****Maratón****
Capítulo 129
Verónica está muy dolida y no le piensa perdonar esta infidelidad a su marido, ya no piensa seguir casada con él y comienza a buscar la mejor manera de separase del, pero no se lo dejara tan fácil lo piensa destruir y dejarlo muy mal parado delante de todo el mundo.
Los días pasan y llega el día de la boda de María y Piero. Ambos están muy nerviosos después de muchos años de convivir juntos al fin serán esposos delante la ley. María esta con sus amigas alistándose como en todas las bodas Verónica, Besabeth y María están juntas conversando y muy emocionadas.
María: Estoy nerviosa chicas.
Verónica: (Sonríe) Es normal María te casas con el hombre que amas.
María: Si verdad, después de tanto tiempo al fin seré su esposa.
Besabeth: No sé porque esperaste tantos años para casarte con él.
Verónica: Yo digo lo mismo, ya no van a poder tener hijos. Digo cuando uno se casa lo primeros es eso los hijos.
María: (Un poco triste) Lo sé, pero si me casaba antes o después de igual manera no le podía dar un hijo.
Verónica: (Sorprendida) ¿Qué?
Besabeth: Vero, María es estéril, María no puede tener hijos biológicos.
Verónica: Dios mío amiga (La abraza) Porque nunca dijiste nada.
María: Tengo miedo, sé que ya a estas alturas no vale la pena pero tengo miedo que Piero se entere y me deje definitivamente.
Verónica: Piero aún no sabe.
María: No, nunca se lo dije.
Verónica: Amiga (Llorando)
Las tres se abrazan fuertemente. Ignazio, Gianluca y Piero están casi listos para la boda, Piero está muy nervioso y comienza a caminar de un lugar a otro.
Gianluca: Hombre me estas mareando.
Piero: (Nervioso) Lo siento.
Ignazio: Quédate tranquilo Piero ella no te va dejar plantado, no después de 20 años de noviazgo (Risas)
Piero: Si verdad (Sonríe muy nervioso).
Eduardo: (Entra) Permiso (Ve a Piero) ¿Que tienes? ¿No me digas que estas nervioso?
Gianluca: No, no se nota para nada (Risas).
Eduardo: Me dijo mi madre que María esta lista y Valentina me acaba de decir que ya el juez acaba de llegar.
Piero: Tan pronto.
Eduardo: (Sonríe) Si ya llego.
Todos se ríen y se van hasta el salón de fiesta a esperar a los novios. Valentina entra a la habitación de María para avisarles que toda esta listo.
Valentina: (Entra) Permiso. María que hermosa te vez.
María: Gracias.
Valentina: Ya llego el juez.
María: ¿Qué? ¿Ya llego?
Valentina: Si, ya llego, solo faltas tú.
María está muy nerviosa, Besabeth y Verónica se despiden y salen de la habitación junto con Valentina, Eduardo es quien la llevara de brazos hasta donde está su futuro esposo. Eduardo entra a la habitación con el buque y se sorprende al ver a María.
Eduardo: Lista (La ve) Tía que bella estas.
María: Gracias.
Eduardo: Lista.
María: Si, pero...
Eduardo la ve fijamente un poco desconcertado, se sorprende al escuchar eso de María, sabía que estaba muy nerviosa.
Eduardo: ¿Que sucede tía?
María: Puedes llamar a Piero.
Eduardo: (Sorprendido) ¿Para qué?
María: Necesito hablar con él, antes de casarnos.
Eduardo se asusta aún más, no termina de entender y pone los ojos como platos y nuevamente le pregunta lo mismo.
Eduardo: Tía que sucede ¿No te quieres casar?
María: Llámame a Piero por favor, necesito hablar con él.
Eduardo la ve fijamente y sale de la habitación para buscar a Piero. Todos los invitados están sentados esperando a María, Piero está hablando con sus amigos cuando ve llegar a Eduardo, pero sin su amada, se asusta mucho y Eduardo se acerca mientras es el centro de las miradas.
Eduardo: Piero mi tía quiere verte.
Piero: ¿Cómo?
Eduardo: Al parecer quiere hablar contigo.
Piero se asusta demasiado y su corazón comienza a latir fuertemente, se comienza a imaginar lo peor y ve a sus amigos muy nerviosos más de lo que ya está.
Ignazio: ¿Que sucede?
Piero: María quiere hablar conmigo.
Ignazio: (Sorprendido) ¿Qué?
Eduardo: Así me dijo.
Piero se va hasta la habitación de María, mientras se acerca Valentina a preguntar lo que esta pasando mientras la gente murmura.
Valentina: ¿Que pasa Eduardo? ¿En dónde está María?
Eduardo: Quiere hablar con Piero.
Valentina: (Sorprendida) ¿Qué? Dios mío no puede ser.
Todos se ponen muy nerviosos. Piero toca la puerta y María lo deja entrar, mientras Piero muy nervioso entra a la habitación ve a su futura esposa vestida de novia.
Piero: Mi amor estas bellísima.
María: (Con lágrimas en los ojos) Piero necesito hablar contigo.
Piero: ¿Qué pasa? No te quieres casar conmigo verdad.
María: (Llorando) No es eso mi amor, es algo que te he ocultado por años y necesito que sepas la verdad antes de ser tu esposa.
Piero: ¿Qué pasa?
María: Quiero pedirte perdón por no decirte esto mucho antes, pero entiéndeme tenía mucho miedo de que me dejaras, yo sabía que no podía soportar estar sin ti.
Piero: María dime de una vez por todas que quieres que yo sepa, que no puede esperar después de la boda.
Y
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Ayudarme a Vivir "Ignazio Boschetto"
RomanceLa vida es bastante complicada, nos ensaña tantas cosas, donde tenemos que aprender, y aprender a prestarle atención a cada detalle para poder entenderla. Ignazio Boschetto es un hombre que la vida le ha enseñado aprender a vivir solo, desde muy peq...