Jade
Los días pasaban y con ellos mi “relación” , si se la puede llamar así, con Drew, iba avanzando.
No puedo negar que me gustaría que volviera a haber un acercamiento físico entre ambos, pero desde el día en el que Flavio nos interrumpió en su cuarto, no ha vuelto siquiera a intentar besarme.Habíamos estado viéndonos cada día, saliendo a tomar algo, a comer o incluso solo a caminar, pero cualquiera que nos viera creería que solo somos un par de amigos divirtiéndose.
Por mi parte había dado bastantes pasos y excesivos coqueteos, los cuales solo fallaban ya que él siempre tendía a mover su rostro, evitando así que pudiera besarlo.¿Frustrante? Mucho más que eso, ya era una tortura tenerlo tan cerca y no poder sentirlo.
Pero no era lo único que aumentaba, ya que mis malestares también lo hacían. Las náuseas, mareos y el cansancio, eran como mi propio saludo de buenos días.
Sabía que debía hacerme ver, pero no tenía ganas de viajar hasta la manada.—Ten. —Lyra arrojó hacía mí, un paquete envuelto.
—¿Qué es? — pregunté abriéndolo y encontrándome dentro con una pequeña caja rectangular.
En cuanto la sostuve en mis manos no sabía si debía comenzar a reír o llorar, pero lo que si sabía es que era imposible.
—Por si no te has dado cuenta aún y te niegas a leer las palabras escritas en rosa, es un test de embarazo.
—No estoy embarazada. — arrojé la caja sobre la mesa frente a nosotras y la observé como si en cualquier momento pudiera transformarse en un animal peligroso.
—Eso no lo sabes, solo hazte la prueba Jade y déjate de juegos.
—Mi madre es una enfermera, creo que reconozco los síntomas de un embarazo.
—¿En serio? — preguntó levantando su mano y comenzando a enumerar sus palabras. — Náuseas matutinas y con algunas comidas, mareos casuales, cansancio constante y un humor más cambiante que el clima. Lo siento pequeña Jade, pero estoy tan segura de que estás embarazada, que apostaría mi brazo derecho a ello.
—Pero no, no puedo, es decir yo no puedo. ¿Cómo podría estar embarazada?
—Creo que no hace falta que te explique eso, ¿O sí? —Lyra parecía divertida con mi reacción, pero yo no me sentía así, sino que estaba volviéndome loca.
¿Si llega a salir positivo qué demonios haría?
Drew no parecía estar preparado para ser padre, ni para tener una relación sólida con alguien y sin dudas yo no estaba lista para ser madre. Tenía tantos planes, tantas cosas por conseguir aún.Y mis padres… ¿Cómo mierda arrojaría hacía ellos una bomba así?
Mi madre me mataría, luego de gritarme por un buen tiempo y mi papá mataría a Drew. No solo él, los gemelos seguro que se sumarían a la diversión.—No puedo estar embarazada, yo sabría si lo estoy.
—Deja de negarlo y hazte la prueba, solo así lo sabrás a ciencia cierta.
—No quiero. ¿Qué haré si sale positivo?
Lyra al ver la desesperación que seguro expresaban mis ojos, se compadeció de mí y se acercó hasta sentarse a mi lado.
—No voy a decirte que sé por lo que estás pasando, porque gracias a la Diosa no es así, pero lo que si sé, es que aunque lo retrases, el resultado no cambiará.
—¿Pero si no lo estoy?
—Si no lo estás, no pasa nada, olvidaremos que esté momento sucedió.
Volví a tomar la caja entre mis manos y la observé, rogando porque esto solo sea un error.
Con Drew solo habíamos estado juntos una vez, solo eso, no podía tener tanta mala suerte.—Lo haré, pero estoy segura de que no estoy embarazada.
—Voy a estar aquí Jade, no te dejaré sola con esto.
Asentí nerviosamente y caminé hacia el baño.
Con cada paso un nuevo peso parecía instalarse en mi espalda, pero me aferraba a la esperanza de que saliera negativo.Seguí los pasos que la caja me decía y diez minutos más tarde, salí con el pequeño palito en mis manos.
No me atrevía a mirar, no quería comprobar si Lyra tenía o no razón, simplemente quería despertar de esta pesadilla.—¿Qué salió Jade? ¿ Estás embarazada o no?
—No lo sé, no me atrevo a mirar. Mira tú. — empuje el palito hacía ella, haciéndola saltar hacia atrás.
—Que asco Jade eso tiene tu orina.
—¿Es en serio Lyra? No es momento para esto.
—Obvio no. —dijo poniendo sus ojos en blanco. —Dame esa cosa que muero de curiosidad.
La observé, tratando de descifrar su reacción, pero su expresión no revelaba nada que pudiera darme una pista.
Estaba tan nerviosa que no podía dejar de sentir como mis manos transpiraban sin parar, mi corazón chocaba con fuerza contra mi pecho y mi garganta se sentía como si hubiera comido varias cucharadas de sal.—¿Y?
—Dio positivo, estás embarazada Jade.
Me caí, terminé sentada en el suelo, sin poder creer que esto estuviera sucediendo.
¿Qué haría? ¿Cómo me manejaría de ahora en más?—Estoy muerta, mi mamá me matará y mi papá va a matar a Drew, bueno si se entera.
—¿Si se entera? Esto es algo que deben saber, no vas a poder ocultarlo Jade, en algún momento la panza crecerá.
—¡Lo sé! Pero no sé que hacer. ¿Cómo le diré a Drew?
—Vas y le dices que estás embarazada, él tiene la misma responsabilidad que tú. Ambos fueron irresponsables y no se cuidaron, los dos, por lo que no solo tú debes cargar con la responsabilidad.
—Pero él quiere terminar su carrera y está tan cerca. No puedo hacerle esto.
—Es el padre.
—¿Cómo se lo diré a mi papá? Él va a enloquecer.
—Pensemos en el lado positivo, él quería un nieto, pues estás dándoselo.
—Claro que lo quería, pero no un hijo mío, sino de Aryeh o Gael. ¿Entiendes que en su mente aún soy una niña?
Pero ahora tenía que empezar a ver qué su niña había crecido y que ahora tenía a alguien más pequeño dentro de ella.
—Estará feliz igual.
—¡No lo estará! Yo no lo estoy y se que Drew tampoco lo va a estar. Por favor Lyra, no le cuentes a nadie, quiero ser yo quien hable con todos, solo necesito hacerme a la idea.
—Entonces empieza a hacerlo, porque deberás comenzar a tratarte y como te dije antes, no lo vas a poder ocultar por mucho tiempo más. — comencé a llorar al darme cuenta de que ella tenía razón, estaba tan jodida. —No llores, no estás sola, ahora me tienes a mí y se que todos te apoyarán también.
Pero yo no lo creía, Drew me odiaría, mis padres se sentirían decepcionados y mis hermanos creerían que soy una inconsciente.
Por más que quería ver la luz en medio de esta oscuridad, no podía encontrarla.

ESTÁS LEYENDO
Jugando limpio
WerewolfLeticia Fenn sabía tres cosas con seguridad: 1-Su futuro había sido decidido desde que nació. 2-No podía luchar contra este, sin lastimar a las personas que más amaba. 3-La cuenta regresiva había comenzado y solo le quedaban horas para enfrentar su...