Capítulo 139
Se retiran y se quedan Ignazio y Besabeth solos en el restaurante, ambos se ven las caras y no se dicen nada hasta un par de segundos. Un mesero llega y les trae la carta y una botella de Champagne.
Mesero: Buenas noches.
Ignazio y Besabeth: Buenas noches.
Mesero: (Destapando la botella) Bienvenidos a nuestro restaurante.
Besabeth: Disculpe pero nosotros no hemos pedido nada de tomar.
Mesero: (Los ve) ¿No? Pero es que un muchacho me dijo que trajera una botella de champagne.
Besabeth: Eduardo te matare.
Mesero: ¿Perdón?
Ignazio. Tranquilo, no pasa nada sirve la champagne por favor.
El mesero abre la botella y sirve las copas y se retira, Ignazio ve a Besabeth que solo guarda silencio, el agarra una de las copas y decide hablar.
Ignazio: Salud! (Levantando la copa)
Besabeth: ¿Y porque?
Ignazio: Por las locura de nuestros hijos.
Besabeth lo ve y sonríe un poco, Ignazio también sonríe, ella toma una copa y brinda con él, ambos se toman un poco de la copa y la ponen en sus lugar.
Ignazio: ¿Porque eres así?
Besabeth: ¿De qué hablas?
Ignazio: Porque no quieres escucharme para explicarte todo.
Besabeth: Para que, ella lo dijo muy claro.
Ignazio: ¿Qué? Que es una loca que se quiere meter a mi cama a como dé lugar. Besabeth la única mujer que he amado y a la cual le hecho el amor es a ti (Agarrándole las manos) Yo te amo mi vida.
Besabeth: Y la mama de Valentina, porque ella no se hizo examinación artificial para quedar embarazada de ti.
Ignazio: (Suelta su mano) Por dios Besabeth, nunca la ame ni siquiera recuerdo lo que paso esa noche.
Besabeth: Por favor Ignazio.
Ignazio: Mi amor si te he fallado perdóname, no quiero estar alejado de ti ni un solo segundo y menos por algo insignificante.
Besabeth: Ella me dijo.
Ignazio. Ella no existe, ella solo fue una ex compañera de clases de hace muchos años que nunca quise y que nunca voy a querer. No me dejes con esta agonía mi amor te lo suplico.
Valentina y Eduardo llegaron a la casa de Andrea y se estacionan para platicar un rato sobre sus padres.
Valentina: ¿Crees que funcione?
Eduardo: No lo sé, mi madre es muy orgullosa y la verdad no estoy muy seguro.
Valentina: Espero que hayamos logrado algo de verdad.
Eduardo: (Agarra su mano) Tranquila mi amor si no se reconcilian por lo menos tenemos la satisfacción que hicimos lo que estuvo a nuestro alcance.
Besabeth y Ignazio siguen platicando tratando de resolver sus problemas en la cena que sus hijos le han preparado.
Ignazio: Mi amor (Besándole las manos) Te lo suplico perdóname.
Besabeth: (Con los ojos cristalizados) Ignazio solo júrame que no tienes nada con Alejandra.
Ignazio: Te lo juro mi amor.
Se ven y luego se dan un apasionado beso. Las horas pasan y ellos están llegando al departamento de Ignazio, entran y comienzan a quitarse la ropa y se van hasta la habitación.
Ignazio: (Entre besos) Ti Amo.
Besabeth: Yo también Te Amo.
Lentamente se van quitan sus ropas que les estorba, el besa cada parte de su cuerpo sin dejar lugar alguno sin besar, ella coloca sus manos y la aprieta fuerte indicando el placer que tiene al estar con él, hacen el amor intensamente amándose a cada segundo.
Es un nuevo día y el sol comienza a entrar por su ventana y él se comienza a comer un poco abre sus ojos y ve a Besabeth que aún sigue dormida, Ignazio abraza fuerte a Besabeth y le da un beso en su cuello, ella siente los besos y comienza a sonreír, el sigue dándole besos hasta que ella abre los ojos.
Besabeth: (Se voltea y lo ve fijamente) Buenos días.
Ignazio: (Sonríe) Buenos días mi amor ¿Cómo dormiste?
Besabeth: (Sonríe) Bien mi amor ¿Y tú?
Ignazio: Feliz porque estoy con la mujer que amo.
Se besan y ambos sonríen. Eduardo se levanta y lo primero que hace es agarra su teléfono y marcar el número de Valentina.
Valentina: (Contesta el teléfono) Alo.
Eduardo: Buenos días mi amor ¿Cómo amaneces?
Valentina: Bien ¿Y tú?
Eduardo: Bien mi amor. Sé que sonara un poco infantil lo que te voy a pregunta pero ¿Tu padre te fue a buscar?
Valentina: (Sonríe) No, ni siquiera me he levanto de la cama.
Eduardo: (Sonríe) Si verdad.
Valentina: ¿Celoso?
Eduardo: ¿Quién yo?
Valentina: Si tú.
Eduardo: No para nada ¿Por qué?
Valentina: Porque preguntas por mi papa, para poder saber de tu mamma.
Eduardo: No solo para saber.
Valentina: (Sonríe) Si está bien, lo más seguro es que aun siga durmiendo.
Ambos sonríen por teléfono y se quedan platicando un poco. Besabeth está haciendo el desayuno, Ignazio salió del cuarto secándose el cabello con una toalla, Besabeth está de espalda, Ignazio la abraza y sonríe ambos.
Ignazio: Que rico huele.
Besabeth: (Sonríe) ¿Te gusta?
Ignazio: Si, siempre me gusto tu comida. Siempre extrañe ese dolor.
Besabeth: Mentiroso.
Ignazio: (La voltea) Claro que sí, nunca pude encontrar mejor chef que tu (Agarra un mechón de cabello y se lo pone detrás de su oreja) en ningún lugar, mi vida no era la misma desde que me fui de este país.
Besabeth: (Lo ve) Ignazio yo tengo algo que decir muy importante.
Ignazio: (Pone un dedo en sus labios y luego la besa apasionadamente) No digas nada mi amor, ahorita eso no importa (La besa otra vez) Quiero que seamos felices por cada segundo que estuvimos alejados por culpa de nuestro orgullo.
Besabeth: Ignazio es muy importante.
Ignazio: Nada es más importante que nuestra felicidad, lo que haya pasado durante estos 27 años no me importa. Olvidemos todo mi amor, olvidemos y hagamos una nueva vida, aprovechemos esta oportunidad y hagamos lo que nunca pudimos hacer cuando no conocimos y nos mudamos a este departamento (Se besan).
ESTÁS LEYENDO
Ayudarme a Vivir "Ignazio Boschetto"
RomantizmLa vida es bastante complicada, nos ensaña tantas cosas, donde tenemos que aprender, y aprender a prestarle atención a cada detalle para poder entenderla. Ignazio Boschetto es un hombre que la vida le ha enseñado aprender a vivir solo, desde muy peq...