💖Te Amaré Siempre: Sólo Dios Sabe Cuánto Te Amo... Sólo Dios lo Sabe (I)💖

💖Capítulo 124: Propuesta de Negocios💖

Nota: Llevamos más de tres meses esperando la publicación de estos episodios, si contando él que le sigue que tanto nos gustó idear... Esperamos que los disfruten tanto como lo hicimos nosotras al elaborarlo. ¡Ah! Y póngale música de fondo.

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En la madrugada y en la cabaña de Omar y Carolina:

Omar no podía dormir pensando en que Fernando se estaría peleando con Lety en la habitación. Carolina que lo siente inquieto en la cama le pregunta:

- Carolina: ¿Qué te ocurre mi Sol?, ¿por qué estas así?

- Omar: Es que hoy que estamos acá, me di cuenta a la llegada que este fue el lugar que Leticia y Aldo estuvieron cuando estaban saliendo.

- Carolina: ¿Y qué hay con eso?, ¿y tú que tienes que ver ahí?, ¿cómo lo sabes?

- Omar: Ay mi vida... La historia es muy larga.

- Carolina: Resumen, resumen, resumen. ¡¡¡Pero ya!!!

- Omar: Ay mija es que aquella noche...

- Carolina: ¿Qué pasó esa noche?

- Omar: Yo estuve aquí.

- Carolina: ¿Cómo qué estuviste aquí?

- Omar: Si mi amor, esa noche estaba siguiendo a Leticia.

- Carolina: ¿Tú con Leticia?, ¿cómo qué seguiste a Leticia?

- Omar: Si, ¿te acuerdas el día que fuimos contratar este Comercial?

- Carolina: Si.

- Omar: Pues ese día te mencioné de aquella vez también.

- Carolina: ¿Ah, fue aquella historia?, ¿y también estuvieron aquí?

- Omar: Si mi bebé, estuvieron acá también.

- Carolina: Y de seguro tú le dijiste a Fernando que este fue el lugar y por eso fue el grito que soltó en la tarde, al llegar.

- Omar: Si, efectivamente.

Carolina hace el gesto de negación batiendo las dos manos y diciendo:

- Carolina: No puedo con ustedes, de verdad que no puedo.

- Omar: ¿Ay mi amor, se habrán peleado?

- Carolina: No lo creo... No escucho ninguna discusión al respecto, al contrario, escucho silencio.

- Omar: Ay mí amorcito, entonces podemos dormir acurrucaditos. Cucharita con cucharita.

- Carolina: ¡Si mi Rey, pero tranquilízate, eh!

- Omar: Si mi tesoro, ya estoy tranquilo aquí con tu calorcito.

En la mañana:

Todos despertaron y los esperaba un desayuno auspiciado por Alain Méndez. Cada cual disfrutó de lo que más le gustó y en la despedida con la presencia de Alain, se dieron la mano como amigos y Alain los invita a su despacho privado.