Capitulo 13

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 Capítulo 13
Raquel: Si, yo tanto tiempo Flor Elena.
Flor: Que quieres? Que haces aquí?
Raquel: Hablar contigo, o no puedo hablar con una vieja amiga.

Flor esta muy sorprendida y no sabe qué hacer, Raquel sin ser invitada entra a la casa y se sienta en el sofá.

Raquel: Vine a verte chica tranquila siempre supe dónde vivías hoy tengo mucho tiempo y decidí visitarte, a ti y a tu hija ¿María Elena verdad?
Flor: ¿Que quieres?
Raquel: (Detallando cada espacio de la casa) Siempre me gusto como decoras la casa, tuviste siempre un buen justo para eso.
Flor: Raquel ¿Qué haces aquí?
Raquel: Chica, no me invitas un buen café, mira que tu café encantaba en mi casa, sobre todo a mi difunto marido (Flor esta viéndola fijamente) Cuéntame ?Como te ha tratado la vida?.
Flor: No te hagas la preocupada Raquel que nunca te importo en donde yo estaba.
Raquel: Te equivocas siempre me preocupaste, por eso no he votado a tu madre de mi casa, y mira que debí hacerlo hace mucho tiempo, debí botarla junto contigo el mismo dia pero la verdad no soy tan cruel como parece.
Flor: Mi madre no tiene la culpa de nada.
Raquel: Claro que sí, pero bueno no discutamos por eso, solo vine a visitarle y hacerte saber que lo que necesites me llames sabe en dónde buscarme, bueno chao querida nos vemos en otra oportunidad y así poder tomarnos un buen café (Se retira).

Flor queda muy mal después de la llegada de Raquel, está muy preocupada por volverla encontrar después de tantos años. Raquel esta camino a su casa está pensando en lo que ocurrió en el pasado.

(Recordando)

Raquel: (Abriendo la puerta y sacando a Flor) Fuera de aquí Maldita Perra!!! Fuera de mi casa no quiero volverte a ver por nada del mundo (Le agarra el brazo, Flor está llorando desconsoladamente) No vulvas a pisar un solo pie en mi casa y en mi familia, vete de aquí antes de que llame la policía y te meta presa

 (Termina de pensar). Maldita que quieres ahora después de tantos años.

El día transcurre normalmente, ya es casi la dos de la tarde y Besabeth no ha comido nada está muy concentrada en unas cuentas muy importante que no le dan, le tocan la puerta.

Besabeth: Adelante.
Secretaria: Señorita la busca un joven.
Besabeth: A mí, ¿Quién? Si es el mismo de ayer dígale que no estoy, que estoy en una reunión muy importante y que no puedo atenderlo.
Secretaria: No, es otro dice que necesita hablar con usted urgentemente sobre unas cuentas.
Besabeth: Que? Ay dios mío hazlo pasar por favor (Se retira la secretaria) Que pasara ahora dios mio.
Ignazio: (Entrando a la oficina) Señorita necesito su ayuda.
Besabeth: (Lo ve y sonríe un poco) ¿Tu qué haces aquí?
Ignazio: Resulta que mi mejor amigo me ofreció una ayuda y voy aprovechar su confianza para recibirla, será que me puede atender (Ríe)
Besabeth: Pasa y siéntate.
Ignazio: ¿Como estas?
Besabeth: Bien y ¿tú?
Ignazio: Mejor, estaba solo en mi oficina con unas cuentas que no me cuadran y me acorde que Pedro tiene la mejor Administradora del mundo, así que decidí hacerle una consulta a ver si me puede ayudar.
Besabeth: (Sonríe) A ver que será.

Le pasa el libro de contabilidad y comienza a revisarle, rápidamente Besabeth se da de cuenta que era mentira solo quería una excusa para ir a visitar y verla nuevamente, ellos están conversando sobre la supuesta cuenta que no entiende, se desvían y terminan hablando de sus gustos.

Ignazio: Entonces te encanta el Fútbol.
Besabeth: Si desde pequeña, mi tía nunca me dejo jugar con los otros chicos, decía que era un deporte para hombre y yo era mujer.
Ignazio: Eso es mentira, hoy en día las mujeres son buenas en todo, sobretodo en el fútbol, es más te invito este fin de semana a jugar fútbol tu y yo ¿Qué te parece?
Besabeth: (Risas) No, de verdad que no, hace mucho que no juego.
Ignazio: No importa yo te vuelvo a enseñar y listo.
Besabeth: (Risas) No de verdad que no.
Ignazio: Pero porque? Ya me dijiste que jugaste en el colegio, así que quiero saber que tanto sabes. A los niños le van encantar la idea, Hazlo por ello.
Besabeth: (Risas) Bueno está bien solo por ellos lo voy hacer.
Ignazio: Perfecto, que te parece si hacemos una apuesta.
Besabeth: ¿Qué? no de verdad que no.
Ignazio: Si vamos, Que te parece si apostamos ¿El que pierda invita al otro a cenar?
Besabeth: (Sorprendida) ¿Que? ¿Ha cenar?
Ignazio: Si, a cenar.
Besabeth. Estás loco.
Ignazio. Si, un poco (Risas)
Besabeth: No de verdad que no acepto tu propuesta
Ignazio: Vamos hacerlo, la vamos a pasar increíble, y así aprovechamos de compartir un rato y el que gane cera invitado a una cena. ¿Qué dices?.
Besabeth: No, solo jugare y ya.
Ignazio: Anda, soy malo para rogar (La ve y le hace una carita muy triste y al mismo tiempo muy chistosa, ella sonríe) Esta bien, no hagas eso.
Ignazio: Trato entonces, el que gane tendrá su premio.
Ambos sonríen, de una o otra manera Ignazio invito a salir a Besabeth entra Pedro a interrumpir y lo ve platicando.
Pedro: Disculpen de verdad, no sabía que estabas aquí Ignazio.
Ignazio: Si, vine hacerle una consulta, pero ya me voy (Agarra el libro). Gracias por la ayuda.
Besabeth: De nada.
Pedro: ¿Ya te vas?
Ignazio: Si tengo que trabajar permiso (Se retira).
Pedro: Perdón si interrumpí algo.
Besabeth: No tranquilo siéntate.

Pedro se queda hablando con Besabeth sobre una edificio que está dando problemas económico, la construcción se está tardando demasiado y tienen que resolver el problema. Verónica esta junto con su suegra planeando su boda con Pedro.

Verónica: Si, este vestido me encanta (Le muestra la revista a su suegra)
Greta: Si muy bonito, (Llega le muestra otra) Que te parece este.
Verónica: Me encanta esta bellísimo.
Greta: Si es muy bello, el que lo diseño es amigo mío, puedo conseguir una cita con él.
Verónica: Si, me encanta la idea.
Greta: Verónica te puedo preguntar algo?
Verónica: (Viendo las otra revista) Si.
Greta: Tú sabes que le paso a Pedro en la boca.
Verónica: ¿Como? (Sorprendida)
Greta: Lo que pasa es que, esta mañana me dio un beso como lo acostumbra hacer toda la mañana y me di de cuenta que tiene la boca partida. ¿Tú sabes lo que le paso?
Verónica: (Sorprendida) No señora Greta no sabía, anoche apenas lo vi y ni me di de cuenta (Muy nerviosa)
Greta: Que tonta soy, ahora te preocupe a ti.
Verónica: No se preocupe, yo le preguntare a ver qué me dice. ¿Que le habrá pasado?
Greta: No hija, no quiero que ni hijo diga que soy una chismosa que me quiero meter en sus cosas, lo mejor es que no le digas nada.
Verónica: Pero señora Greta me está diciendo que tiene la boca partida, como no le doy a preguntar es mi futuro esposo.
Greta: Si hija lo sé, pero creo que es lo mejor yo no quiero que tengas ningún problema con mi hijo por cuenta mía, además tenemos mucho trabajo por hacer, una boda no se realiza sola.

Verónica se queda preocupada, ya que su suegra le hizo esa extraña pregunta y ahora ella quiere saber qué es lo que paso, no se imaginan los golpes de recibió de Ignazio después de haberse acostado con la hermana de su mejor amigo, es una noticia muy dura que ellas ni se la imagina.
Nuevamente Flor Elena recibe visita en su casa, pero esta vez no es Raquel. Le tocan el timbre, ella está cocinando, ella al escuchar el timbre se lava las manos y se las seca con un paño de cocina.
Flor: (Abriendo la puerta) Madre.  


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