Capítulo XXVI: Helado escarchado de blanco néctar.

3.7K 334 316
                                    

❧—❧—❧—❧—❧—❧—❧—❧—❧

El siguiente capítulo puedo contener lenguaje vulgar, violencia y escenas sexualmente explícitas.  +18

No me hago responsable por subidas de presión o infartos.

Capítulo de larga duración.

Disfruten :)

❧—❧—❧—❧—❧—❧—❧—❧—❧

[...]

Loki.

Ella se ve confundida viendo la cantidad de cubiertos desplegados en la mesa, evidentemente no sabe cuál escoger para empezar a degustar su platillo. Observo callado, atento, quiero ver cómo sale de este obstáculo.

Me ve con un atisbo de malicia como si estuviese a punto de hacer alguna travesura, deja el pequeño tenedor de plata en su lugar y coge una papa frita con su mano con naturalidad llevándosela a la boca para darle una mordida pero termina devorándola por completo.

Sonríe con suavidad, su mano vuelve por otra papa para degustarla sin importarle que está sentada en uno de los más lujosos restaurantes de la ciudad y eso me fascina de ella.

Su vestido ceñido a su cuerpo hace resaltar su belleza, su piel blanca armoniza con ese rojo carmesí, su cabello castaño descansa ligeramente en sus hombros y su fino cuello me está haciendo una invitación a besarlo. Su escote es sutil pero lo suficientemente revelador como para hacer volar mi imaginación.

Mi boca muere por estar ahí.

— Te ves espléndida. — Digo sosteniendo su mano ocultando mis sucios pensamientos.

— Gracias tú igual te ves guapo. — Me coquetea. — ¿Y me vas a acompañar a cenar? — Dice viendo el plato que está frente a mí.

— Haré una excepción esta vez sólo por ti.

Pincho el filete con el tenedor corto un trozo y lo como, ella no me quita la mirada de encima tal vez porque es la primera vez que me ve degustando algo de Midgard.

— No está tan mal.

— No necesito probar el filete para saber que está delicioso pero eres difícil de complacer Loki. —Dice bebiendo desde de su copa de vino. — Eres muy distinto a tu hermano... Thor come todo lo que le pongas en frente adora mis sándwiches y hamburguesas.

— Con que cocinas para Thor... y dime ¿también lavas su ropa? — Digo frunciendo el ceño con evidente molestia en mi tono de voz.

— No señor Loki, no lavo su ropa y espero que no me haga una escena de celos aquí.

— No, por supuesto que no. — Vuelvo a coger su mano y la beso intentando calmarme. — Pero también quiero que algún día cocines para mí.

— ¡Por supuesto cuando gustes! pero ojalá no vomites del asco, mis hamburguesas no son tan finas como ese filete que tienes allí.

— De todos modos quiero probar.

Ambos disfrutamos de nuestra cena pero yo disfruto más de su compañía. Ella sonríe, se ruborizan sus mejillas cada vez que toco su mano, se ve contenta a mi lado. Tal vez seriamos felices juntos Lucía... ya puedo imaginar la loca idea de que un día te sentaras a un costado de mi trono como mi reina.

— ¿Te sucede algo? — Pregunta disipando mis pensamientos.

— No nada.

— ¿Entonces pedimos el postre?

La Obsesión del Dios del Engaño - Parte I, II y IIIDonde viven las historias. Descúbrelo ahora