Ayudarme a Vivir "Ignazio Boschetto"

Capitulo 98

Capítulo 98

Piero deja las cosas de Valentina en su casa y se la lleva hasta la empresa para que la conozca y le dé la sorpresa a su padre, llegan al piso de presidencia y se van hasta la oficina de Ignazio, él está sentado pensando en Besabeth cuando le tocan la puerta.

Ignazio: Adelante.

Piero: Buenas hermano ¿Cómo estás? (Parado en la puerta)

Ignazio: Bien creo.

Piero: (Sonríe) Me lo imagino pero te tengo una sorpresa que sé que te cambiara tu estado de ánimos.

Ignazio: Así, espero que sea una buena noticia por favor.

Piero: (Entra y con el Valentina) Dale la bienvenida a tu hija.

Ignazio: (Levanta la mirada y ve a su hija y se para y la abraza) Hija mía estas aquí.

Valentina: (Con lágrimas en los ojos) Si papi aquí estoy para ayudarte.

Ignazio: Hija porque no me dijiste nada.

Valentina: Quise darte una sorpresa.

Ignazio: Y vaya que la distes (Con lágrimas en los ojos).

Valentina: Ya papi, no te me pongas llorón mira que tú no eres así.

Ignazio: (Sonríe y limpiándose las lágrimas) Si hija como tú digas (La vuelve abrazar) Hija y tu madre porque la dejaste sola.

Valentina: (Pasa y se sienta) Bueno mi madre ya está mucho mejor, el doctor dice que está mejorando con el tratamiento y bueno ella insistió tanto que me vine ayudarte padre.

Ignazio: (Se sienta) ¿Segura que ella está bien?

Valentina: Si, yo misma hable con su médico me dijo que el tratamiento está haciendo efecto y está mejorando, lo malo es que está perdiendo su cabello padre.

Ignazio: Si me lo imagino ese tratamiento es muy fuerte, lo siento mucho por tu madre me imagino que para ella ha sido muy difícil todo eso.

Valentina: Si padre, Paola me comento que llora cada vez que ve los pedazos de cabellos en su cepillo es muy duro verla así, pero gracias a dios está mejorando.

Ignazio: Si hija gracias a dios.

Eduardo necesita hablar con Ignazio y se fue a verlo, toco la puerta y Ignazio lo hace pasar y el entra tranquilamente.

Eduardo: Ignazio quería preguntarte, ay perdón no sabía que estas ocupado disculpa.

Ignazio: No tranquilo es bueno que hayas venido, (Se levanta y se acerca a su hija) te presento a mi hija ella es Valentina Boschetto (Ella se levanta y ve directo a los ojos a Eduardo) Hija él es Eduardo Cabrera mi socio.

Los dos se ven fijamente a los ojos y quedan flechados automáticamente, él no puede dejarla de contemplar su belleza, ella comienza a sentir algo en su estómago llamado "Mariposas" le da la mano y ella también, el aprovecha y le da un beso en sus muñecas y ella sonríe.

Eduardo: Bienvenida Valentina.

Valentina: Grazie, mile Grazie.

Piero: Bueno que te parece Eduardo si le damos un pequeño tour a mi ahijada por la empresa.

Eduardo: Me parece muy buena idea.

Valentina: Si pero antes me puedes devolver mi mano.

Eduardo: Lo siento de verdad (Le suelta la mano) Que pena.

Ignazio: (Sonríe) Bueno hija te dejos en las manos de Piero y Eduardo cualquier cosa ya sabes en donde estoy.

Valentina: Claro padre (Le da un beso en la mejilla y se va).

Piero: (Antes de salir se voltea y ve a Ignazio y sonríe) Grande Amore (Risas se va).

Ignazio: (Sonríe) Hay Ignazio Boschetto estos muchachos de ahora.

Eduardo esta mostrándole toda la empresa a Valentina, ella queda encantada con las máquinas y el personal que elabora todos son amables y le enseñan cada rincón, algunos empleados le regalan uno de los enlatados que procesan y ella los acepta. Besabeth está en su oficina y María la va a ver.

María: Se puede amiga.

Besabeth: (Sonríe) Si amiga pasa.

María: ¿Cómo estás?

Besabeth: Bien amiga ¿Y tú?

María: (Se sienta) Bien con mucho trabajo.

Besabeth: (Sonríe) Si amiga años que no trabajaba tanto como hasta ahora.

María: Si en la constructora todo era más fácil.

Besabeth: Si amiga eso es cierto.

María: Por cierto amiga quería comentarte algo que me dijo Eduardo.

Besabeth: ¿Que te dijo?

María: Eduardo me pregunto que si yo sabía algo sobre de ti y de Ignazio.

Besabeth: (La ve) ¿Cómo?

María: Bueno amiga me dio atender que si tú y Ignazio tenían algo.

Besabeth: ¿Algo cómo?

María: Algo sentimental.

Besabeth: Eduardo te dijo eso.

María: Si amiga me pregunto si te gustaba Ignazio, al parecer Ignazio te da mucha importancia a tus opiniones y la verdad es que él tiene razón, la manera que te ve Ignazio es muy distinta.

Besabeth: Amiga por dios.

María: Amiga a lo lejos se le nota a Ignazio que sigue enamorado de ti, y ahora tienen que trabajar, y cualquiera se podrá dar de cuenta porque trabajan en la misma empresa.

Besabeth: Amiga que voy hacer, no quiero que mi hijo piense lo peor de mí.

María: Besa tu no estas cometiendo ningún delito y menos Ignazio, si sé que acabas de perder a tu marido y es muy pronto de tener o formalizar una relación con alguien, pero tú y yo sabemos que nunca lo amaste, tu hijo no tiene nada que pensar de ti porque él sabe perfectamente que tú siempre te dedicaste a José hasta el último día, así que amiga tú tienes derecho de ser feliz con alguien.

Besabeth: Amiga yo no puedo volver con Ignazio, él no se puede enterar de la verdad y menos Eduardo.

María: Amiga tienes que decírselo tarde o temprano se sabrá la verdad y puede ser demasiado tarde.

Besabeth: Amiga como le digo la verdad a mi hijo, con qué cara le digo que el hombre que él siempre llamo papa durante toda su vida y llora aun su ausencia no es su padre, sino su socio.

María: Lo se amiga pero mira lo que me paso conmigo y Gabriel, nos enamoramos y cuando creímos que todo iba a estar bien nos enteramos que éramos hermanos.

Besabeth: (Llorando) Amiga es muy difícil decir la verdad.

María: Lo se amiga pero no esperes más, puede ser demasiado tarde cuando quieras decirle la verdad a tu hijo.