💖Te Amaré Siempre: Sólo Dios Sabe Cuánto Te Amo... Sólo Dios lo Sabe (I)💖

💖Capítulo 90: Cena Romántica💖

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Conceptos:

Las chicas del Cuartel, estaban muy contentas preparándose para la salida, pues era el día pactado para la cena romántica conjunta de Paula María, Simón, Sara, Félix, Juanita, Ortiz, Celso e Isabel. En eso sale López con sus gafas oscuras muy apurado para que no se le noten los rasguños de la cara y mientras espera el elevador...

- Sara: ¡Uff, todavía como que hace mucho Sol chicas, pero no encuentro mis gafas! ¿Será que usted López me presta las suyas?

Dijo Sara, mientras se acercó rápidamente a López y le quitó los espejuelos.

- Sara: ¡Ah, Don López! ¿Con quién tuvo peleas usted? ¡Mire usted es un ejecutivo de altura en esta empresa y esas peleas le bajan la dignidad a la misma!

- López: ¡Devuélvame las gafas, no le he dado ese tipo de confianza!

- Sara: ¿No será que se propaso otra vez y el huracán de su esposa lo azotó?

- López: ¡Ese no es su problema! ¡Deme los espejuelos!

Sara corría con las gafas de López por todo el local y él la seguía tratando de quitárselas, pero no podía debido a la altura de la mujer. Todas las demás, reían sin parar.

- Sara: ¡Ay Don López, no sea mal agradecido! ¡Solo queremos ser solidarias con usted y darle algunos consejos!

- López: ¡Qué no se meta, le dije! ¡Esto le puede costar su cargo!

López, logra quitarle las gafas a Sara y se las vuelve a poner. Entonces Sara, se pone en guardia y le dice:

- Sara: ¿Qué me va a hacer, eh?, ¿me va a despedir? ¡Mire que lo puedo demandar por acosador de mujeres y tengo testigos! ¿Verdad chicas?

Sale Marisol de su puesto, desde donde estaba contemplando la escena con cara muy apenada y se interpone entre Sara y López.

- Marisol: ¿A ver, esto es un ring de boxeo o qué? Sara, me parece que te propasaste con Don López, hay que respetar la privacidad de cada cual. Por Dios.

- Paula María: ¡Qué bien, se ve que no lo conoces!

- Juanita: ¡Cómo si él respetara la nuestra!

- Martha: ¡Muchos malos ratos nos ha hecho pasar y tenemos a Lety de testigo!

- Irmita: ¡Si es verdad, pero ya déjenle! ¡Ya basta chicas!

- Marisol: ¡Don López, perdone usted! ¡No tome en cuenta el desagravio este de las chicas, ellas están dolidas con sus cosas! Piense que no sería nada agradable para ninguna de las dos partes enfrentarse en la ley por esto. Sería un bochorno en lo personal para cada uno y para la empresa un escándalo.