Jade
Pase horas sentada en esa plaza, llorando e ignorando cada llamada que me hacían.
Al parecer la noticia había explotado, ya que no solo mis padres habían vuelto a llamar, mis hermanos, mis tíos, Leticia, Beatriz, Santiago, Drew e incluso Faith, quien estaba preparando todo para mudarse a la manada, había marcado doce veces mi número.La verdad es que necesitaba pensar, aclarar el lío en mi en cabeza y tomar una decisión, pero no podía hacerlo cuando no me dejaban en paz.
Cuando la noche comenzó a caer, me puse de pie, ignorando el dolor en mis piernas, las cuales se encontraban acalambradas luego de tantas horas en la misma posición.No quería volver a casa, no quería enfrentarme a las chicas y explicarles lo que había sucedido cuando hable con Drew y con mis padres.
Imprudentemente arrebatada, esas palabras me definían a la perfección. ¿Cómo le había dicho a Drew, de manera tan cruda que sería padre? Y peor aún, ¿Cómo pude decirles a mis padres que serían abuelos, sin prepararlos?Con razón todos creían que estaba loca, ya que me comportaba como una. No me ponía a pensar en el :” ¿Qué pasaría, si?”, no, yo arrancaba y pisaba el acelerador a fondo, hasta chocar contra una pared de ladrillo.
Al subir al auto, lo encendí y dudé si dirigirme a casa o a un hotel, pero terminé conduciendo a casa, ya que mis reservas estaban agotadas.
En mis planes estaba llegar y tratar de escabullirme a mi habitación, meterme en la cama, cubrirme con las mantas y no salir en las próximas dos semanas.Pero al llegar me di cuenta de que eso no sería posible, ya que parados en la puerta se encontraban Leticia y Santiago.
—Tus padres me llamaron, ¿Cómo estás? — Leticia no tardó en abrazarme y acariciar mi espalda, logrando que la tristeza volviera a apoderarse de mí.
—Cansada, la verdad deseo irme a dormir y olvidar todo lo que estoy viviendo.
—Sé que tienes reservas conmigo ya que Drew es mi amigo, pero puedo ver qué no estás lista para hablar de él, por lo que no lo haré. —Santiago parecía inseguro, moviéndose sin parar.
—Tienes razón, no estoy lista para hablar, solo para dormir un poco.
—Muy bien, pero te advierto, adentro están Beatriz y Lyra esperando, estábamos muy preocupados por ti.
—Solo necesitaba estar sola y pensar.
—Jade…
—Lo sé Leticia, sé que debí contarles lo que había sucedido con Drew, pero no quería confesarles que fui imprudente y luego debí pasar dos meses buscándolo, sin saber que estaba tan cerca.
—Solo iba a decirte que puedes contar con nosotros para lo que necesites. — perfecto, volví a meter la pata.
Cubrí mi rostro con ambas manos y solloce entre estás. ¿Qué más podía hacer mal hoy?
—Jade cálmate, vamos hermosa, no tienes que llorar, presiento que lo has hecho demasiado el día de hoy. — y no se equivocaba.
—Siento que todo esto me está sobrepasando, en verdad necesito descansar y pensar en otra cosa o podría enloquecer. — aún más de lo que ya lo estoy.
—Tienes razón, entra y descansa, con Santiago estaremos aquí por cualquier cosa.
—Gracias.
Creí que por fin podría descansar un poco, pero en el momento en el que entré, fui asaltada por dos chicas molestas.
—¿Dónde demonios estabas, Jade? — preguntó demasiado molesta Beatriz.
—¿Tienes idea de la preocupación que estábamos sintiendo? No puedes desaparecer de esta manera y no responder el maldito teléfono, para eso lo tienes. — sabía que Lyra tenía razón, pero podían hacer todo este drama mañana.
—Solo voy a decirles que siento no haber pensado en que podrían estar preocupadas, pero tenía otras cosas en mi cabeza. También sé que quieren hablar sobre todo, pero yo necesito descansar, así que les pido que por esta noche, solo por esta noche, no me hagan preguntas.
Caminé más allá de ambas, tenía la intención de llegar a mi cama y tratar de dormir durante horas, días si tenía suerte.
Mis padres seguro ya estaban de camino hacia aquí, por lo que en tres días los tendría torturandome con sus regaños. Incluso los gemelos podrían seguirlos, queriendo hacer de esto algo enorme, pero no estaba diciéndoles a ninguno quien era mi compañero.Podría estar herida con la actitud de Drew, pero en el fondo sabía que algo así podría suceder, ya que él quería centrarse únicamente en culminar su carrera.
Sabía lo que era no sentirse listo para algo, porque ni yo estaba lista para un bebé, pero ya estaba en camino y comenzaba a gustarme la idea.El bebé no tenía la culpa de nuestros problemas, los errores eran nuestros y deberíamos resolverlos como adultos, solo que aún no me sentía de esa forma.
Estaba acariciando mi aún inexistente barriga, cuando golpearon la puerta y luego de otro golpe, simplemente ingresaron.—Estoy segura de que no has probado bocado, anda hermosa, debes comer algo. —Leticia vino hacía mí con una bandeja de comida en sus manos.
—No tengo hambre.
—Ahora no solo tú debes comer. ¿Por qué no me contaste que Drew y tú tenían algo?
—Porque no lo tenemos, él solo quiere estudiar y graduarse. En su vida solo somos problemas.
Y eso era lo que menos quería representar para él. Quería que me viera como alguien a quien querer y en quien apoyarse, pero no se podía.
—No digas eso Jade, Drew no pasaría tanto tiempo contigo si no le importaras. ¿Él a ti te importa?
—Leti, él es mi compañero, por supuesto que me importa.
—¿ Él lo sabe?
—Nadie lo sabe y prefiero que esto se mantenga así. En unos días mi padre vendrá y querrá matarlo, pero no es correcto, Drew no hizo nada que yo no le permitiera hacer.
—Puedes confiar en mí, pero estas cosas no las puedes ocultar por mucho tiempo.
—Lo sé, solo quiero que todo se calme antes de hablar de el lazo. —tome el tenedor y pinche una papa, ella tenía razón, debía comer algo o me haría mal. —No sé cómo reaccionará, si con lo del bebé se asustó, con lo otro tendrá un ataque.
Leticia ya no dijo más nada, en su lugar solo se limito a observarme, podía no decírmelo, pero ambas sabíamos que estaba jodida.
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Jugando limpio
WerewolfLeticia Fenn sabía tres cosas con seguridad: 1-Su futuro había sido decidido desde que nació. 2-No podía luchar contra este, sin lastimar a las personas que más amaba. 3-La cuenta regresiva había comenzado y solo le quedaban horas para enfrentar su...