Ayudarme a Vivir "Ignazio Boschetto"

Capitulo 143

Capítulo 143

Pasa las horas muy rapido y amanece rapido, Ignazio y Valentina ya llegaron a Italia como de costumbre de madrugada, espero que amaneciera en Venezuela para poder llamar a Besabeth, Ignazio entra en aquella vieja biblioteca donde se encerró muchas veces, quita uno de los cuadro y abre la caja fuerte saca unos papeles que necesitara en la empresa y aquel cobre de terciopelo azul donde aún guarda el anillo que le dio su madre, lo abre y se sienta y sonríe.
Ignazio: Ahora si mi amor, ahora si vamos hacer feliz juntos como debió ser hace 27 años.
Valentina entra a la biblioteca y lo ve, cierra la puerta y se sienta al frente de él, no puede evitar ver la cajita de terciopelo y decide preguntarle a su padre.
Valentina: ¿Y eso?
Ignazio: (Ve la cajita sonríe) Un viejo regalo. Cuando tenía 10 años mi madre antes de morir me lo dio para que cuando creciera se lo diera a la mujer con la que fuera a compartir toda mi vida para hacerla mi esposa.
Valentina: ¡Besabeth!
Ignazio: Exacto, por alguna extraña razón la primera vez que lo vine a buscar se me quedo en esta misma mesa, cuando fui a buscarlo no estaba y ya era demasiado tarde porque estaba a punto de abordar el avión de regreso a Venezuela.
Valentina: ¿Le ibas a pedir que fuera tu esposa?
Ignazio: Si, pero no se pudo.
Valentina: Hasta hoy.
Ignazio: (Sonríe) Si hasta hoy.
Valentina: (Sonríe) Que no se vuelva a quedar.
Ignazio: No, esta vez lo meteré en la maleta de primero.
Valentina: Bueno papa te dejo voy a ver a mi mamma, le voy a dar una sorpresa.
Ignazio: ¿Ella no sabe que estas aquí en Italia?
Valentina: No exactamente, sabe que vendría a Italia mas no sabía cuándo llegaba.
Ignazio: (Sonríe) Está bien hija, cuídate.
Ignazio le da un beso en la frente y ella se va de la biblioteca y el comienza a marcar el número de Besabeth para avisarle que ya llego. En Venezuela esta Besabeth levantándose de su cama cuando suena su celular, ella lo busca y ve el número que trae el código internacional, sabe perfectamente que es Ignazio y responde rápidamente.
Besabeth: Alo.
Ignazio: Buenos días amor mío. ¿Cómo amaneces?
Besabeth: Extrañándote.
Ignazio: Yo también te extraño mi amor (Ve el anillo) Pero ya pronto estaremos juntos sin que nada ni nadie se oponga entre nosotros.
Besabeth: (Sonríe) Me encanta esa idea. Pero dime ¿Llegaron bien?
Ignazio: Si, llegamos esta madrugada.
Besabeth: Gracias a dios. ¿Valentina?
Ignazio: Se acaba de ir se fue a ver a su madre.
Mariana esta acostada esperando a Paola que le dará su medicamento, ninguna de las dos sabe que Ignazio y Valentina están en Italia. Paola viene con una bandeja con agua y las pastillas.
Paola: Aquí está (Deja la bandeja en la mesa y agarra las pastillas y el agua) Toma ya es hora de tu medicamento.
Mariana: (Levantándose un poco) Gracias amiga (Tomándose la pastilla y el agua).
Paola: (Se sienta) ¿Cómo te sientes?
Mariana: (Dándole el vaso de agua) Igual, los dolores son insoportables.
Paola: Me imagino amiga, ¿Qué vas hacer cuando venga Valentina?
Mariana: No lo sé.
Paola: Amiga sigo insistiendo, tienes que decirle la verdad a tu hija.
Mariana: No Paola no insistas, yo no le pienso arruinarle la vida a mi hija más de la que se la he arruinado.
Paola: Por dios Mariana tú no le has arruinado nada a ella, siempre actuaste de la mejor manera para que tuviera una vida normal.
Mariana: Te equivocas Pao, no he sido la mejor madre para ella. Paola te quiero pedir un favor.
Paola: ¿Qué pasa?
Mariana: Necesito que me consigas un buen abogado para redactar mi testamento.
Paola: (La ve con lágrimas en los ojos) Mariana tengamos fe amiga (Llorando) sé que dios nos ayudara y te salvara de esta horrible enfermedad.
Mariana: No amiga (Llorando) sé que me queda poco tiempo de vida y tengo que dejar todo en orden.
El timbre de la casa suena, Paola se sorprende igual que Mariana no esperan a nadie, Paola se levanta y baja abrir la puerta, mientras Mariana se acomoda un poco y comienza a recordar su pasado con Ignazio, no puede evitar recordar el día que se enteró de su embarazo y como Ignazio la fue a buscar al aeropuerto para que no se fuera, sus lágrimas recorren sus mejillas, luego recuerda el día que él las dejo definitivamente y las veces que la Valentina se iba con el.
Mariana: Perdóname mi amor, perdóname por amarte tanto.
A los pocos segundo la puerta de su habitación se abre, ella piensa que es su amiga así que pregunta quien era quien tocaba el timbre.
Mariana: Pao ¿Quién era?
Valentina: (Entra y la ve) Soy yo mamma, soy tu hija.
Mariana: Hija (Sorprendida)

Quiero decirles que ya esta historia esta por finalizar y darle punto y final a mi primera novela que gracias a ustedes ha avanzado poco a poco. muchas gracias por comentar y votar, es muy importante para mi saber su opinión, ayer estaba pensando en hacer un vídeo donde ustedes preguntan lo que quieran saber sobre sobre mi novela, yo se las responderé en un vídeo que publicare un día antes del Capitulo final, si quieren participar dejen su pregunta en los comentarios de cada capitulo y sera respondida pronto.

También quería decirles que Si Me Falta Tu Mirada (Mi próxima novela de Piero Barone) esta paralizada hasta el nuevo aviso, resulta que mi musa esta de vacaciones y no quiere regresar, espero que se aburra sola y regrese a trabajar de nuevo jejejejejejeje...
Bueno sin mas rodeos aquí les dejo mi el Capitulo de hoy