Ayudarme a Vivir "Ignazio Boschetto"

Capitulo 153

*Maratón*

Capitulo 153

Piero y María están en su habitación listos para dormir, María está muy pensativa desde que Ignazio y Besabeth llegaron, Piero sale del baño y se quita los lentes y la ve fijamente y la abraza dándoles besos en el cuello.

Piero: Señora Barone se puede saber en qué piensa tanto.

María: (Peinándose) En nada mi amor.

Piero: (Viendo al espejo) Segura.

María: Si (Baja la cabeza) Bueno no.

Piero: (Se pone de frente de ella) ¿Dime entonces?

María: Mi amor estoy pensando en cómo ese niño esta, a pesar de que no olía mal tenía una ropita toda rota y muy desgastada, me dio tanto dolor verlo así, ni siquiera tenía unos zapatos decentes ni pensar que Lucas tiene de más en su closet.

Piero. Si mi amor la verdad me dio mucha lastima ver como estaba, lo bueno es que este día no lo olvidara nunca.

María: Si es cierto, no solo vendió todas las rosas sino que también comió y jugo como nunca antes.

Piero: (Se para y se va a su cama) Si cumple el mismo día que yo.

María: (Se levanta y se va a su cama) Si cumple el junio.

Piero acomoda las sabanas y ve a su esposa, ella está muy triste con los ojos cristalizados a punto de llorar, Piero la ve y se sorprende mucho porque no entiende porque va llorar, se detiene y se va junto a ella.

Piero: Mi amor que te pasa (Acaricia sus mejillas) Porque lloras.

María: Mi amor la vida es muy injusta.

Piero: (La abraza) ¿Por qué lo dices?

María: Yo siempre quise ser mama, siempre quise darte un hijo y nunca pude (Apoya su cabeza en el pecho de Piero) Como pueden existir mujeres que tiran a la calle a sus hijos de esa manera sin importarle nada.

Piero: Ya mi amor tranquila no te me pongas así.

María: No es justo Piero, no es justo.

Piero la abraza fuertemente mientras ella llora desconsoladamente, una idea comienza a rodar por su cabeza sin cesar, se separa un poco de María y la ve fijamente.

Piero: Mi amor y si adoptamos a un niño.

María: (Lo ve confusa) ¿Cómo?

Piero: ¿Quieres adoptar a un niño?

María: Adoptar Piero, no creo.

Piero: Si amor (Se sientan en la cama) Adoptar, ya que no podemos tener un hijo pero queremos tenerlo la única opción que nos queda es adoptar a un niño, darle una vida estable a uno niño que no tuvo la misma suerte de Lucas, donde le podamos dar amor, cariño, educación.

María: Eso es una locura Piero, no creo que un tribunal nos de la custodia de un niño con nuestra edad.

Piero: Que tiene nuestra edad, estamos casados, somos felices y podemos darle una estabilidad económica y emocional a cualquier niño. Inténtemelos mi amor, intentemos ser padres adoptivos a un niño que necesite ser querido.

María: Tengo miedo mi amor.

Piero: (Acaricia sus mejillas) Tranquila mi amor, estoy contigo y nunca te deje, intentemos haber.

Piero y María se abrazan fuertemente, Piero le ofrecer adoptar para poder cumplir el sueño de María de ser mama. Valentina y Eduardo están atrapados en una fuerte lluvia, no pueden salir de aquella cabaña.

Valentina: (Asustada) Llueve mucho mi amor.

Eduardo: (La abraza) Tranquila mi amor estamos juntos, nada malo pasara.

Valentina: No he llamado a mi papa.

Eduardo: La líneas esta caídas, ya intente llamar a mi madre y no pude.

Valentina: Se van a preocupar muchísimo.

Eduardo: Si amor pero no podemos hacer nada.

Valentina se pone muy nerviosa, en eso cae una gran centella en el mar y Valentina da un gran grito de susto, Eduardo la abraza y sonríe un poco, Valentina comienza a llorar desconsoladamente por el miedo que le causo la centella.

Valentina: (Llorando) Me quiero ir Eduardo me quiero ir.

Eduardo: Tranquila mi amor todo está bien, solo fue una pequeña centella.

Valentina: (Lo ve llorando) Una pequeña centella, como vas a decir que fue pequeña que hasta el piso se estremeció.

Eduardo: (La abraza) Tranquila mi amor, estoy a tu lado y nada te va a pasar.

Ignazio y Besabeth están en la sala, Besabeth no puede creer que Valentina tenga una relación con alguien, pero su mente comienza a pensar lo peor y decide ir directo al grano.

Besabeth: Tiene novio.

Ignazio: Si desde hace dos meses.

Besabeth: Mi amor tú no sabes verdad.

Besabeth: (Lo ve seria) No.

Lucas y Luis vienen bajando rápidamente las escaleras y los interrumpe, se acercan porque tiene hambre y quiere comer.

Lucas: Tía, tía, Luis y yo tenemos hambres.

Besabeth: Si lo sé ya Ramona debe estar preparando todo.

Servicio: (Se acerca) Señora Besabeth la mesa esta lista.

Lucas: Yupiiiiiiii, vamos Luis vamos a comer.

Ignazio: (Sonríe y se levanta) Vamos mi amor que estos no van a dejar sin comida.

Se levanta y se van al comedor alcanzar a los niños, comieron tranquilamente y se rieron de las cosas de los niños, menos Besabeth está muy preocupada por lo que le dijo Ignazio en la sala, sus pensamientos solo son de Eduardo y Valentina y sus miedos están activos, el miedo que siente en estos momentos, termina la cena y los niños después de comer el postre se despiden de Ignazio y suben a su habitación nuevamente, Ignazio y Besabeth los ve subir y luego se besan apasionadamente.

Ignazio: (Besándola) Mi amor me tengo que ir.

Besabeth: Ignazio no me dijiste quien era el novio de Valentina.

Ignazio: Si claro fue porque los niños entraron y luego fuimos a comer.

Besabeth: (Muy nerviosa) ¿Quién es el novio de Valentina?

Ignazio la ve fijamente y se da de cuenta que Besabeth está temblando de los nervios, extrañado toma sus manos y acaricia sus mejillas, la está matando los nervios.

Ignazio: Mi amor que tienes.

Besabeth: Nada.

Ignazio: Estas temblando.

Besabeth: (Lo suelta) Estoy bien ¿Quién es el novio de Valentina?

Ignazio: Mi amor tú no sabes nada.

Besabeth: No.

Ignazio: Mi amor Valentina y Eduardo son novios desde hace dos meses.

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