Cuando se creó Nazarick, había un buen puñado de ideas que todos querían implementar a la nueva guarida del gremio.
Entre las propuesta más populares estaba el construir una habitación para cada miembro. El proyecto de las habitaciones se aprobó por decisión unánime, pero pronto se volvió algo problemático, pues se quería que la habitación fuera diseñada y decorada por el propietario de la misma, algo que resultaba más fácil decir que hacerlo.
Habia muchas personas dentro del gremio que no tenían habilidades que les permitiesen crear algo "Bonito" (Momonga era una de esas personas) y ya que no se queria que las habitaciones ese vieran muy vacías o simples, Rette, un dullahan que trabajaba en una importante compañía constructora creo un diseño "Estándar" para quienes no tuvieran confianza en sus propias habilidades. Aun que llamar a su creación un diseño "Estándar" parecía un insulto, pues en ese proyecto, Rette coloco sus más salvajes fantasías y le dio un nuevo significado a la palabra "Lujoso"
Habitaciones como la de Momonga hermosos diseños gracias a Rette.
Pero había quienes habían creado sus propios diseños. Entre esas personas se encontraba Ulbert y TouchMe.
Debido a una llamada de emergencia, Momonga y Ulbert fueron al cuarto de TouchMe. Una habitación con piso de mármol de una sola placa, con paredes completamente blancas y pilares incrustados en ellas, haciendo parecer que el techo era más alto que en lo que en realidad era. Y aunque los únicos muebles en la habitación eran algunos sillones de piel, un espejo de visión lejana, un escritorio y una cama increíblemente lujosa, el cuarto se veía bastante lleno gracias a las más de 28 estatuas de ángeles y dragones que decoraban todo el lugar.
Aunque quizás lo que más llamaba la atención eran las enormes ventanas por las que entraba lo que parecía ser luz natural. Algo sorprendente de las ventanas es que al mirar a travez del cristal, uno podia ver campos elíseos cosa que debía ser imposible ya que se encontraban bajo tierra. Seguramente se trataría de magia pero aun asi...
La habitación de TouchMe era abrumadora, y Momonga se sintió un poco inferior al comparar este cuarto con el diseño que el había elegido inicialmente para el suyo.
Pero una vez la mirada de Momonga se dirigio al espejo de visión lejana, todos sus pensamientos se detuvieron, y su mente se dedico solo a analizar a la extraña mujer que habia llegado a atacar el pueblo. No parecía una mercenaria enviada para acabar con los 3 seres supremos, parecía mas una lunática que habia llegado ahí por casualidad.
En un inicio, al ver que Enri podría morir contra ella, Momonga estuvo por ordenar la ejecución de esa lunática, pero cambio de opinión tras ver que esa mujer era capaz de usar esas dichosas artes marciales. Y la idea de asesinarla quedo lejos de discusión tras intuir por sus palabras que esa chica conocía algo acerca de la armadura que le había dado a Enri...
Tras ver la batalla todos coincidieron en que la lunática era muy superior a Enri y a esos aventureros que se suponía eran algunos de los humanos más fuertes del planeta. Por su actitud y por haber herido gravemente a los aventureros, TouchMe sugirió enviarla con Neurotis para que fuera interrogada y posteriormente asesinada. Ulbert por su parte quería que Demiurge torturara para sacarle información y posteriormente diseccionarla para aprender mas del cuerpo de esa mujer, quien por su forma extraña de moverse podria no tratarse de una humana al 100%.
Pero Momonga sugirió una tercer idea, una que los otros 2 aceptaron de mala gana, pues no les agradaba mucho, pero dado que la lógica de Momonga era sin dudas superior, dieron su "si", todo por el bien de Nazarick...
.
.
.
."Al abrir los ojos veo solo un techo de piedra... Vaya, ¿Cuántos años hace ya que me encuentro con lo mismo al despertar? Y al levantarme como siempre, tengo que lidiar con ese maldito dolor de espalda por dormir en un colchón viejo y duro.
¡¿Porque mierda tengo que seguir soportando esto?! ¡Debería poder dormir en un lugar decente ahora que estoy en la escritura negra!" se dijo a si misma Clementine.
Clementine había formado parte del culto del dios del fuego, y como monja de este culto gano un par de ojos escarlata que podían ver más allá de las ilusiones y que eran capaces de encontrar la verdad... pero además obtuvo un voto de pobreza, que al igual que sus ojos, debían permanecer con ella el resto de su vida.
Eso explicaba que Clementine, aun después de unirse a la escritura negra, siguiese durmiendo en su celda dentro del templo del dios del fuego, pues por ese maldito voto no podía aceptar las enormes cantidades de dinero que eran pagadas comúnmente a los guerreros de la escritura negra que arriesgaban su vida, ni tampoco las lujosas habitaciones dentro del palacio.
Clementine se puso de pie mientras un enorme dolor de cabeza la acosaba, pero entonces... noto que su dolor de espalda habitual estaba ausente, y volteo a su cama para encontrarse con un colchón cubierto con sábanas blancas que se sentía como una mullida nube debajo de ella.
-¡¿Qué es esto?!- grito confundida, y como si de una llave se tratara, su grito abrió su mente y dejo salir su recuerdos, recordó entonces como había escapado de la teocracia, su traición, los asesinatos, y que la noche anterior a esta había sido capturada por un grupo extraño compuesto por ninjas y dos hermosas sirvientas.
Con pánico miro sus brazos, que según recordaba habían sido destrozados. Pero en lugar de encontrarse con feas heridas o cicatrices horribles, noto que su piel era ahora más tersa y hermosa.
Había sido sanada.
-¡HA! ¿Quién en su sano juicio cura a una prisionera?- se dijo mientras veía su mano.
Fue entonces cuando el sonido de un objeto deslizándose por el suelo llamo su atención. Miro a la hacia los barrotes de la celda donde se encontraba y vio un gran trozo de carne sobre una charola plateada, que a los lados tenía una gran cantidad de salsas y vegetales.
Clementine se acercó hacia la charola con una cara complicada. Claro que no quería comer algo que le fuese dado por sus captores, pero ya que los mismos la habían sanado, sería difícil decir si querían lograr algo al darle esa clase de comida, y tras ver la cama que la habían puesto, entendió que bien podrían ser la clase de idiotas que gustaban de tratar bien a los prisioneros.
O quizás solo se había topado con algún pervertido tratando de encantarla...
Fue entonces cuando en su mente apareció la idea. Con prisa se acercó a los barrotes de su celda para ver a la persona que le había traído la comida. Justo como lo esperaba, esa persona seguía a la vista y se encontraba en medio de lo que parecía ser una arena de combate, muy parecida a la del imperio.
-¡HEY, BASURA!- grito Clementine. -¿Dónde demonios estoy?-
El carcelero que le había ido a dejar su comida volteo confundido, y en el momento en el que Clementine vio su rostro, enmudeció...
La extraña carcelera se acercó y vio que Clementine había ignorado completamente la comida.
Una preciosa niña con el cabello anaranjado y con un parche cubriendo uno de sus ojos, que vestía con una extraña combinación de armadura y ropa de maid, le hablo con voz suave y pausada.
-come... o... me van a regañar- dijo con un tono inexpresivo, pero mientras hablaba parecía querer ocultarse tras la bufanda que llevaba, lo cual incluso a ojos de Clementine fue un gesto adorable.
-Tan linda...- dijo sin pensar.
.
.
.
.
.
Nota del autor: El capítulo de hoy fue más lento de lo que hubiese deseado y tambien mas corto, pero así tienen que ser algunos, miren... ya tengo el cap de Camelias rojas por lo que posiblemente suba también el de overlord mañana, así que... ya veremos, espero les haya gustado.
ESTÁS LEYENDO
Overlord: Trinidad Caps 1-170
FantasíaGrandes calamidades han arriban al nuevo mundo. Un overlord gobernante de una tumba llena de poderosos monstruos llega a una tierra que no podrá plantarle cara, pero diferente a la historia original, esta vez llegara también acompañado por un camp...