Parte 4

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Calma, tranquilidad, paz... eran emociones que jamás tocarían la mente de Satoru Suzuki en una situación como esta, pero era diferente para Momonga.

La nueva naturaleza que le proveía su cuerpo no muerto, le había dado el temple necesario para trazar un plan que concluyera esta situación sin un derramamiento de sangre.

Esto bien podría ser una trampa, una en la que Satoru Suzuki habría caído en ella con facilidad, y por ello Momonga daba gracias por este nuevo cuerpo que le permitía ver de mejor manera la situación.

"Si fuera humano, abría reprendió a Albedo quien solo quería defenderme y correría con brazos abierto hacia TouchMe y Ulbert... en el peor de los casos, ellos serían enemigos y habría quedado como un estúpido, aun si sobrevivía los mismo guardianes me hubiesen perdido el respeto, y correría el riesgo de morir en sus manos" pensaba Momonga.

Y por ello, observo con gentileza a la mujer de la armadura negra que estaba ahí parada, dispuesta a dar la vida por Momonga. De no ser por Albedo Momonga hubiese perdido mucho, y aun si ellos fueran realmente sus viejos compañeros, la acción de la guardiana súcubo había sido la correcta.

"Albedo... gracias" Fueron las gentiles palabras que salieron de la boca de Momonga, y al escucharlas, Albedo se estremeció e hizo un sonido adorable desde el interior de su armadura.

"Y ahora, tengo que lidiar con esos dos" se dijo a si mismo Momonga.

Sebas y Demirgus estaban muy tensos, en sus ojos se veía el deseo de saltar a la batalla. Ambos habían visto a Momonga con respeto y admiración, pero ahora todo lo que había en esas miradas era miedo. Eran los ojos de un animal acorralado intentando defender a sus crías.

¿La relación entre las creaciones y el creador eran tan profundas? Si era así, Momonga pensaba que podría confiar no solo en Albedo, si no también en el Actor de Pandora, el NPC que el mismo había creado.

-Sebas, Demirgus ¿Me creen capaz de matar a un amigo?- fueron las palabras que salieron de Momonga tras pensarlo mucho.

Sebas se puso pálido, la desesperación creció en el al no poder entender el significado de esas palabras. Demirgus en cambio dio una respuesta.

-¡No lo creemos así, Momonga-sama! No hay duda que usted es un ser bondadoso con aquellos que habitamos la gloriosa Nazarick- Demirgus decía esto con sinceridad mientras recordaba al único ser supremo que jamas los abandono -Pero eso no cambia el hecho, de que esa mujer trata de envenenar su mente para que mate a los seres supremos que han vuelto con nosotros- Dijo Demirgus con resentimiento mientras apuntaba a Albedo.

-Hm... Entiendo por qué piensas eso, también tu Sebas, créanme que los entiendo, pero Albedo hizo lo correcto-

TouchMe y Ulbert respiraron pesadamente, cuando escucharon a Momonga aprobar las acciones de Albedo.

Momonga tomo con fuerza el cetro del gremio y con lo que él creía, era la voz de un rey proclamo:

-¡Hemos llegado a un nuevo mundo!- a la vez que decía esas palabras un aura negra salía de Momonga como una tormenta -¡Un mundo desconocido, con peligros insondables! ¡Estamos ciegos dentro de esta nube de ignorancia! ¡Y por ello, no podemos permitirnos el actuar imprudentemente!-

Momonga apunto el cetro hacia TouchMe y Ulbert quienes se pusieron a la defensiva.

-Si actuamos como estúpidos, todos terminaremos muertos-

Las palabras golpearon a sus amigos, quienes recordaban el por qué había sido Momonga y no TouchMe el líder del gremio.

-Ustedes dos atacaron a Sebas, lo puedo ver claramente. Por ello es que no puedo confiar ciegamente en su palabra- Sebas bajo la cabeza, como si la culpa fuera de él –No hay duda, se ven como mis compañeros, pero hay muchas magias que podrían lograr ese efecto-

Overlord: Trinidad Caps 1-170Donde viven las historias. Descúbrelo ahora