La Obsesión del Dios del Engaño - Parte I, II y III

Capítulo XXI: Te extrañé idiota. Parte II

。。。。。。。。。。。。。。 。。

¡Capítulo de larga duración! 

Disfrútenlo ...

。。。。。。。。。。。。。。 。。

[...]

Por fin recojo la bandeja, me incorporo, doy la vuelta y me retiro del lugar esquivando su potente mirada. Voy hasta el otro lado de la mansión, por un pasillo veo a Thor coqueteando con dos chicas.

— Thor... ¿tienes un momento? — Digo acercándome e interrumpiendo.

— ¿No puede ser en otro momento? estoy ocupado.

— ¡Tiene que ser ahora! — Thor se disculpa con las señoritas y me lleva hasta un rincón.

— ¿Qué sucede? no me digas que estás celosa.

— ¡Loki está aquí! ¡Ha vuelto!

— ¿Qué? ¿dónde está?

— ¡Acabo de verlo en el salón principal! ¡no sé porque está aquí! Thor tengo miedo ...

— Tranquila no dejaré que te lleve a ningún lado estoy aquí. —Añade el Dios acariciando mi mejilla con su fuerte mano.

— Tengo que volver a trabajar si desaparezco ya sabes quien fue.

Había sido una pésima noche primero me encuentro a Tom acompañado de una chica y después vuelvo a re encontrarme con el Dios psicópata. Lo extraño de todo esto es ¿qué hace Loki en una fiesta de humanos?

Ya eran las cinco de la mañana el trabajo había terminado al fin, la gran mansión ya estaba casi desocupada, por suerte no me había vuelto a encontrar con ninguno de los dos. Recibo el pago por mi trabajo en un sobre de papel que me servirá para algunos gastos. Me quito el delantal, tomo mi bolso y salgo de la mansión por una puerta trasera que colinda con el estacionamiento.

Me detengo un momento a buscar mis cigarrillos, enciendo uno y aspiro la primera bocanada de humo cuando escucho su voz grave y seductora: "sigues teniendo esa mala costumbre". Volteo y ahí está nuevamente erguido frente a mí a tan solo unos metros, con sus manos en ambos bolsillos en su elegante traje negro que siempre usa cuando viene a la Tierra.

— Y tú sigues entrometiéndote en todo lo que hago.

— Ha pasado tiempo ¿y ese es tu saludo? —Dice con sarcasmo.— Me esperaba más un: "hola ¿cómo estas Loki? tanto tiempo". —Añade acortando la distancia entre nosotros.— O tal vez un beso...—Sonríe.

— Lo que menos quiero es besarte. —Mentí.

— Ni tú te lo crees. — Dice viéndome con sus asombrosos ojos muy de cerca.

Y ahí estaban otra vez ambas partes peleando dentro de mí, una gritaba que me lanzara sobre él a besarlo y la otra que es el momento de huir. Se produce un silencio entre nosotros ambos nos quedamos viendo el uno al otro, perdidos.

— Tenemos una conversación pendiente. —Interrumpe el momento.

— Ahora no Loki sólo quiero mi cama, los pies me están matando trabaje toda la noche. — Digo apagando el cigarro con el pie.

— ¿Es cansancio o tristeza lo que veo en tus ojos?— Como me conoce.

— Cansancio.

— Te puedo llevar si quieres. — Dice sacando unas llaves de su bolsillo haciendo sonar uno de los lujosos automóviles estacionados.