Parte 127

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Momonga se una mano a su rostro y se cubrió los ojos. Ulbert sencillamente se perdió en el interior de su té negro. Y el caballero insecto, el paladín de la justicia se quedó mirando al vacío mientras recordaba los días de sus pasantías.

Los tres, sin excepción habían vivido esos malditos turnos de 36 horas, algo aberrante y poco natural que superaban con la ayuda de cafeína y medicamentos. Pero Clementine había logrado pasar de las 24 horas sin los apoyos de la farmacología que ellos tenían, algo que si bien era impresionante, también les dolía en su orgullo.

Incluso a los obstinados NPC's de la tumba se les obligo a los descansos  obligatorios pese a no tener la necesidad verdadera de dormir o comer, por lo que haber dejado que una empleada que si los necesitaba los había convertido en explotadores laborales, una forma de vida más vil y cruel de lo que un demonio o un no-muerto podían aspirar a ser.

El visible pesar de los seres supremos, hizo creer a casi todos los NPC's presentes, que esa extraña forma de actuar venia por el disgusto por la actitud de Clementine. Tan solo Yuri, Sebas y Demiurge supieron ver que no era el caso, pero aun sin saber bien que causaba ese desagrado, los tres se mantuvieron en silencio y esperaron indicaciones.

-Clementine- Dijo Momonga rompiendo el silencio.

Ciertamente el overlord hubiera preferido que fuera alguno de los otros dos quienes lidiaran con este error, pero era claro que ambos esperaban lo mismo de los otros, así que para evitar hacer esperar más a la cansada empleada, Momonga se ofreció.

Clementina se puso firme tras escuchar su nombre pronunciado por el ser supremo.

La forma tan enérgica y firme en la que respondió, hizo más profundo el pesar de los seres supremos.

-Ve a la cocina y pídele al chef cualquier cosa que quieras comer. Después de eso sube a descansar al segundo piso, te llamaremos cuando necesitemos algo de ti-

-¿Eh?- Clementine sintió miedo, creyó que al mostrarle "Sueño" una debilidad de los seres vivos había enfurecido al poderoso Overlord. Rápidamente Clementine intento ignorar su cansancio y busco una razón para permanecer frente a su amo. -Espere, Momonga-sama, hay cosas que debo decirle sobre Khaji...-

Una señal con su mano fue todo lo que el Overlord necesito para acallar la protesta de la asesina

-No nos sirves así de somnolienta- dijo Momonga intentando sonar solemne.-Ve a descansar, antes de tomar cualquier acción debemos considerar la información que trajeron. Cuando llegue el momento te despertaremos, y más te vale estar en condiciones para ese momento-

Clementine sintió que había perdido una batalla importante contra su amo. Se confió. Clementine creyó que el trabajo que desempeño era suficiente para mostrar su valor, más pronto vio que estaba en un error.

Derrotada, Clementine sencillamente obedeció la orden de su amo, pues de negarse nuevamente, seguramente habría perdido más puntos frente a todos los monstruos presentes.

Pero, mientras la mujer caminaba derrotada hacia donde Solution le indicaba, de nuevo la voz de su amo le hablo.

-Pensándolo mejor, dile tu petición a Cz y sube a una habitación. Ella te llevara tu comida cuando esté lista- dijo Momonga.

La expresión cansada de Clementine cambio a una de rebosante alegría. Estaba equivocada, o mejor dicho, estaba en lo correcto. Este amo era definitivamente benevolente con quienes hacían bien su trabajo. Hasta ahora ese no-muerto siempre había recordado agradecerles a sus sirvientes,  después de que estos cumplieran con sus órdenes.

-Cz, muéstrale una habitación- el no-muerto hizo una corta pausa. –Y Clementine, espero no tener que recordarte las cosas dos veces- dijo como una fría amenaza.

Overlord: Trinidad Caps 1-170Donde viven las historias. Descúbrelo ahora