-Avísame si duele mucho -dijo un peliverde a su pareja.
Le estaba pasando un algodón con alcohol en uno de los codos del rubio para desinfectarlos, ya habían dejado de sangrar de forma brusca y solo estaban hinchados.
Ahora estaban ambos en casa del peliverde y este tenía al rubio sentado en la silla de su escritorio para tener alcance fácil a sus heridas, ahora se encontraba arrodillado frente a él para estar más cómodo.
-No sé si te habrás dado cuenta que tolero bastante el dolor, brócoli -respondió con una muy leve pizca de broma en sus palabras para aligerar el ambiente, estaban muy tensos ahora mismo.
-Lo siento mucho por gritarte así, Kacchan.
El pecoso arrugó su entrecejo mientras fruncía sus labios sintiéndose culpable por la situación anterior, aunque Bakugou tratase de evitar hablar de eso él no iba a pasarlo por alto.
-Fui yo el único imbécil que la cagó, Deku, no te disculpes -respondió el mayor evitando verlo y elevó su voz paulatinamente-. Estaba putamente celoso, estoy celoso de cualquier persona que te toca y no sé controlar esa mierda.
En serio estaba tan arrepentido y sentía que sus palabras no demostraban ni un cuarto de cuanto lo sentía realmente.
-Cuando me veas con algún amigo o amiga no te preocupes por mi, y ya no voy a volver a dejar que me ataquen -se refirió a cuando sufrió acoso por parte de su ex vecino en ese callejón.
Ya no volvería a cometer el mismo error porque hasta podría costarle la vida. Debía aprender al menos a saber gritar, correr, porque no sacaba nada no saber un poco de defensa personal en este mundo tan bizarro y asqueroso.
-Vamos a trabajar en superar eso, ¿sí? -finalizó Midoriya la plática mientras le regalaba una sutil sonrisa a su pareja.
Luego siguió el menor con el otro codo. Sabía que era difícil para Bakugou entender algunas cosas y no sabía como actuar de otra forma, por lo mismo él iba a ayudarlo.
Izuku al terminar lo que estaba haciendo le parchó de forma inteligente las heridas a su pareja y se levantó del suelo mientras volvía a darle una sonrisa.
Bakugou por su parte palmeó su muslo sin mirar al chico, este de inmediato entendió a lo que se refería y fue a sentarse sobre las piernas del rubio mientras le daba un abrazo por el torso, el otro pasó sus brazos por sobre los hombros ajenos y lo aferró a él.
-Te amo -confesó Katsuki en la oreja del muchacho.
El menor tensó todo su cuerpo al sentir el aliento tibio del chico en esa zona, su boca se entreabrió de la sorpresa y sus mejillas estaban ardiendo. Luego sintió la lengua del mayor pasarle por el lóbulo de su oreja y se estremeció un poco a la vez que soltaba un ligero gemido con la boca cerrada y cerró sus ojos.
-T-también te amo -respondió en voz temblorosa y baja y se mordió el labio inferior ligeramente mientras miraba hacia las ropas del chico, más específicamente su pantalón.
Bakugou no aguantaba tenerlo así de cerca, así que rompió el abrazo y dejando de molestar su oreja tomó el mentón del mismo para impulsarlo hacia él sonriendo de forma lujuriosa mientras miraba esos humectados labios que se notaba que Izuku siempre cuidaba.
-Abre la boca -ordenó Katsuki con su voz grave y profunda llevando a Midoriya a realizar de inmediato la acción, estaba completamente sumiso ante él-. Veo que sigues siendo muy obediente.
El pecoso no tuvo tiempo de reclamarle nada porque Katsuki unió sus labios de inmediato entrelazando su lengua cuando encontró la contraria, aquello había sacado un quejido desprevenido al menor pero fue lo suficientemente lascivo para él.
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fuck me, daddy [katsudeku]
FanfictionIzuku tiene sentimientos fuertes hacia Katsuki, un chico tan misterioso que esconde un gran secreto, pero este solo ve al pecoso como alguien más para follar. O eso es lo que quiere demostrar. - Lo único que conservo de los personajes son sus caract...