Un hombre común, sin importar su poderío o habilidad, jamás podría aspirar a convertirse en un caballero si no nacía bajo una condición única y especial.
El título por tanto era inalcanzable para algunas personas, y poco a poco se convirtió en un frio recordatorio para la plebe "Hasta aquí es donde tienes permitido llegar"
El mayor ejemplo de esto, era sin duda alguna Gazeff Stronoff, quien pesar de ser aclamado como el humano más fuerte del mundo, tener el respaldo de su rey y ser alabado como un héroe por el pueblo, jamás pudo ser nombrado como caballero.
Por ser plebeyos, no tener un nombre de familia y ser considerados extremadamente peligrosos, personas como el capitán guerrero o el propio Brain Unglaus no podían siquiera comprar títulos y superar aquella barrera.
Y aunque claro, el título de caballero podía parecer tan solo una forma elegante de nombrar aun guerrero, la realidad era otra.
Los caballeros tenían privilegios especiales. Poder llevar un arma mágica en el palacio real, tener acceso a zonas restringidas e incluso poder llevar consigo durante todo el dia los grandes tesoros el reino, eran tan solo algunos de los beneficios de los que gozaban los caballeros.
Era solo debido a su título como noble que Lakyus de las rosas azules podía permitirse desfilar por las calles del reino en compañía de su espada maldita.
Era por ello que Gazeff tenía que pedir permisos especiales al rey un consejo de nobles para poder portar los grandes tesoros del reino.
Y es que dentro de las naciones, siempre existió el miedo a que un poderoso portador de algún tesoro ancestral mostrara sus colmillos contra la nación donde vivía. Esa era la razón por la que a los plebeyos jamás se les permitiría postrar sus manos sobre esas armas.
E incluso los aventureros que se jactaban de su independencia, tenían que demostrar ser dignos de confianza antes de poder subir de rangos y por tanto, permitirles explorar zonas donde se sospechaba podían encontrarse algunas de estas antiguas armas.
Y aunque sonara como un mal trato o una maldición, incluso los aventureros que lograban alcanzar la cima y podían hacerse con una de estas arma, tenían un trato de por vida, un juramento de jamás usarlas contra una nación, pues de otra forma serian exterminados por el mismo gremio de aventureros que los crio.
Por todo aquello, incluso para la princesa Renner pareció algo impensable lo que paso aquella tarde...
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El rey hizo llamar al guarda espadas de su querida hija.El chico, el pequeño perro de la princesa Renner se encontraba completamente solo en presencia de su rey, algo en verdad impensable, pues bien se sabía que este muchacho no era un noble con un antigua familia respaldándolo o algún rico comerciante con todo que perder.
Climb solo con el rey. El chico tenía su espada, y eso soberano no estaba acompañado por ningún guardia.
Si fuera el deseo del Climb, este podría cortarle el cuello a Ramposa y no habría nadie que lo detuviera, y aun que el muchacho no tenía motivos para hacer eso, seguía siendo un riesgo que el soberano de una nación no debía correr.
Que el rey se pusiera a sí mismo en una situación tan delicada era un mensaje para el chico.
A diferencia de la mayoría de guardias en el palacio, ese joven no era un noble, no era un guerreo veterano o algún genio de la espada como Gazeff.
Tan solo era un niño huérfano que la princesa Renner recogió de la calle y mantuvo en el palacio por su peculiar personalidad altruista.
Climb no era el mejor guerrero en el castillo, había quienes lo superaban ampliamente, y aun que no se le podía llamar una persona débil, muchos de los guerreros de Gazeff superaba a Climb ampliamente.
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Overlord: Trinidad Caps 1-170
FantasyGrandes calamidades han arriban al nuevo mundo. Un overlord gobernante de una tumba llena de poderosos monstruos llega a una tierra que no podrá plantarle cara, pero diferente a la historia original, esta vez llegara también acompañado por un camp...