Parte 76

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Clementine podía recordarse a sí misma frente al gran altar de los 6 dioses durante el día de su selección. Recordaba el rostro y hasta los detalles de la túnica que llevaba la mujer que nombro su talento natural. Y con resentimiento, se recordaba a si misma inflando el pecho orgullosa, cuando el gran consejo la selecciono para seguir una vida militar.

En aquel tiempo, cuando Clementine era pequeña y aun no mostraba los "defectos" con los que nació su mente, ella se sintió auténticamente feliz cuando se le dijo a tan corta edad, que la más grande y noble acción que podría llevar a cabo en su vida, seria morir por su nación...

El talento de Clementine era la razón por la que se entrenó en el combate extremo sin el uso de armadura u alguna otra protección. Fue por su talento que ella siempre peleo en primera línea, aun cuando había personas más capacitadas para tal acción.

Fue por su talento que los altos mandos, temerosos, le negaron a la niña cualquier gozo o disfrute en la vida. Fue por su talento que la condenaron a un voto de pobreza, por el que jamás llego a disfrutar de las riquezas que ganaba al ser parte de la escritura negra. Las comidas eran vomitivas, la cama era incomoda, y a nadie le interesaba su vida...

Pero por sobre todas las cosas, lo que más le molestaba, lo que más repudiaba era que sin importar lo que hiciera, jamás podría vencer a aquel hombre que se había vuelto un problema para sus planes de destrucción...

-Ryuuji no puede ser asesinado de un solo golpe- dijo mientras recordaba aquel momento... -El maldito... ¡Es inmune a los asesinatos!- Grito riendo.

Los seres supremos mantuvieron la calma, pues pese a que las palabras de la mujer podían ser interpretadas como "inmortalidad", ellos entendieron que el hombre solo era inmune a ataques furtivos, a muertes por ataque único.

Pero ese talento solo protegía al hombre de "Golpes", y si esto era así ¿Cómo había evitado entonces el daño por las magias mundiales? El primero en notar la contradicción fue Ulbert.

-¿Y la magia? ¿La magia puede matarlo?- Pregunto Ulbert, intentando confirmar si la magia era también clasificada como un "golpe"

Ulbert estaba disfrazado como un monje, por lo que Clementine se mostró sorprendida y extrañada, pues esperaba esa pregunta del hechicero, no del monje de Ki, quien solo debía poseer magias para para potenciar sus habilidades físicas.

-Si, y no- dijo tranquilamente. –Puede ser asesinado por magias, incluso puede ser eliminado con magias de muerte instantánea, pero su talento lo protege contra cualquier magia que no haya visto antes-

La imagen de las dos damas besando al lancero se reconstruyo en la mente de los seres supremos...

Clementine no estaba mintiendo, y eso significaba que ese sujeto jamas había visto magias mundiales, lo cual era bueno, pero entonces nació otra dura ¿Por qué se había alterado tanto después de ver a las damas si no conocía los hechizos? Mientras Ulbert y Momonga se hundían en esta pregunta, TouchMe pudo palpar la contradicción.

TouchMe intento recordar la información que le habían sacado a los aventureros, a Gazef y al propio Nfirea.

-¿Nos estas diciendo que ese sujeto posee dos talentos?- pregunto TouchMe

La primera pregunta de los supremos tras saber sobre esos talentos fue si era posible obtenerlos mediante objetos o hechizos, o incluso si era posible poseer más de uno, pero todas esas preguntas fueron respondidas por un rotundo "No"

¿Cómo era posible entonces que ese lancero tuviera dos?

La respuesta era... que solo tenia uno:

Overlord: Trinidad Caps 1-170Donde viven las historias. Descúbrelo ahora