✿*:・| 179 |・:*✿

435 72 43
                                    

POV ' Jungkook

La llegada a la de mi tío fue bastante largo por lo cual a mitad de este me quede dormido. Me sentía cansado y eso era raro ya que dormí toda la noche, al parecer bichito me quitaba la energía de un dos por tres y aunque a veces eso me diera problemas en el aspecto de encontrar un empleo de forma rápida me sentía feliz de que mi bebé estuviera bien.

Ya había buscado en Internet empresas de publicidad y marketing digital para empezar a trabajar pero a la mitad de la búsqueda me quedo dormido dejándome a la mitad de ella. Bichito se estaba llevando todo de mí, la fuerza y la energía pero mi pequeño tenía derecho ha hacerlo, si eso le hacía bien entonces podía quitarme todo lo que quisiera.

— Kookie — oí a mi lado así que me desperté encontrándome con mi tío quien ya tenía abierta mi puerta —. ¿Estás bien?

— Sí. Tan solo dormí un poco.

— Ok. Déjame te ayudo.

— No se preocupe, yo puedo solo — me levanté pero lo hice muy rápido provocando en mí un mareo horrible, me tambalee un poco pero fui sostenido por mi tío.

— A veces los mareos te agarran desprevenido. Igual a veces me pasaba eso cuando iba en carro y ni se diga de las escaleras, esas me daban horror.

— Gracias y creo que lo entiendo, agradezco que mi apartamento sea pequeño y sin escaleras.

— Sí, me ha gustado mucho. Es muy cómodo por lo que vi.

— Demasiado.

— ¿Ya puedes solo? — asentí para después salir bien del auto.

— Se ve muy bonita su casa. Tiene un amplio jardín.

— Muchas gracias. Je Hoon la eligió, la verdad es que esperaba que obtuviera un apartamento y no una casa.

— Pero está linda, me gusta que haya tanto espacio. Se puede respirar bastante bien.

— ¿No te gustan los lugares cerrados?

— No, no es eso — sonreí —. Me gusta el aire fresco y más si una casa tiene un amplio jardín, me recuerda a la casa en donde vivimos con mi padre antes de que su enfermedad se hiciera más grave, me encantaba ese lugar, fue duro mudarnos a la nueva casa.

— ¿Por qué se mudaron? — preguntó mientras empezamos a caminar con dirección a la puerta de entrada.

— Sinceramente no lo se. Mi madre un día llegó con la noticia que la había vendido y que teníamos que salir de ahí dentro de seis semanas. Creo que lo hizo para evitar que mi padre se sintiera mal de que las chicas de la limpieza le vieran muy enfermo.

— Me imagino lo fuerte que debió ser para ustedes ver a mi hermano enfermo.

— Si y no — nos detuvimos justo frente a la puerta —. Mi padre a pesar de su dolor o malestar siguió siendo feliz, jamás le veías triste, salía a caminar, trabajaba a pesar de que debía de dormir. Me alegré tanto al ver que iba mejorando, estaba ilusionado con que saldría de esto y que solo fue una mala racha pero... a los tres meses de esa mágica recuperación mi padre nos informo que no seguiría con su tratamiento y que iniciaría a tramitar los papeles para que todo estuviera en orden para cualquier cosa — sonreí amargo —. Recuerdo que ese día llore y grite para que no lo hiciera, le pedí que siguiera el tratamiento, que no podía ser cobarde, que debía de ser fuerte. Fui muy idiota ese día.

— ¿Por qué lo crees así?

— No sabía que esa terapia le lastimaba, no tenía ni idea de lo que él sufría en silencio. Lo dejo no por ser cobarde, lo dejo porque... porque el dolor era muy fuerte... ya no lo soportaba...

El Chico De Los Converse Rosas ✿*:・[Primera Parte] : [TK]・:*✿Donde viven las historias. Descúbrelo ahora