito de su agarre. — sabes que estoy con Kaan y él me ha ayudado mucho, también mi entrenamiento en Kamar-Taj...ya no soy la misma Lucy que se fue.

Se gira para volver a encontrarse con mi rostro.

— Júralo por nuestra hija... jura por ella que ya no me amas y nunca más volveré a buscarte.

El nudo en mi garganta aumentó de tamaño, me dolía horrible tener que mentirle y sobre todo hacerlo en nombre de mi hija.

— Lo juro por ella.

Le mentí y sentí que cada objeto del cuarto me juzgaba.

— Entiendo. — Dice escueto, se acerca a la puerta con la mirada cabizbaja y vuelve a mirarme antes de salir. — Nunca más volveré a molestarte.

Se retira cerrando la puerta.

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La bruja escarlata ataca el Santuario, veo a los estudiantes del templo de Kamar-Taj caer uno por uno entre pedazos del templo y los ataques de Wanda. Ella quiere a la niña que protege Stephen y Wong, se llama América Chávez y tiene la habilidad de viajar por el multiverso, por eso Wanda quiere su poder, solo quiere estar con sus hijos.