Capítulo 192
Verónica: Si, él se vino con nosotras.
María pone los ojos como platos y ve fijamente a Verónica haciéndole señas para que no hable más de lo que sabe, ella no entiende y sigue hablando muy tranquila.
Valentina: ¿Y en dónde estás? Porque no lo veo aquí.
Verónica: Se acaban de ir.
Valentina. ¿Cómo?
Verónica: Se fueron hace más de media hora, seguro se reconcilian ya es hora que sean felices esos dos.
Karla: ¿Eran novias? Mira la tía pues, tan seriecita y no se aguantó mucho para tener novio.
Verónica: Karla por favor.
Karla ¿Qué mama? No dije nada malo.
Valentina: Hasta cuándo.
Gianluca: Tranquila él dijo que tenían unos asuntos pendientes, acuérdate que él se va y tiene que dejar todo en orden.
Valentina: (Lo ve molesta) Por favor tío, ellos no van hablar precisamente de trabajo.
Karla: Tranquila amiga, tu papa es muy guapo y tiene derecho, no me digas que eres de esas hijas celosas que no aceptan que su padre tenga novia.
Verónica: Karla por favor.
Valentina: Esto no se lo voy a perdonar (Saca su teléfono y comienza a marcar un numero)
María: ¿Qué haces?
Valentina: Llamarlo y exigirle que regrese cuanto antes.
Manuel: Valentina creo que te estas comportando como una niña malcriada, debes de calmarte ya tu padre está bien grandecito para este tipo de escenas.
Valentina: No Manuel, ya mi padre y yo hablamos de esto y me prometió mantenerse alejado de ella.
Ignazio llega al mar y se estaciona, ambos se bajan y la brisa está un poco fuerte, él toma de las manos a Besabeth y luego la abraza dejando que el viento toque sus rostros y contemplan el infinito del mar.
Besabeth. ¿El mar? ¿Por qué?
Ignazio: Porque él es protagonista de nuestro amor.
Besabeth: (Sonríe) ¿Por qué lo dices?
Ignazio: Cuando nos fuimos a vivir junto nos vinimos al mar, aunque después nos separamos durante 27 años.
Besabeth: 28.
Ignazio: ¿28?
Besabeth: Si, mañana cumpleaños Eduardo.
Ignazio: Mañana también cumpleaños Valentina.
Besabeth. ¿El mismo día?
Ignazio: Si, el mismo día. Porque el destino nos quiere separar, no entiendo que gana con eso.
Besabeth: No lo sé, creo que nos quiere enseñar algo.
Ignazio: (La voltea y la ve fijamente) Te Amo, y nunca te dejare de amar.
Besabeth: (Acaricia las mejillas de Ignazio) Yo también te amo mi amor (Se le cristalizan los ojos).
Sus labios se van acercando poco a poco y nuevamente están juntos y se besan apasionadamente. Valentina sigue insistiendo pero Ignazio tiene el teléfono apagado, ella está muy molesta y comienza a perder los estribos.
Valentina: Apagado.
Gianluca: Tranquila Valentina, no te pongas así, creo que tienes que madurar un poco.
Valentina: No tío, el yo hicimos un trato.
Manuel: Valentina entiende por favor, ellos se aman y la vida le ha negado la oportunidad de estar juntos, ahora por favor no se la niegues tú.
Valentina: Si pero cuál es el precio de su amor (Sus ojos se cristalizan) Yo también amo a Eduardo pero.
María: Ya sí, creo que tenemos que calmarnos.
Valentina: Yo no me voy a calmar hasta que vea a mi papa entrar por esa puerta. El me lo prometió por eso nos vamos.
Andrea: Valentina pero fueron 27 años de separación y eso tú lo sabes.
Valentina: Andrea tú no sabes lo que estoy sintiendo, ni siquiera has pasado por algo igual.
María: Tienes que calmarte para no complicar las cosas.
Manuela: Exacto, te puedes arrepentir después.
Piero, Eduardo y Carlos se están bajándose del carro y llegando a la puerta, Valentina está muy alterada porque su padre no aparece y sabe que esta con Besabeth.
Valentina: ¿Cómo puede estar con la mujer que le arruino la vida? Como es posible que siga amando a la mujer que le pario un hijo y lo hizo pasar como hijo de otro, quitándole la oportunidad de conocer a su verdadero padre (Comienza las lágrimas a rodar por sus mejillas) Como puede estar con esa mujer que lo único que ha hecho es arruinarnos la vida.
Gianluca: Cálmate Valentina por favor (Piero cuidadosamente abre la puerta).
Valentina: (Levanta la voz) Como quieres que me calma cuando amo con todas mis fuerzas y ella viene y me lo arrebata diciendo que es mi hermano, estoy enamorada de Eduardo y no lo puedo amar con total libertad porque es mi hermano.
Eduardo entra y escucha las palabras de Valentina y se queda muy sorprendido y a la misma vez confundido, María lo ve y pone los ojos como platos y se asusta porque Eduardo escucho todo.
Eduardo: ¿Cómo?
Valentina: (Se voltea y lo ve) ¿Eduardo?
Eduardo: (Acercándose) Que dijiste Valentina.
Gianluca: Dios mío no puede ser.
Valentina se queda paralizada y no dice nada, cae al mueble y se sienta, Manuel se tapa los ojos y María se le cristalizan los ojos, Gianluca ve a su esposa y la toma de las manos.
Gianluca: Vamos mi amor.
Andrea: Si por favor, sácame de aquí (Se levanta y se van)
Eduardo: (Viendo a Valentina) Dime Valentina que dijiste (Comienza a cristalizarse los ojos).
Verónica: Karla, Pedro vámonos.
Karla: Si mama (Se levantan y se van).
María: Hijo cálmate.
Eduardo: Como quieres que me calme María (Ve a Valentina) Dime por favor (Comienza a llorar) Repite lo que dijiste.
Valentina: Eduardo yo.
Eduardo: (Levanta la voz) Dime.
Valentina: (Llorando) Perdóname.
Eduardo: Por favor dime lo que me tienes que decir.
Valentina: Mi amor.
Piero: Por favor Eduardo cálmate si (Lo agarra por la espalda).
Eduardo: No, ella dijo algo y quiero que lo vuelva a repetir para entender.
María: Hijo por favor no es nada importante.
Eduardo: No es nada importante, ella acaba de decir que es (Se le quiebra la voz) Mi hermana, eso te parece nada importante.
Valentina: (Llora más fuerte) Perdóname papa.
Eduardo: Valentina por favor, dime la verdad.
Valentina: Si, es por eso que tu no podemos estar junto, es por eso que es un pecado y un delito tener una relación porque (Se le quiebra la voz) Eres mi hermano, eres hijo de Ignazio mi padre.
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Ayudarme a Vivir "Ignazio Boschetto"
RomanceLa vida es bastante complicada, nos ensaña tantas cosas, donde tenemos que aprender, y aprender a prestarle atención a cada detalle para poder entenderla. Ignazio Boschetto es un hombre que la vida le ha enseñado aprender a vivir solo, desde muy peq...