Capítulo 157: Kamar-Taj

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Loki...

Para cuando leas este correo yo ya estaré muy lejos, así que no pierdas tu tiempo buscándome.

Sí, me voy... decidí dar un paso al costado por los dos. Tenías razón, siempre se trató de una despedida, pero no de soltero. Gracias por la intensa noche, de verdad la disfruté y cada beso que me diste me lo llevo tatuado con amor en la piel.

Vuelvo a reafirmar mi respuesta, cásate con Sigyn, y dale a tu hijo la familia que merece. Sé que estas aterrado, pero también sé que serás un buen padre y que no repetirás la historia.

Te amo, pero me amo más a mí, no creas que todo esto lo hago por ti, también es por mí. Necesito darme un descanso de las luces y de las cámaras, pero principalmente de ti.

Recuerda que prometiste intentar ser feliz.

Adiós.

Lucy.

Escribí en el correo, lo dejé programado para que se enviara a los ocho en punto del mismo día.

Guardé mi laptop en la única maleta que llevaré para mi viaje. Le pedí de favor a Susy que subiera a mis redes un video que yo misma grabé para mis lectores y seguidores, creo que merecen saber que me alejaré por un tiempo de las cámaras.

También le marqué a Kaan porque sigue sin aparecer, me preocupa que le haya sucedido algo malo. Aunque lo dudo, él es un demonio poderoso creo que es tan fuerte como su madre Hela, y si es así, me da mucha rabia que no se haya dignado a despedirse al menos.

Al ver el dúplex desocupado, me entró la nostalgia. En este lugar viví momentos muy bonitos, con Loki pero principalmente con Kaan, extrañaré sus bromas y sus ocurrencias extravagantes.

Hasta extraño que me llame Bitchin.

Tomé mi maleta y también el contenedor que tiene a Tommy dormido para que no se estrese con el viaje. Antes de salir del edificio, le dejé a la encargada en la recepción las llaves del dúplex. Arranque con mi carro en dirección al Sanctum Sanctorum, apenas son las 06:20 de la mañana. Llegué y me estacioné frente al antiguo santuario, bajé con Tommy y mi maleta color rosa con rueditas.

Las puertas se abrieron para mí sin necesidad de que llamara.

— Buen día Strange. — Dije entrando al vestíbulo, aunque no había nadie visible.

La primera en aparecer fue su capa, quien me abrazó tan emocionada como siempre.

Stephen apareció extrañamente caminando por las escaleras hasta mi encuentro.

— ¿Lista para tu estadía en Kamar-Taj?

— La verdad no, pero ya está decidido... quiero pedirte un favor, necesito que cuides a mi bebé.

— Soy alérgico a los gatos.

— No me refiero a Tommy, me refiero al Mercedes Benz rojo de allá afuera.

— Ya que estoy guardando varias de tus cosas, puedo cuidar también tu carro.

— Gracias... — Le entrego las llaves. — ¿supongo que aceptan mascotas en Kamar-Taj?

— No lo sé... habrá que preguntarle a Wong.

Se abre un portal de chispas y aparece un sujeto con rasgos asiáticos vestido con un traje extraño.

— Ella es Lucy la chica de la que te hable.

— Hola. — Le estiro mi mano.

— Wong... soy el Hechicero Supremo. — La acepta. — ¿Lista para irnos?

La Obsesión del Dios del Engaño - Parte I, II y IIIDonde viven las historias. Descúbrelo ahora