Capítulo 137: La visita de Sigyn

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Bebo un sorbo de mi taza de café cuando escucho que llaman a la puerta.

— Buenos días. — El muchacho entra a mi oficina y toma asiento frente a mí.

— Buenos días.

— Ayer me disculpe con Lucy, sé que ella no tiene la culpa de nada.

— ¿Y qué te dijo?

— Aceptó mis disculpas y me dijo que tú siempre serás mi familia, independiente a quien tengas como pareja.

— Es correcto, tienes el apellido de la familia de Odín, o sea, mi familia... ¿te mencionó algo más?

— Nada más, nos dedicamos a trabajar le dije que por favor dejara los gastos ordenados para tener un informe a fin de mes, recuerda que ya cumplió cinco meses de su pasantía, un mes más y tendrá que dejar la compañía a menos que tengas planes para ella dentro de la empresa.

— Por supuesto que los tengo, independiente de que Lucy sea mi pareja ella ha demostrado que es capaz de ser de ayuda.

— Es una mujer inteligente, es bueno que lo reconozcas...

— ¿Y que más sucedió?

Quería indagar, ya que después de nuestra discusión no hemos vuelto a hablar.

— No nada más... después llegó ese sujeto extraño, el demonio.

— ¿Demonio?

— Sí, el hombre ese de cabello rojo del que te comenté cuando estabas en el hospital, tu sobrino... ¿no lo conoces?

— No.

— Llegó a buscarla al club, se fueron juntos.

La puerta se abre, entra Verity con su iPad en las manos.

— Tienes muchos pendientes Loki.

— ¿Sabes si Lucía llegó?

— Sí está en su oficina... con una visita, es un hombre creo. — Me levanto de mi escritorio.

— ¿A dónde vas?

— Vuelvo enseguida.

Dejo atrás mi oficina y camino por el corredor pasando por la recepción, sin tocar a la puerta entro y me encuentro a Lucy detrás de su escritorio y frente a ella en otro asiento el demonio del que todo el mundo habla.

— Loki... buenos días.

— Buenos días.

— Te presento a Kaan, él es el hijo de Hela... Kaan él es Loki bueno ya lo conociste en el hospital.

— Por supuesto... él era el moribundo. — Me dice el sujeto, y me estira la mano

Me quedo observando su mano, pero desisto de estrecharla.

— ¿Qué sucede Loki?

— Es más que obvio Bitchin, lo puedo oler desde aquí, apesta a celos.

— ¿Quién te dio derecho de llamar así a mi mujer?

— ¿Mi mujer? eso suena muy posesivo ¿no te parece?

— Nada bueno puede venir de ti si eres hijo de Hela... ¿ella te envío a espiarme?

— Ella me envío a proteger a tu novia.

— No necesito que la protejas, yo puedo hacerlo.

— ¿Ah sí? Y dime Lowkey ¿con qué poderes piensas protegerla? — Doy un paso hacia él, pero Lucy se interpone.

La Obsesión del Dios del Engaño - Parte I, II y IIIDonde viven las historias. Descúbrelo ahora