El sueño de todo espadachín es ser el más fuerte.Era tanto así, que incluso dentro de la academia de esgrima a la que acudió Nimble, había algo que se decía a menudo:
Los lanceros buscan hacerse de fama... mientras tiembla detrás de los escudos de la infantería.
Los arqueros sueñan con atravesar con una flecha el corazón de un dragón y hacerse con la gloria, pero desde la distancia, pues se orinarían del miedo si pudieran verlo a la cara.
¿Y los espadachines? ¿Los grandes esgrimistas?
Ellos pelean por todo o nada, pues la única forma en la que uno puede medir su habilidad con las armas, no era comparando el tamaño de sus presas, no era asesinando aun torpe troll que agitaba un garrote que recogió en alguna montaña.
Los esgrimistas debían medirse contra otros de su misma naturaleza, y entre ellos solo había un una cosa que mundialmente se respetaba. Un titulo, el único que deverdad importaba par aun guerrero.
"El más fuerte"
Sin importar a que nación pertenecieran, todos apuntaban a aquel título y, respetaban a quien lo ostentara, así fuera un enemigo. Pues al final, era el único pensamiento que mantenía vivos a los guerreros que vivían y morían por todo o nada...
Porque entre los espadachines no existía el segundo o el tercero más fuerte, y aun si los hubiera, sería una vergüenza que ninguno de ellos apuntara al cuello de quien los superaba...
El segundo y tercer puesto era algo despreciable, y quienes lo ostentaban eran los cobardes o los más fuertes que habían muerto perdiendo su puesto como los mejores...
Nimble ahora se encontraba frente a su gran sueño, la razón por la cual se ofreció para esta misión, y aun que había jurado buscar lo mejor para el imperio, desde el fondo de su corazón, el caballero sabía que ansiaba este momento.
Realmente no le importaban los insultos o la negativa, el bien pudo ignorarlas, pero lo que realmente deseaba era enfrentar y matar a esta extraña criatura que había salido de la nada, pero que ahora se proclamaba como la más fuerte...
"Detuvo mi espada" se dijo así mismo Nimble mientras sonreía complacido ¿Hacia cuanto no encontraba un enemigo que durara más que una estocada?
Mas sin embargo, Nimble recordó entonces que no se encontraba solo, recordó que viajaba con alguien, y pensando en su compañero, Nimble dio un gran salto hacia atrás, intentando ganar distancia. Quería enfrentar a Enri, pero también debía considerar la vida de quien lo acompañaba.
El jinete de grifo, siendo fiel a sus principios y a la orden de mantener vivo a Nimble, llamo a su bestia alada sin recibir órdenes. El jinete silbo suavemente, era un sonido entrenado, algo que pudiera ser escuchado por su bestia aun si se encontraban a medio mundo de distancia.
Desde el la lejana entrada del pueblo carne, la bestia extendió sus alas y se alzó poderosa en el cielo, vislumbro el lugar donde se encontraba su jinete y se lanzó hacia él.
Lamentablemente, Nimble y el jinete se encontraban dentro de una pequeña cabaña rodeada de aventureros, seres acostumbrados a lidiar con lo no humano, y eso incluía a los poderosos grifos...
Pronto, desde el exterior comenzaron a escucharse gritos, y entonces el jinete se dio cuenta de su error.
"Bola de fuego""Disparo certero"
"¡ELECTROSHOCK!"
Gritaron poderosamente 3 aventureros, y seguido a los gritos se escuchó un lamento. La bestia gimió de dolor y provocando un estruendoso sonido que anuncio al jinete lo ocurrido, cayó al suelo...
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Overlord: Trinidad Caps 1-170
FantasyGrandes calamidades han arriban al nuevo mundo. Un overlord gobernante de una tumba llena de poderosos monstruos llega a una tierra que no podrá plantarle cara, pero diferente a la historia original, esta vez llegara también acompañado por un camp...