Parte 96

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"Desesperación"

Hay quienes creen que caer en ese abismo es algo fácil, que un mal momento o tan solo un día desgraciado podría arrojar al corazón humano hacia ella...

Pero...

El alma es más fuerte que eso. Afortunadamente, ese abismo se encuentra lejano, y solo tras vivir sin salidas durante demasiado tiempo, solo cuando se deja de buscar soluciones y comienzas a mirar  la espada como un escape para todas las penas y dolores... es solo entonces cuando tus pasos te encaminan al abismo, es solo entonces cuando te paras en el borde para mirar la oscuridad que en ella aguarda.

Y aunque muchos pasan su vida al borde de ese precipicio, ninguno cae por, no hasta que la ultima luz se apague...

Es solo cuando ya no vez más brillo al final del camino que abrazas la oscuridad como tu único amigo, y te lanzas por el borde para evitar que más dolor carcoma tu alma, para evitar que más cicatrices se sumen sobre tu piel...

Es solo cuando comprender que la desesperación es la forma en la que los condenados llaman a la piedad cuando caes en ella...

Alguna vez un santo miro al cielo y maldijo al creador por darnos tan magnifico defecto, aquella única cosa capaz de golpear y destruir el "Ego"

La desesperación elimina el "Yo" y el más poderoso amor que tenemos por la vida...

Las personas del reino santo sin duda se encontraban al borde del abismo. Veían día con día como demonios los atacaban y secuestraban, tan solo para que los supervivientes de las masacres contemplaran  a las bestias comerse los restos de sus queridos compañeros.

¿Cómo debía sentirse el hombre que observaba? ¿Cómo debía sentirse aquel que era devorado? ¿Cómo tenía que ser el dolor en el corazón de la reina que no podía evitar que tales catástrofes pasaran?

El horror no era solo ver que tus compañeros y vecinos fueran ocupados como alimento, si no el saber que ellos darían fuerza para que el ataque de mañana tomara las vidas que tan valientes soldados defendieron...

La desesperación es el abandono del deseo por vivir, la desesperación es la auténtica encarnación del último hombre.

La desesperación hubiera obligado a los combatientes a deponer sus armas y entregar sus carnes al enemigo. Dejar que el dolor terminara y rendirse ante aquel miedo que los dominaba, eso era la desesperación.

Pero los hombres en el frente no soltaban sus armas, peleaban hasta el último hombre a pesar de la certeza de que nada de ello evitaría un ataque el día de mañana.

Los soldados aún no se rendían... así como no lo hacían los generales, los tenientes y los niños que aun nacían y se preparaban para proteger su propia vida en un campo de batalla.

La desesperación es dejarse morir.

Pero la esperanza es pelear a sabiendas que vas a morir y que ningún sacrificio importara.

La desesperación te deja caer en el abismo completamente solo, pero la esperanza te obliga a enfrentar el abismo con aquellos que aún no te quieren ver morir...

Aun si el reino draconico caía, aun si los humanos de ese lugar eran exterminados por completo...

Aquel reino no caería en la desesperación si tan solo morían luchando apoyándose unos a los otros...

El reino draconico aun tenia esperanza, y fue por ello que cuando Draudillon Oriculus, la antigua pero pequeña reina escucho que 4 demonios habían arrasado con un héroe y su ejército a las afueras de un pequeño pueblo, esta se desprendió de todas su joyas, arrojo sus artes, el collar que un aventurero le había obsequiado, arrojo las pocas monedas que la reina tenía a su nombre y envió a quien fuera quizás el mejor y peor hombre que tenía para enviar un mensaje importante.

"Ayuda"

Con gran dolor, el primer ministro vio a su reina poner sus esperanzas en un grupo de demonios que protegieron un pequeño pueblo por alguna razón desconocida, una que quizás estaba lejos de ser justicia o piedad.

Pero al saber de tal poder en manos de tan pocas personas, la reina probo su suerte y envió a mensajeros, no con una oferta, no con una súplica, si no con trato que sonaba a una desesperada  petición:

[Vengan y  tomen lo que deseen, si es que  pueden eliminar a los enemigos que acosan a mi pueblo, cada cosa que poseo, este trono, mi corona, el país, incluso mi alma y mi cuerpo, cada cosa que poseo pueden tomarla y hacer con ella lo que quieran.

Si pueden cumplir con este deseo...

Si sus corazones tienen piedad de mí...

Ayúdenos por favor]

Fue escrito en una pequeña carta con una letra deforme e infantil...

Cada consejero de la reina hizo ver la locura que se encontraba realizando la soberana del imperio draconico. Pero a esa mentira mujer poco le importaron las palabras que le dedicaban los hombres que no habían podido frenar aquello que día con día los apuñalaba.

Podía parecer una locura que una reina confiara en tan solo 4 extraños, tan solo porque habían vencido a un capitán y derrotado a un minúsculo ejercito...

Pero ahora 100.000 soldados viajaban a Carne. 100.000 almas atacarían ese pequeño poblado y el mensajero que la reina envió financiado por sus pocas pertenencias, no llegaría antes de que la batalla fuera librada...

Si esos hombres que no estaban atados a ninguna nación sobrevivían a la venganza de un reino entero... la reina draconica ofrecería su alma y  el reino entero, con tal que las 624.000 vidas bajo su cargo, pudieran al menos pasar un día libres de miedo...

7 mensajeros salieron esa misma noche del reino draconico, tomaron diferentes caminos, diferentes rutas para llegar al mismo destino, y sin importar cuántos de ellos murieran, tenían que asegurarse de que alguno de ellos llegara al pueblo carne y después volviera... con los demonios que derrotaron a Gazeff Stronoff.

"La reina ha puesto todas sus esperanzas en una medida desesperada" dijo uno de los consejeros.

-Error... jugué mi última carta y le di todo de mí a una apuesta- respondió la reina.

Quizás la reina hubiera tomado otro camino, pero un informe anterior le indico que este era el mejor camino, pues ahora, la teocracia, el gran poder y ultimo martillo de la humanidad, replegó sus fuerzas y mostró debilidad...

La reina ya tan solo podía hacer esto, y rezar porque algún mensajero volviera con un héroe capaz de afrontar todo esto...

Overlord: Trinidad Caps 1-170Donde viven las historias. Descúbrelo ahora