El Chico De Los Converse Rosas ✿*:･[Primera Parte] : [TK]･:*✿

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POV ' Yoshida 

Una de las cosas que más he llegado a odiar son las cenas familiares y no es por qué odie a mis padres o algo así sino que el simple echo de convivir con otros no es muy de mi agrado.

Odio sonreír cada que saludo o veo a alguien como si fuera la persona más feliz del puto mundo cuando en realidad estoy más amargado que un limón; hoy era el aniversario de bodas de mis padre y por desgracia -para mi- invitaban a toda la familia Kwon para celebrar en grande que la unión de ellos jamás sea quebrantado a pesar de las adversidades de la vida.

No estaba mal, tampoco estaba en contra pero si me ponía de mal humor la hipocresía que tenían algunos tíos y primos ya que desde que cumplí los 17 me volví un chico rebelde y mal educado, eso de mal educado lo dicen mis tías ya que no suelo pedir permiso para hacer o decir las cosas.

Como deseo que Hobi estuviera aquí conmigo para alegrarme la tarde. Ahora me encontraba en mi habitación mirándome al espejo con el ceño fruncido mientras observaba el estúpido conjunto de ropa que mi querida madre había escogido para mi, como si de un niño de 7 años me tratase.

Mi atuendo consistía en unos jeans en color azul, una camisa cuello de tortuga con rayas blancas y negras intercalas, así como las cebras; sabía por que había escogido esto y era para así evitar que mis familiares se murieran de la impresión al ver que ya tenía más tatuajes en el cuerpo.

--Cielo ¿Puedo pasar? --oí la voz de mi madre detrás de la puerta.

--Adelante --la ya mencionada se abrió dejando ver a mi madre la cual portaba un lindo vestido en color amarillo canario, tenía unas zapatillas no muy altas en color plata, en el cuello tenia un lindo collar del mismo color que el calzado y por último llevaba el cabello suelto en caireles.

--Te vez precioso cielo --yo arquee la ceja al oír aquello.

--Estas de joda ¿Verdad? --ella me miro sin entender --Me refiero a que si estás bromeando.

--Ah! Lo siento hijo, a veces no comprendo el idioma que usan los jóvenes y no, no estoy bromeando te vez lindisimo. A ver déjame acomodarte un poco...

--Mamá --dije para que me prestara atención pero al parecer ella no oyó ya que seguía hablando --Mamá!! --volví a decir pero un poco más fuerte pero nada, no hizo caso de nuevo --Rayos!!! Mamá!! Para!!

--¿Qué pasa? Cariño.

--Te avergüenzas de mi --ella empezó a negar --Si, si lo haces.

--¿Qué te hace creer eso? Corazón tú eres mi mayor orgullo --me tomo de las mejillas.

--Entonces ¿Por qué no puedo vestirme como a mi me gusta? Odio este atuendo. El pantalón está bonito pero esta cosa --señale la camisa --Me hace pareces a un cebra a parte que el cuello me pica. Te da vergüenza que vean que tu hijo es un chico lleno de tatuajes y perforaciones.

--No es así. Yoshi yo no me avergüenzo de ti a lo contrario me siento muy orgullosa de ser tu madre --me acaricio una de mis mejillas --Así que ve a cambiarte y ponte lo que quieras pero con la condición que te pongas esto, espérame un ratito --con velocidad salió del cuarto para después regresar con una cajita entre sus manos en color azul zafiro, me la entrego y yo me quedé sin saber que hacer.