Parte 95

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El mundo de dónde venían los supremos se asemejaba mas a un infierno que al paraíso postmoderno que habían soñado sus ancestros.  La tecnología había avanzado lo sufriente para que la humanidad pudiera sobrevivir y prosperar en un mundo contaminado y hostil, pero era un mundo frio y carente de belleza, un mundo al que BluePlanet veía con tristeza mientras reprochaba sus ancestros por haber permitido que muriera la magnificencia de la naturaleza.

El mundo de dónde venían los supremos (Según Ulbert)  era uno que merecía ser arrasado y colmado de demonios.

Aquel mundo estaba vacío para el alma Momonga, y indiferente para un ser que lo tenía todo como TouchMe.

Sin embargo, cuando los 3 llegaron al nuevo mundo, lo que más les sorprendió, lo que más los conmovió fue poder ver un cielo estrellado, interminables pastizales y bosques que abarcaban más espacio que las ciudades modernas.

En el mundo de los seres supremos, los bosques masivos habían quedado en el olvido hacía ya mucho tiempo. La mayoría del mundo tan solo conocía aquellos paisajes idílicos por imágenes digitales o fantásticas representaciones dentro de juegos, pero claro... nada se comparaba a los reales.

Tanto era así que se decía que algunos millonarios poseían invernaderos con varios kilómetros de tamaño, donde podían dar largos paseos dentro de sus bosques privados, algo que esta fuera del alcance de asalariados como Momonga, Ulbert y BluePlanet. Incluso TouchMe quien gozaba de un mejor trabajo y comodidades, jamás llego a ver uno en vivo hasta que llegaron al nuevo mundo.

Para los seres supremos, y sobre todo para aquellos que fueron amigos de BluePlanet, los bosques eran que se codeaban con lo divino.

Pero lamentablemente, los pobladores de este mundo no podían ver la belleza en esos lugares, pues para ellos los bosques y la muerte iban de la mano.

Había un buen motivo por el que los humanos de este mundo se asentaron de Planicies donde les era difícil conseguir minerales y otros recursos, y esa razón era claro que en los bosques, montañas y lagos vivían monstruos, bestias, y algunos despreciables heteromorfos y semi-humanos, creaturas que superaban ampliamente a los débiles humanos.

Se podría decir incluso que los humanos habían sido exiliados de las montañas llenas de minerales, de los bosques colmados de plantas medicinales y de las costas donde las fronteras se habrían hacia un mundo desconocido...

Hace tiempo, 6 dioses determinaron que la humanidad de este mundo tenía las manos atadas debido a las diferentes razas  que limitaban hasta donde podían expandirse el hombre como especie. Hoy en día algunos bosques entre los reinos se encontraban ya libres de las grandes amenazas semi-humanas y no seria incorrecto decir que esta enorme zona donde ahora habitaban los humanos fue pacificada por los 6 dioses y la teocracia hace ya más de 600 años.

La teocracia eran un bastión importante de la humanidad, era el pilar que lo mantenía de pie y por ello nunca una nación humana declaro la guerra a la teocracia o la forzó a revelar los secretos que celosamente guardaba, pues se sabía bien que si algún día aquella nación caía, también lo haría el reino santo, Re-Estize y el imperio Baharut. La débil humanidad caería si así lo hacían esos defensores de los humanos.

Todo el mundo estaba en equilibrio.

Por el norte, el gran reino de Re-Estize compartía frontera con el consejo de Argland liderado por el poderoso Lord dragón de Platino. La paz entre ambas naciones estaba asegurada gracias a la amistad de una vieja aventurera con el poderoso Lord dragón.

Por el este, Re-Estize tenía una gran cordillera de montañas donde habitaban los enanos que rara vez se mostraban ante el mundo, y también compartían frontera con el imperio Baharuth, la nación humana mas rica hasta la fecha, y aun que el reino y el imperio estaban en guerra, esta no era mas que un juego político por parte del imperio para absorver al reino.

El imperio Baharuth por su parte comparte fronteras por el este con la alianza de ciudades estado, las cuales estaban compuestas por heteromorfos y semi-humanos, pero debido a sus bajos números y al hecho de que todos fueran de distintas razas, era imposible que organizaran un ataque contra el imperio quien seguramente seria capaz de detener cualquier ataque.

Por el sur, el imperio Baharuth compartía frontera con  las tribus de hombres bestia que aun que hostiles con los humanos estaban separados de ellos por una gran cordillera, y quienes realmente tenían problemas con ellos era el reino draconico que también compartía frontera por el sur con  el Imperio Baharuth.

No había mucho que decir del reino draconico, pues su gloria antigua había desaparecido y ahora tan solo quedaba una nación empobrecida intentando luchar por la supervivencia...

El país más al oeste, el reino santo tenía su muralla para defenderse de los semihumanos al sur de la cordillera de Re-Estize.

Pero era la teocracia Slain quien compartía frontera con el poderoso reino de los elfos y un sin número de naciones semi-humanas y heteromorficas que las otras naciones ni siquiera conocían y que seguramente atacarían y conquistarían si tan solo la teocracia no les cortase el paso hacia el norte.

Todos lo sabían, la teocracia Slain era la puerta que separaba a la humanidad del infierno que aguardaba en el sur, era la única fuerza que detenía todos los ejércitos no humanos que ansiaban tomar las planicies en el norte del continente.

Y por ello... incluso en el reino de los elfos que eran enemigos jurados de la teocracia hubo cierto miedo cuando llegaron los informes sobre la teocracia retirando las tropas de avanzada que luchaban contra las grandes amenazas del sur...

En las naciones no-humanas hubo miedo y gran cantidad de líderes retiraron sus tropas pues creían que la teocracia preparaba un golpe decisivo contra sus enemigos.

La información aun no llegaba a las naciones humanas, pero seguramente cuando lo hicieran todos entrarían en pánico. No se descartaba entonces la posibilidad de que la guerra humana entre el reino y el imperio tomara un receso, pues todos sabían perfectamente que sucedería si ese movimiento de la teocracia se debiera a su debilidad...

Albedo asesino a la mayor parte de la escritura negra, los soldados de elite habían caído y aun que había reemplazos para los asientos, las habilidades de esos guerreros habían desaparecido para siempre y sus reemplazos no serían tan poderosos. La teocracia Slain había perdido gran parte de su poder militar y esto causaría caos si no se encontraba apronto una forma de reponer toda la fuerza que habían perdido en aquel lugar mientras la teocracia avanzaba hacia una reunión intentando encontrar la paz.

Puede que aun no lo supieran, y que incluso esos dos genios no se hayan dado cuenta.

Pero debido al ataque de Pandora's Actor que mato a la mayor parte de la escritura negra y a la devastación de Albedo que elimino los cuerpos e hizo imposible la resurrección de esos guerreros, habían iniciado un débil proceso de debilitamiento para con los enemigos  que Nazarick se acababa de ganar.

Sin saberlo, los habitantes de Nazarick crearon la mayor crisis a la que los humanos el nuevo mundo se hubiesen enfrentado en los últimos 600 años.

¿Y porque eran tan importantes los árboles y bosque al inicio de este relato?

Porque tras enterarse de que Albedo había arrasado con uno de estos, se le agrego otra semana mas a su castigo.

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Al interior de un pequeño palacio cercano al frente de batalla,  un elfo de piel de piel pálida, cabello completamente blanco y una curiosa con una curiosa heterocromia apartaba a sus concubinas mientras indignado leía la carta que le había sido traída.

-¡¿De dónde sacaron esta información basura?!- grito el elfo con heterocromia tras leer el informe en sus manos.

Un elfo, uno pequeño y de apariencia débil que se encontraba arrodillado respondió con miedo.

-¡Su majestad! ¡Le juro por mi vida y la de mis compañeros que la información es precisa! El general de la segunda brigada... el vio a los soldados irse para reunirse en su campamento principal, y los exploradores confirmaron que los humanos se encuentran en reti...-

Una risa se escuchó e interrumpió al mensajero, pues bien era sabido que nadie podía dar freno a unas palabras del gran rey.

-Así que finalmente se rinden...- dijo feliz mente el rey de los elfos mientras se regocijaba en la idea de poder al fin conocer a su hija...

Overlord: Trinidad Caps 1-170Donde viven las historias. Descúbrelo ahora