Capítulo 108: Baile de máscaras

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°•❀  Why do you leave me with watercolor eyes? ❀•°

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Entré agarrada del brazo de Liam al gran vestíbulo, una alfombra roja nos recibió y una enorme lampara de miles de cristales sobre nuestras cabezas era la protagonista del lugar. El recinto donde se llevaría a cabo el baile de máscaras es perfecto, cada pared tenía terminaciones doradas y el piso marmoleado brillaba tanto que podías ver tu reflejo en el. Estatuas, jarrones y espejos le daban la atmosfera apropiada al lugar, realmente parecía un Palacio, digno de un cuento de princesas.

— ¿Te gusta?

— Es bellísimo. — Dije examinando una obra de arte donde estaba retratada una mujer.

Caminamos hasta el salón principal donde estaban los invitados, había un coctel de camarones, caviar y otros manjares que no alcancé a distinguir. Repartían espumante dorado y rosa en bandejas de plata, obtuve una copa dando las gracias.

Esta noche parecía prometedora, realmente me sentía como una princesa en un cuento, solo me faltaba el príncipe. Pero ¿qué estoy diciendo? Liam está a mi lado y no tendrá el título de príncipe, pero se va tan atractivo en su traje de época y con su mascara negra que cualquier mujer quisiera estar en mi lugar.

Para ser más específica una llamada Sarah, desea mi lugar.

— Liam... que gusto me da verte. — Sarah le extiende su mano enguantada.

— Un gusto para mí también. — Liam recibe su mano dejando un beso, jamás la dejaría con la mano estirada es un caballero.

— Las dejo un momento iré a saludar a los invitados.

Gracias Liam por déjame a solas con esta bruja.

— No puedo decir lo mismo de ti...— Dice viéndome.

— Ni yo de ti.

— Está lindo tu vestido, aunque no lo mereces, es demasiado fino para ti.

— Entonces dile eso a Liam, él me consciente y me trata como una reina.

— Aunque la mona se vista de seda mona queda.

— Esta mona tiene algo que tú quieres, pero no tienes... — Dirigí mi vista a Liam quien estaba conversando con un grupo de gente. — Su verga.

Sarah parecía que estaba a punto de echar fuego por la boca, me acerqué a Liam pasando mi mano por su espalda, él cruzó su brazo por mi cintura.

Liam me pidió que fuese hasta el otro salón, pronto empezaría el baile y que en breve me alcanzaba. Entré a ese gran salón donde todos estaban con antifaces y máscaras, era imposible distinguir quien es cada persona. Bebí una copa de champagne rosa, mientras escuchaba la suave y bella melodía de un piano, tuve la sensación de que alguien tenía la mirada sobre mí.

Levanté mi vista para encontrar esa mirada, los enigmáticos ojos de un hombre me observaban a lo lejos. Él también bebía una copa, traía un traje verde oscuro de época muy elegante, unos pantalones color marfil y unas botas negras.

Esa mirada persistente detrás de su máscara me intimidaba, me hacía sentir diminuta como si fuese un depredador observando a su presa.

Los invitados tanto hombres como mujeres se forman en una fila horizontal, uno en frente de otros. Yo que me encontraba sentada en un sillón con brazos de madera, esperaba ver a Liam entre toda la multitud de personas.

— Señorita por favor, vaya a tomar su lugar el baile está por comenzar... — Me dice uno de los organizadores de la fiesta.

— Es que estoy esperando a mi pareja.

La Obsesión del Dios del Engaño - Parte I, II y IIIDonde viven las historias. Descúbrelo ahora