Ayudarme a Vivir "Ignazio Boschetto"

Capitulo 144

Capítulo 144

Mariana no puede creer que su hija está al frente ella, sus ojos se llenan de lágrimas y su llanto era inevitable, Valentina la ve y sus ojos se cristalizan.

Mariana: (Llorando) Hija mía, estas aquí.

Valentina: (Llorando) Mamma (Corre y la abraza fuertemente). Perdóname mamma perdóname por no avisarte pero apenas conseguimos boletos a Italia.

Mariana: (Llorando) Tranquila hija, yo no tengo nada que perdonarte nada.

Valentina: (Sentándose al lado de ella) ¿Cómo te sientes mamma?

Mariana: Mejor hija, gracias a dios estoy bien.

Valentina: ¿Que dice el medico?

Mariana: Que todo el esfuerzo que hemos hecho tendrá su fruto.

Valentina: (Toca sus mejillas) Mamma mírate como estas, esta enfermedad te está consumiendo.

Mariana: Tranquila hija valdrá la pena.

Valentina la ve y la vuelve abrazar, no puede evitar llorar al ver a su madre en el estado que esta, siente un gran miedo muy dentro de ella y ese mismo miedo le dice que nada está bien.

Mariana: Pero dime hija ¿Cómo estás tú y tu padre? ¿Qué ha pasado con la empresa?

Valentina: Gracias a dios todo está bien, al principio todo estuvo complicado pero todos hemos puesto un granito de arena y hemos levantado la empresa.

Mariana: Que bueno hija.

Valentina: Si mama, ha valido la pena tanto esfuerzo, tanto como mi padre y como Besabeth han trabajado muy duro

Mariana la ve muy sorprendida, escucha nuevamente el nombre de Besabeth y sus miedos se activan rápidamente, ella recuerda aquella noche donde Ignazio no paraba de llamar aquella mujer que había conocido en Venezuela y que no ha podido dejar de amar.

Mariana: ¿Besabeth?

Valentina: Si, ella es la viuda de Cabrera, su esposo era socio de mi padre y al fallecer ella y su hijo Eduardo se encarga de la empresa junto con mi padre.

Mariana: ¿Tiene un hijo varón?

Valentina: Si, se llama Eduardo José, que por cierto mamma es muy guapo, sabes me recordó aquella foto que me mostraste de mi padre cuando era joven.

Mariana se pone muy nerviosa al escuchar el comentario de su hija, recuerda aquella llamada que le hicieron años atrás donde le decían que Ignazio tuvo un hijo varón con otra mujer.

(Recordando)

Mariana: Alo.

Desconocido: ¿Por favor con Ignazio Boschetto?

Mariana: No él no se encuentra ¿Quién habla?

Desconocido: La verdad eso no importa, lo que importa es lo que le voy a decir a él.

Mariana: (Se asusta mucho y se pone muy nerviosa) ¿Por favor diga quién habla?

Desconocido: Hágale saber al señor Ignazio Boschetto que su hijo varón acaba de nacer, dígale que ya es padre (Fin de llamada).

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Mariana: Buenas tarde.

Desconocido: Ya que usted es su asistente y su esposa dígale al Señor Boschetto que su hijo tiene el apellido de otro hombre que lo llamara toda la vida papa.