Ayudarme a Vivir "Ignazio Boschetto"

Capitulo 22

Capitulo 22
Ignazio: (Caminando agarrados de la mano) Cuando eramos niños pasábamos horas y horas caminando estos mismo caminos, la primera vez que vinimos nos encanto, el primer días nuestros padres nos llevaron al rió, nos encanto tanto que no queríamos irnos.
Besabeth: Y todavía le gusta (Risas).
Ignazio: (Risas) Si es cierto (Ríe) al día siguiente nos escapamos del rancho y nos vinimos con unos caballos hasta el rió, y nos bañamos duramos horas y horas sin importarnos nada, nuestros padres estaban preocupados por nosotros pues se levantaron y no estábamos en nuestro cuarto.
Besabeth: Me lo imagino, ustedes eran muy traviesos.
Ignazio: Si, nos divertíamos muchos juntos, cuando salimos para irnos, cuando nos dimos de cuenta que los caballos no estaban y se nos fueron, nos preocupados bastante pues ya era muy tarde para regresar caminando.
Besabeth: Y que hicieron?
Ignazio: (Llegan al rió y comienza a bajar para bañarse) Caminar hasta llegar a casa.
Besabeth: Eso es un peligro Ignazio.
Ignazio: Si lo se, pero teníamos que volver, lo peor es que nos perdimos, no sabíamos en donde estábamos y fue ay donde nos preocupamos mucho.
Besabeth: (Comienza a quitarse la ropa y se quedan en traje de baño) No de verdad se volvieron locos.
Ignazio: Ya era tarde, el camino estaba cada vez mas oscuros, en eso nos encontramos una culebra, nos asustamos mucho pero lo matamos (Risas)
Besabeth: Que? No de verdad están locos.
Ignazio: Si un poco, de tanto caminar llegamos a casa apena mi madre nos vio llegar pego el grito al cielo porque por fin aparecimos (Risas) Pero peor fue el grito de Greta se asusto cuando vio la culebra en nuestra manos (Risas)
Besabeth: Pobre eso no se hace Ignazio, me imagino la preocupación de ellas me supongo que los castigaron.
Ignazio: (Sonríe, y se van hasta la orilla del rió) Supones bien, el castigo fue durante toda las vacaciones y encerrados en el rancho, fue el peor castigo que nos pudieron dar.
Besabeth: Yo los mandaría de nuevo a caracas (Risas)
Ignazio: Pero no duro muchos, mi padre siempre fue compresivo y se puso acuerdo con Agustín y el padre de Gabriel y nos llevaron al rió sin que nuestras madres se dieran de cuenta.
Disiden meterse a bañarse el agua esta un poco fría, Besabeth se detiene un poco y le pregunta.
Besabeth: ¿Ignazio sabes llegar de nuevo a la casa?
Ignazio: (La ve un poco preocupado y sonríe) Tranquila, si se como llegar, eso creo (Risas) Mentira mi amor (Sonrien y se besan)
Besabeth: Eso no se hace Ignazio.
Se lanzan al agua y comienzan a jugar un poco, segundo después Ignazio la tiene agarrada por la cintura y la comienza a besar apasionadamente, solo están ellos dos solos en el agua acariciándose sus cuerpos están calentándose cada vez mas, el comienza a besarle por el cuellos, Besabeth acaricia la espalda, lentamente salen del agua, y se dejar llevarse hasta el pasto, sus cuerpos poco a poco van cayendo hacia el suelo y finalmente caen y se ven fijamente y el con voz baja le dicen "Te Amo" sus labios nuevamente están juntándose y el comienza a besarle por el cuellos ella lo deja y cierran sus ojos, el baja poco a poco y besa todo su cuerpo con sus labios, se dejaron llevar por la pasión que sienten ambos, la poca ropa que tenían comienza a estorbarle.
Ella tenia mucho miedo de estar con el, pero Ignazio le transmite seguridad, sus cuerpos estaban totalmente desnudos y el deja caer todo su peso encima de ella, le araña la espalda, sus movimientos poco a poco va aumentando y ella da señal de placer.
Sus amigos ya se levantaron y se extrañaron que no aparecían por ningún lado de la accienda, le preguntaron a unos de los empleados y solo respondio que los vio salir en la mañana muy temprano pero no han regresado, ya era hora de desayunar así que no esperaron mas y decidieron empezar sin ellos, ninguno de ellos se imaginaron en donde podrían estar, solo se sentaron y platicaron mientra el desayuno se servia.
Ellos seguían en el rió, están sentados desnudos solo se están besando, el le muerde un poco los labios y comienzan a sonreír.
Ignazio: Te Amo (Con voz baja y sonriente).
Besabeth: Y yo a ti.
Nuevamente se besan, no se dan de cuenta de la hora, solo siguen besandose hasta que se desgasten sus labios, Besabeth escucha unos ruidos dentro del monte y se asusta, Ignazio la ve y se sonríe así que los dos disiden retirarse, se visten cuidadosamente y van del rió, están por todo el camino bromeando y hablando sobre ellos y las locuras que han hecho hasta ahora.
Después de varios minutos, ya casi una hora de camino llegan a la hacienda, el la tiene cargada sobre su espalda y el esta sonriente, Pedro los ve desde lejos así que sonríe espera que lleguen, María esta hablando con Gabriel y también lo ve y sonríen.
Pedro: ¿En donde estaban? (Sonríe).
Ignazio: (Sonriendo) Salimos a caminar y terminamos en el rió
Gabriel: Y no nos dijeron nada, que malos amigos son.
Maria: Tenian que invitarnos.
Todos ríen un poco, ella tiene mucha hambre ya que salio desde temprano y no probo nada, Veronica, María y Besabeth se van a la cocina ha platicar un rato, asi aprovecha Besabeth de probar algo para desayunar, las chicas se mueren de curiosidad por saber que hacían ellos en el rió, ella no dice nada solo les contó que estaban platicando y la historia de ellos cuando se escaparon de la casa, ellas se divierten mucho al saber esa historia, acabo de unos minutos Ignazio también le da hambre así que se van todos a la cocina y comienzan hablar y recordando mas momentos de su infancia.
Ha pasado casi toda la mañana hablando, Besabeth se va a bañar, quedaron que iban a pasar un día de campo todos juntos, están listo y se van antes del medio día. Ya comienza a caer la tarde así que se van todos al rancho para ir a descansar, ya el día esta por acabar así que se retiran, Pues todos se cambian de habitación, Gabriel se va a dormir con María, Veronica y Pedro duermen juntos desde el primer día, y Ignazio y Besabeth no son la excepción y siguen durmiendo juntos.
La noche avance y cae la mañana nuevamente, ese sera el ultimo día en el rancho, Gabriel recibe una llamada.